-Todos
estamos solos. Por eso tenemos amigos. Para que la soledad sea llevadera.
Me
ocurrió en las dos temporadas anteriores y me pasó lo mismo con ésta. Me metí
en ella bastante después de que terminara. Es raro porque me gusta. Pero
siempre pienso que me va a dar menos de lo que espero.
Me
interesó la primera, me sorprendió que la segunda aguantase y, con la tercera,
bueno, sí ha bajado el nivel. Mr. Mercedes dio todo lo que tenía que dar.
Entiendo lo que quieren hacer: el mal, sigue actuando en
consecuencias aun después de que creamos haberlo erradicado.
Me
acerqué a ella por el misterio y me quedé por sus personajes. Aunque, en el
fondo siempre sucede eso, ¿no? Lou evolucionó magistralmente. Empezó siendo una
lesbiana cliché, se transformó en una mujer llena de terrores y, finalmente, en
una persona con complejidades. Además están la majísima Holly y Jerome y Bill
Hodges, por supuesto.
Confieso
que uno de los principales problemas de esta temporada fue el juicio, que ya sabes
que los odio. Malditas leyes que corrompen la justicia. Otro problema es que el
nuevo crimen, Morris y Alma me importaron tres pimientos. Aunque Alma da miedo.
Menuda perturbada. Sus arrebatos de violencia son lo más impactante.
Pues
eso. Personajes. Bajó el nivel como cabía esperar pero se deja ver.
No hay comentarios:
Publicar un comentario