Oxígeno

Partimos de la idea de que nunca me ha gustado Alexandre Aja. Tampoco ahora. Me pregunto a veces por qué veo cosas de directores que no me gustan. Supongo que esta semana se trataba de elegir entre dos directores que no me gustan, Alexandre Aja o Zack Snyder con su Ejército de los muertos. Y opté por el que consideré menos malo.
En cualquier caso, más allá de favoritismos, me parece que Oxígeno es una variante poco inspirada de Buried de Rodrigo Cortés. Buried gustará más o menos pero es una auténtica virguería. Este Oxígeno no lo es tanto. El cubículo se presta a más juegos y, por alguna razón, el espectador sí sale con mucha frecuencia del encierro. Sea para mostrar un flashback, sea para lucirse con lo bonita que es la nave espacial. Manejar la tensión de ese modo es más sencillo (y lo logra, es verdad) pero me parece que traiciona la premisa.
En cualquier caso, sin ser nada del otro mundo y si te gusta lo claustrofóbico, se deja ver.
Lo más meritorio es la interpretación de Mélanie Laurent, absolutamente intensa. Le peli merece la pena sólo por eso. El guión también debería ser mejor. El final, en cierto sentido, es previsible.