16/1/22

El páramo

Esta ópera prima de
David Casademunt demuestra que va muy bien de técnica. Fabulosa su planificación y fotografía. El páramo infinito de Teruel y una cabaña de piedra. Con eso le sobra para ofrecernos unas imágenes maravillosas que funcionan por sí mismas.
Y ese es el problema porque la trama, ay, es difícil de encontrar. The Relic hizo algo portentoso al encontrar las equivalencias entre el terror y el Alzheimer. La metáfora de Casademunt hacia la depresión se topa con un obstáculo: queda definida con una frase y ya está. Le falta desarrollo, situaciones, evolución. Le falta guión. No es suficiente con salir a pegar tiros al páramo o con un montaje onírico. La película no es larga pero sí parece vacía en muchos momentos. Y uno sigue viéndola, insisto, sólo por su puesta en escena.
El director debe agradecer el esforzado trabajo de Inma Cuesta. Es una peli muy difícil de sostener si tu actriz principal no está entregada.

No hay comentarios: