Criminal. Temporada 1

-Allí son más antiguos. Suelen preferir las pruebas.

Escenario: siempre el mismo. Sala de interrogatorios, sala al otro lado del espejo, pasillo y descansillo. 3 capítulos franceses, 3 alemanes, 3 ingleses, 3 españoles. Cada nacionalidad aporta el mismo equipo de interrogadores durante los 3 capítulos. Los acusados cambian.

Una serie muy poco arriesgada, ceñida en todo momento a una estructura rígida. No existe un capítulo en tiempo real, un capítulo en plano secuencia, un capítulo cómico, un capítulo en el que se invierten los términos, un capítulo en el que el interrogado descubre que el poli es el culpable, un capítulo en el que el relato no sea lineal… No. Ningún atrevimiento formal. Ningún juego.

Además todos los polis se llevan mal en los cuatro fragmentos, haciéndose la puñeta unos a otros. Algo mejor se llevan los ingleses. Y por lo tanto se hacen todos parecidos, repetitivos. Quedan las tramas.

De la parte francesa me gustó el primero, tocando un tema delicado: el Bataclan. La chica que estaba (o no) en la sala.

Los alemanes me interesaron los tres por distintos motivos. El primero muestra los coletazos de la reunificación de Alemania y sus fantasmas. El segundo es pura incorrección política con un giro de tuerca a la violencia de género. Y el tercero vuelve a jugársela con una mujer psicópata, cosa que no suele verse.

Me sorprendió, negativamente, la tibieza de los ingleses. Controlan bien el ritmo (especialmente el primero con David Tennant) pero poco más. Todos muy flemáticos, muy británicos. Contenidos hasta en el más grave de los dramas.

De la terna española destaco el segundo. Ves venir el final y estás preparado, pero para lo que no estás preparado es para la interpretación emocionalmente desgarradora de Inma Cuesta. La mejor de las interpretaciones de la serie. Se lo ha currado. Y Emma Suárez también muy bien como contraparte y contrapeso.

Pero el conjunto, como digo, bastante prescindible. Han ido a jugar sobre seguro y eso significa que no gana el espectador.