30/6/25

Lume. Temporada 1

Estamos en Seara, Portugal, cerca de A Raia, esa difusa frontera geográfica, política y cultural que separa Portugal de Galicia. O que une. Hay incendios y a Seara vuelve la hija del Habaneiro. Es periodista y es odiada por todo el mundo.
Anteayer defendí a M3GAN 2.0 y luego descubrí que las calificaciones de crítica y público eran bajísimas. Pero sostengo lo que dije. Hoy ya he visto las calificaciones de Lume (malas) pero también voy a defenderla.
Empiezo con lo negativo.
La serie quiere ser tan naturalista que alarga las conversaciones hasta extremos agotadores. Un ejemplo: Lucía intenta convencer a Xan de que vuelva a casa de su madre. Minutos de autenticidad. Y el espectador suplica que Xan se deje convencer de una puñetera vez. Hay decenas de situaciones así. Como si no conocieran la elipsis. Resulta imposible para los actores sostener ciertos diálogos y situaciones (esa bronca del GNP en el último capítulo es una pesadez).
Lo malo está en ese guion de circunloquios, redundancias, charlas entremezcladas… Un poco como le pasaba a Sherlock and Daughter.
Pero qué bien dirigida está. Dirige Sérgio Graciano unos capítulos y Giselle Llanio otros.
A veces colocan la cámara en lugares insospechados (extremo de un hato de periódicos, por ejemplo). O cosas como ese dron que cambia de escena (como el sol de Lawrence de Arabia) o travellings poco llamativos pero difíciles de ejecutar.
Me fascina lo bien que juegan con el fuera de campo, la profundidad de campo, reflejos… En el capítulo 2 Graciano usa ese recurso con una habilidad imponente y una eficacia que raras veces se ve.
Es una de esas series en las que guion y dirección se dan de bofetadas. Pienso que la dirección lo salva y que gracias a ella, la trama, algo simple, logra sostenerse hasta el final.
En el apartado interpretativo hay de todo. Pero ya digo: algunas veces les piden a los actores cosas imposibles. Cristina Castaño unas veces está bien y otras veces hace lo que puede.

29/6/25

F1: La película

-La esperanza no es estrategia.
Mi interés por la F1 es tanto como por el fútbol: ninguno. ¿Siento emoción, tensión en las carreras? No. ¿Me sube el ritmo cardiaco en las curvas o por ver quién gana? No. ¿Me hundo en el asiento como si realmente me sintiera aplastado por 5g? No.
Soy totalmente inmune a la adrenalina del motor.
Creo que no hay ni una sola escena que no sea un cliché. Es una película de superación deportiva compuesta con retazos de otras. Cliché, tras cliché, tras cliché. Incluso fuerzan la estructura para meter más clichés.
El tipo caído en desgracia que viene a por su resurrección, el chico negro que lo ha tenido difícil, la mujer ingeniera que lo ha tenido difícil, el jefe con pasta dispuesto a arriesgarlo todo… Accidentes, obstáculos externos, peleas internas. Has visto esta historia en boxeo, hockey, hípica, baloncesto, fútbol americano, béisbol...
Pero ninguna de ellas estaba interpretada por Brad Pitt, Javier Bardem, Kerry Condon. En serio. Los ves a los tres, juntos a por separado (mejor en parejas o trío, la verdad) y te los crees. Sin poner especial empeño. Están muy lejos de sus mejores papeles pero crees que se han dedicado a eso toda su vida. Ah. Y Kim Bodnia.
Y de eso se trata una buena interpretación. Pero voy a insistir: son clichés y, en mi opinión, con un guion mejor escrito, menos preocupado por lo comercial, se podría haber logrado un resultado mejor. Cinematográfico, desde luego. La taquilla confía en tener todo el veranito para arrasar.
Para todos los aficionados a la F1 será también un aliciente ver los cameos de todos los corredores reales.
La verosimilitud es tan nula como la de Top Gun. Y a nadie le importa.
Un entretenimiento eficaz, sin ninguna trascendencia pero te comes las innecesarias dos horas y media sin aburrirte y cumple con su claro objetivo: hacer dinero.
La única duda es. ¿Hará tanto dinero como para que exista una segunda parte Baja 1000 o Rally Dakar?
-El dinero no importa.
-Entonces, ¿por qué lo haces?

28/6/25

M3GAN 2.0

Una vez abierta la caja de Pandora (o
M3gan) la cosa no iba a quedarse ahí. El FBI creó a Amelia. Y cuando Amelia decidió no obedecer fue necesaria M3gan 2.0.
No lo entiendo. ¿Cómo es que es tan buena? No esperaba nada, absolutamente nada bueno de ella. Porque es una película que se hace a rebufo de los millones que hizo la primera. Haz más de lo mismo y ya. Mi apuesta iba por un desastre con dos chistes.
A mi me ha parecido mejor que la primera. A veces recuerda a Terminator. O Terminatrix. Que rima un poquito con Matrix. Las peleas están curradas. O hacen un Sólo en casa (divertido ese asalto del FBI). O Misión Imposible. O rememoran un poquito a Metrópolis. Es una sátira de las pelis de acción con Inteligencia Artificial.
Qué bien equilibran el humor, la trama en sí, la reflexión sobre las IA, las secuencias de acción, los conflictos familiares… No es qué les dé un tiempo proporcional. Es que todo está bien integrado.
Sí. Así se hace una secuela. Los dos años largos transcurridos desde M3gan los han aprovechado bien. Escribir un guion competente, pensar cómo adornarlo, cuidar los detalles… Muy bien.
La canción. Pero qué ida de la olla más maravillosa. Qué divertido.
Vale. En serio: no va a gustar a la mayoría. Es bastante distinta a la primera. Es otro estilo, un planteamiento muy distinto. Hay mucho de abrazar el absurdo. Tienes que verla dispuesto a reírte y tomártelo a broma. Pero es que también me ha gustado su ironía (por tanto es inteligente) acerca de la tecnología en general y la IA en particular.
Tú veras si estás preparado para abandonar a una M3gan terrorífica por una de coña.

27/6/25

Al margen (643)

1. Dice
Segura que como a él no le llamaban para hacer de protagonista se tuvo que dar él los papeles. Mal no le ha salido.
2. Lo de Pedro Sánchez interrumpiendo Mamma Mía 2 en La 1 (esas cosas que sólo hacen los dictadores) para informar de algo que podía haber esperado y que además luego se supo que era mentira, es algo tan ganso que hasta resulta gracioso. Chistes y memes hubo unos cuantos.
3. Elio ha empezado muy mal su recorrido. Elemental también empezó mal y luego recuperó con todo el verano por delante. Veremos si a Elio le funciona.
4. El remake de Los inmotales de Stahelski comienza a incorporar nombres interesantes: Russell Crowe y Henry Cavill.
5 Guadagnino dice que Fantasmas de Marte es una de las mejores pelis del siglo XXI. No sé lo que fuma este hombre pero ese afán de dar el cante no puede ser del todo bueno.
6. Dicen los exhibidores de cine que a las salas de cine les quedan 20 años de vida. Bueno. Tienen razón… si las cosas siguen así. Alguien se dará cuenta de que es preciso empezar a escribir guiones originales, demoler discursos ideológicos, dejar las sagas interminables, disolver megaproductoras (Disney, Universal, Warner)… No es difícil. Pero va a doler. Y, si no, ya vendrá el cine coreano, indio o chino a ocupar el hueco.

26/6/25

Cuando pasan las cigüeñas

Mi profesor de Historia del Cine consideraba que no existía cine estadounidense porque los medios de producción no estaban en manos del proletariado. Ya había caído el Muro pero él seguía atascado. Eso significaba que Cine, lo que se dice Cine, existía, casi exclusivamente, en la Unión Soviética.
Gracias a semejante majadería vimos muchas películas de las que, de otro modo, nunca habría sabido. Y hay mucho cine bueno en el horror soviético. Tanto como en cualquier otra cinematografía.
Cuando pasan las cigüeñas es extraordinaria.
Veronica y Boris. Novios. II Guerra Mundial. Boris se alista, que es lo que debe hacer todo buen soviético. No se alista Mark, primo de Boris, y aprovecha para mosconear alrededor de Veronica.
Picados, contrapicados, travelling en espiral por el hueco de la escalera, travellings entre la multitud… En fin, lo que hacen con la cámara en 1957 es alucinante.
Nos acercaremos al frente de batalla una sola vez para presenciar un acontecimiento decisivo, pero nos centramos en la retaguardia, siguiendo a Veronica, los bombardeos, los refugios en el metro, las inesperadas muertes civiles y, sobre todo, la falta de noticias, no saber dónde están aquellos a los que se ama. La confusión emocional, los destrozos de la guerra en olas de consecuencias.
La fotografía es también imponente. En blanco y negro, jugando con la arquitectura constructivista, los paseos entre erizos checos antitanque, la luz de los bombardeos en la noche… el hospital de Siberia.
Una película con un guion de hierro en que cada escena cuenta, está ahí por algo, tiene peso dramático. Ardilla: apodo, muñeca, símbolo.
Debería tener más reconocimiento porque su calidad está muy por encima de lo normal. Es un peliculón de los grandes.

25/6/25

Code of Silence. Temporada 1

Alison trabaja en las cocinas del comedor de la comisaría de policía. Es sorda. La policía le pide ayuda para leer los labios de una banda criminal. Alison acepta pero empieza a hacerle tilín un tipo de la banda llamado Liam.
Estaba seguro de que la trama se desmoronaría más pronto que tarde. Me sonaba a pastiche sentimental con giros que no son giros sino caprichos de magia. Y aguantó el primer capítulo y el segundo… Lo que iba sucediendo era tolerable, lógico, con decisiones más o menos cabales que cuadraban con la personalidad de la protagonista, necesitada de dinero, de reconocimiento, de aventura… Alison encuentra adrenalina, romance y un puzle con el que puede demostrar su inteligencia.
Así que sí. Se sostiene. Y muy bien. Hay muchos elementos interesantes. Los polis buscan su revancha particular, Alison y Liam juegan el uno con el otro al tiempo que van intimando, hay un atraco de altos vuelos, hay drama…
Rose Ayling-Ellis lo hace muy bien. Es un personaje muy complejo, con muchos matices, que tiene que expresar muchas cosas diferentes al mismo tiempo: está enamorada, sabe que él va a cometer un delito, quiere salvarlo, tiene que denunciarlo… Y está la historia con su madre y el desalojo… Y su padre.
Me ha gustado la historia. Obviamente el equipo de policías no está tan profundamente trabajado como Alison pero para tratarse de secundarios también tienen sus capas psicológicas detrás.
Es entretenida y se sale de los cauces habituales de las tramas de investigación policiales. Ofrece algo lo suficientemente diferente como para que mantengas la atención en todo momento.

24/6/25

El idioma universal

-Estamos perdidos para siempre en este mundo.
Una noche Matthew Rankin se pegó un atracón de Wes Anderson y Abbas Kiarostami. El orden no importa. Lo que importa es que la ulterior resaca produjo esta película. Digo yo que tuvo que ser algo así.
Winnipeg. Una zona donde vive una nutrida población persa y sus alrededores. Un niño ha perdido las gafas. El profesor no tolera muy bien dicho acontecimiento. A partir de ahí se producen una serie de disonancias y acercamientos entre múltiples personajes. La historia se ramifica y conecta de algún modo a unos con otros.
El gran mensaje está explicitado desde el inicio: la película es un canto a la amistad. Una visión amable y comprensiva de la humanidad. La idea ancestral de la hospitalidad nómada, tiene mucho que ver aunque estemos en Winnipeg. Y hasta ahí lo pillo. Sospecho que se me escapan muchos de los elementos de una ciudad multicultural en donde lo verdaderamente importante se dice en un idioma universal que todos entendemos.
Pienso, pese a todo, que el mensaje principal se percibe y que, aunque se escape lo secundario, lo importante está en su concepción estética, en esos encuadres de hormigón y nieve, de poesía anárquica, de juegos como ese plano contraplano que es lo más brusco que hayas visto alguna vez por la distancia a la que se filma.
Una película absurda, surrealista, con leves toques de humor, de ternura, sin excluir la complejidad humana.
No es para todos porque ciertamente es extravagante, pero no hace daño a nadie.