2/1/20

Richard Jewell


Es curiosa la tradición puritana anglosajana. En la tradición católica preocuparía más que te acusaran de ser un malnacido destructor de la buena reputación de una persona que de acostarte con alguien. Para los yanquis no. Muchos periodistas (yanquis) han defendido que Kathy Scruggs no se acostó con un agente del FBI. Pero no han desmentido, en ningún momento, que fuese una malnacida destructora de la buena reputación de Richard.
En cualquier caso la película es bastante buena. De las mejores de Eastwood en años. Critica ese periodismo sucio, amarillento, carroñero que tanto se da hoy en día, la búsqueda de la fama pisoteando a cualquiera, el sensacionalismo para lograr el éxito.
Tiene escenas rodadas de manera imponente, tanto las que se prestan al espectáculo (el atentado) como las más reposadas (los interrogatorios). Y, en medio del drama, tiene apuntes cómicos muy ingeniosos sin que chirríe. Me encanta la iluminación, cómo usa las sombras. Vaya forma de rodar los interrogatorios. La peli merecería la pena sólo por eso. No es un interrogatorio realista, es una atmósfera, un estado de ánimo, la esencia de los personajes.
La peli podía ser mejor. La cosa judicial no me gusta (cuestión personal). Pero hay otro tema más objetivo que sí perjudica. Jewell, su entorno familiar (pero qué grande es Kathy Bates) y sus amistades están muy bien tratados. Humanos y creíbles. Sin emabargo los antagonistas (Olivia Wilde y Jon Hamm) son estereotipos, eso le quita cierta credibilidad a toda la historia.
El año empieza bien. Y, mañana, seguimos con El oficial y el espía, otra historia sobre difamación. Parece significativo que las dos primeras pelis del 2020 tengan el mismo tema.

No hay comentarios: