Kevin
Costner
pone 58 millones de dólares de su bolsillo, produce, escribe, dirige
e interpreta. No hay duda de que le apasiona este proyecto. Ojalá
vaya mucha gente a verla pero no lo tengo muy claro.
La
situación del cine es muy extraña. Difícil saber si algo triunfará
o no. Y a mí esta peli me parece muy arriesgada: porque es clásica,
es fordiana, es volver en gran medida al cine anterior a los 60. Una
osadía. Aunque
tiene sus toques puntuales modernos de cierta crudeza.
Es
muy ambiciosa. Un ejemplo de las primeras secuencias. Asalto de los
apaches.
Tres escenarios: campamento, chico a la fuga, casa. Dentro de la
casa: planta baja y sótano. Dentro de cada historia hay más
historias, más personajes, más relatos. Creo que sería
lícito hablar de esta saga una vez que hayamos visto las 4 (o 5)
películas planificadas. Ahora mismo sólo se puede trazar un esbozo.
Lo
que veo me parece grandioso pero disperso.
Los personajes están
bien escritos pero no se desarrollan,
los conflictos meramente apuntados.
¿Volverán en hipotéticas nuevas películas?
De
momento la entiendo como un mosaico: indios, cazadores de indios,
colonos anglosajones,
colonos chinos,
soldados, vendedores de caballos, semillas de ciudades, caravanas…
No
tengo claro que todo eso vaya a conectarse en algún momento. Quizá
no es el objetivo. Tal vez sólo trata de filmar fragmentos que
construyeron Estados Unidos, un país forjado sobre cadáveres,
guerras, buenas intenciones, malentendidos, gente honrada, gente
malvada.
Buena
película, sin grandes alardes, Costner
es eficaz, sabe lo que se hace, tiene mucho cine en la memoria y en
las espaldas. Hay buenas ideas, discretas, nada llamativas. Tres
horas que se ven con facilidad, sin que cansen.
El
final viene a ser un tráiler de 3 minutos de lo que está por venir.
Me resultó raro. Habrá que ver cada capítulo y finalmente evaluar
el todo.
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