-Lo
peor es que hay un muro para que se queden fuera las cosas interesantes.
Hilda
es una niña aventurera que se ha criado en el bosque con su madre. Las
circunstancias obligan a ambas a irse a vivir a la ciudad, a Trolberg. Hilda no
lleva muy bien el cambio, pero pronto hará amistad con los niños de los
Gorriones Exploradores y descubrirá que Trolberg tiene sus propias aventuras.
Es
una serie deliciosa, con una imaginación sorprendente. No había visto algo
semejante salvo en Miyazaki, aunque aquí las intenciones son distintas. Además
es una de las raras ocasiones en que la estética es la adecuada para una serie.
Cada fotograma es una maravilla en su sencillez.
Elfos
diminutos, gigantes de medianoche, el pájaro trueno, el ciervo zorro, wuos
esféricos, el hombre de madera, los bitra, los gatiendres, las marra, el nisse…
Toda una extraña y sugerente mitología insertada en lo cotidiano.
Me
enamoré de la biblioteca de Trolberg. Enorme, preciosa, llena de colores y
secretos. Quiero una biblioteca así. Y respecto a la misteriosa bibliotecaria
supongo que tendremos que esperar a la segunda temporada para saber más de
ella.
A
partir del capítulo 1x09 cambia un poco el tono. Hilda descubre que no todo es
bonito: discute con su amiga, la felicidad se le escurre entre los dedos y la
soledad a la que se creía inmune aparece en su vida. Un buen arco argumental
que le da más hondura aún a la historia.
Perfecta
para los más pequeños, pero tan entrañable que también es disfrutable por los
mayores. Pura magia.
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