No
alcanzo a entender el desprecio sistemático de Marvel hacia los
espectadores, hacia sus fans. Es otra película con guion casi
inexistente. Las cosas pasan porque sí, arbitrariamente, de modo
caprichoso, sólo porque en el minuto 10 tiene que haber una pelea y
en el 20 su contraria. Hacemos que los personajes cambien de opinión
aleatoriamente, las situaciones son inverosímiles y a tirar para
adelante.
¿Por
qué? ¿Acaso es tan difícil desarrollar personajes con coherencia?
Pues parece que sí.
El
japonés, el amigo ahora es enemigo, el FBI deteniendo al Capitán
América, las cosas que ahora afectan y ahora no, deja el escudo,
vuelve a cogerlo, lleva el traje completo, no lo lleva, Giancarlo
Esposito
de un lado y del otro (qué inútil Sociedad Serpiente)… Lo que
convenga porque el espectador no importa.
La
acción. Pues tal vez hace 20 años habría estado bien. Excepto
alguna cosilla en el combate aéreo no aporta absolutamente nada.
No
es una peli floja más de Marvel. Es decididamente mala. Ojalá
hubiese ganado El Líder (Tim
Blake Nelson).
¿O sí ganó? La única cohesión que han buscado es que El Líder
solía enfrentarse a Hulk. Y para ello hacen otra pirueta más que no
podía importar menos. Y detenemos a Hulk porque sí.
Luego
dirán chorradas de que quien odia la película es por ser racista.
Mira, Marvel. Echa un vistazo a Fast Color.
Eso es hacer una buena película de superhéroes con protagonistas
negras, con guion, con drama.
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