No
es una película especialmente buena. Tiene una planificación
decente
y un mal montaje, algunos
problemas en la presentación de personajes y elipsis algo extrañas.
Un
broker
se ha hecho unos cuantos enemigos. Mientras está en el acuario,
descubriendo que su mujer le engaña, terminará muerto
en la pecera de los pingüinos.
La
película, pese a sus defectos, tiene algo excepcionalmente bueno: el
personaje de Hildegarde Martha Withers. Edna
May Oliver construía un carácter muy original. Maestra de escuela,
estirada, anticuada en unos aspectos, muy independiente y moderna en otros, inteligente, irónica, metomentodo, con
un carácter muy fuerte
y
simpática pese a todo, cosa
que le hace ganarse al inspector Piper.
De hecho me extraña que no se hayan inspirado en ella para sacar
algún personajes semejante como detective.
Tiene
unos toques de humor que la hacen muy llevadera.
Era
una película del año 1932. Imagino que la trama aún tenía bien
presente el crack
del 29. ¿Vería esta peli Erle
Stanley Gardner?
La resolución es muy del estilo de las novelas de Perry
Mason que aparecerían justo un año después.
No
es un film memorable pero yo lo recomiendo por ese personaje de la
señorita Withers que ella repitió en otras películas.
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