7/9/25

Del cielo al infierno

-El mejor oído de la historia y el corazón más frío.
David King es realmente el rey de la industria musical, productor de prestigio, rico, filántropo de músicos negros, honrado… Secuestran a su hijo.
Antes de seguir leyendo me gustaría que echaras un vistazo a lo que dije de El infierno del odio para que entiendas mis razones posteriores.
Yo me pongo en el sitio de esa gente que ve una obra maestra y decide volver a hacerla, dar su visión, actualizarla. Y me preguntó: ¿por qué? ¿Por qué crees que la vas a mejorar? ¿Por qué crees que eres mejor? ¿Quién crees que eres? ¿Sabes lo que significa “obra maestra”?
De Spike Lee pienso lo mismo que de Brian De Palma. Pudieron ser grandes directores, verdaderos autores. Pero estaban demasiado ocupados en creérselo, empeñados en demostrar el mucho cine que habían visto. Y copiaban más que creaban.
¿Está mal la pelí? No. ¿Lo hace bien Denzel Washington? Desde luego. ¿Aburre? Un poco; a medida que avanza. ¿Entonces? No aporta absolutamente nada. Repito: ya se hizo mejor. Por eso la están imitando.
La investigación metódica de Kurosawa se sustituye por una persecución a ritmo de música puertorriqueña y otras cosas por el estilo. No debatiré mucho pero lo primero es universal y lo segundo es lo “típico” yanqui. Y el análisis moral y antropológico tiene el mismo problema: algo universal frente a algo muy USA.
La pelea en el metro me parece lamentable y la última media hora superflua. Pierde el tono, está ya en otra película, otra historia, otro discurso social.
Hay críticas a la IA, el uso de móviles, tecnología, a esto y lo de más allá. Pues se podía criticar a los que usan la fama o el producto de otros para hacer dinero ellos mismos.
No me esperaba gran cosa pero aún así esperaba más.

No hay comentarios: