19/7/23

Sound of Freedom

-¿Podría dormir sabiendo que una de las camas de sus hijos está vacía?
Una forma muy típica de censura, cuando tienes dinero, es comprar un producto y no distribuirlo. Sound of Freedom es una película de 2018 que Disney compró y guardó en un cajón. No quedaba lejos el arresto de 35 empleados de Disney por pedofilia. En 2022 hubo otros 13 arrestos. 7 en lo que va de 2023. Ahora, con la crisis que atraviesa, ha tenido que revenderla y por fin podemos verla.
Alejandro Monteverde como director y Jim Caviezel como actor se meten en unas arenas movedizas de cuidado. Y salen airosos, cosa que no era fácil pues el tema es peliagudo: el tráfico sexual de niños.
El director se centra en una operación policial, cosa que me parece un acierto. Ya es bastante espeluznante, opresiva. En su primer tramo hay muchos encuadres de puertas, ventanucos. Es claustrofóbica sin ceñirse a espacios cerrados. Agradezco que sea un thriller más bien convencional (sí, es bastante convencional) porque profundizar en dramas familiares o cuestiones más empáticas habría resultado insoportable. Aun así hay secuencias durísimas.
La película arranca con un casting de niños. Dejas a las criaturas en una habitación en manos de maquillaje, peluquería y fotografía, con una señora muy guapa y… no los vuelves a ver. Sospecho que esa parte no le hizo gracia a Disney.
Basada en un caso real. El agente Tim Ballard, casado, con seis hijos, está harto de detener pedófilos sin poder rescatar a los niños. Lo que ve cada día le está destrozando. Tras rescatar a un niño monta su propia operación para rescatar a la hermana.
Relaciones con la droga, movimientos entre Estados Unidos, México, Colombia, Honduras, Tailandia, Rusia… Se han hecho muchas películas sobre narcotráfico y aquí hay una que se atreve a entrar en un submundo del que preferimos no saber nada.
Vampiro. Menudo personaje. Enorme Bill Camp. Un ex narcotraficante que trata de hacer algo positivo por los niños. Negociar con un criminal para detener un crimen mayor.
La doble operación policial (resort y selva) tiene tensión, tal vez demasiado apresurada, pero está bien explicada. Muy bien planificada, acentuando contrastes entre lujo y pobreza, donde el dinero y la chabacanería se dan la mano.
La peli es impactante. Sólo porque es única en su especie, la única que aborda el espinoso tema, ya merece la pena.

4 comentarios:

JAG dijo...

Bueno, también las opiniones políticas del actor principal tienen algo que ver, Caviciel nunca ha ocultado ser católico y bastante de derechas, si a Gina Carano le dieron la patada solo por la tontería de los pronombres, alguien así es carne de cancelación.
Lo que más me alegra es que una película descartada, con poco presupuesto y con una distribución limitada puede ser rentable, a ver si alguien toma nota.

Individuo Kane dijo...

Lleva casi 100 millones recaudados en EEUU y Canadá. En breve va a México y otros países de Sudamérica.

Anónimo dijo...

Te has enterado de los casos en Estados Unidos en los que la película en varios cines fue saboteada?
Luces encendidas, cortes a mitad de película, olores horribles, fallos informáticos, etc.
Puede que fuera cosa de algún poder que no quiere que se sepan ciertas verdades?

Individuo Kane dijo...

Lo he leído. Lo que me desconcierta son esos medios que la critican por una supuesta ideología que según ellos debería estar en la película pero no está. Nunca había leído críticas tan torticeras sin referencia alguna a la película en sí.