-Imaginamos
cosas y preguntamos a la gente: ¿podemos llevar nuestra imaginación a vuestro
hogar?
La
anciana de 88 años y el joven de 33, la directora de cine y el fotógrafo
creador de instalaciones. Agnès Varda y JR.
Y
ambos se ponen en marcha. Sus diferencias de edad, educación y formación se
mezclan en el diálogo del Arte. Hacia los paisajes y rostros sencillos.
Mineros, agricultores, campaneros, camareras… Y ambos conectan en ese espacio.
Este
documental tiene desde el principio una notable fuerza visual. Es una historia
acerca de la idea, de la inspiración, del proceso creativo. Pero también del
poder del Arte para resaltar a la persona, recoger testimonios, conservar la
memoria, crear un espacio más amable hacia el encuentro.
Y
también es interesante cuando no conectan: las gafas de JR. Eso propicia
la escena final, muy significativa acerca de la mirada y las formas de mirar.
Nunca
he sido fan de Godard, a diferencia de Varda, pero esta peli es
otra razón para que no me caiga bien (en realidad sólo cae bien a Varda). Pero así la entendemos mejor a ella.
No
es para grandes públicos pero, si te gusta el Arte, es una joya. Pequeños
relatos humanos entrañables que tienen la emoción que sólo puede lograr la
simplicidad de una buena idea. Cine de verdad.
-Cada
rostro tiene una historia.
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