7/11/17

El Ministerio del Tiempo. Temporada 3

-Por fin sale algo bien en Valladolid.
Para alguien que ha vivido (un servidor) en Valladolid, esa frase tiene muy mala leche. Justificada.
Hay muchas, muchísimas ideas buenas en esta temporada. Y también fallos bastante gordos, sobre todo en los capítulos iniciales. El de Bécquer fue un espanto. Ni el más leve atisbo del espíritu de la época o de quién era Bécquer.
-Madre mía. ¿El Pink Floyd éste es el libertador de América?
Pero vayamos a lo positivo: Los Hijos de Padilla y El Ángel Exterminador, dos facciones que quieren hacerse con el control del ministerio. Y que vienen a simbolizar esas dos Españas en las que los guionistas, pobrecillos, todavía creen y por tanto, paradójicamente, perpetúan.
-¿Por dónde empezamos a buscar?
-Por el bareto. Somos españoles.
Pero es una buena idea narrativa. La historia de fondo se ramifica, crece en complejidad, se dispersa en unas ocasiones, se une en otras. Todavía tiene, con frecuencia, problemas de ritmo para llenar esa hora larga. Pero creo que se subsanan en muchas otras ocasiones gracias, precisamente, a la multiplicidad de tramas y personajes.
Me gustó mucho lo manipulador que se volvió Salvador. Para eso es el jefe. Para ir un paso por delante.
-Creo que nos debe una explicación.
-Y como subsecretario que soy de este ministerio se la voy a dar.
Mi momento preferido fue el encuentro entre las dos Lolas durante la final del mundial de Sudáfrica. Pero el mejor capítulo fue el último. Carpe Diem. Su agencia de viajes por el tiempo. No se pregunte dónde. Pregúntese cuándo. Pandemias, la OTAN bombardeando España, autoparódica… Muy majo.
Parece que no habrá más, que no será renovada. Se me ocurre una razón para que no haya terminado de triunfar: no tuvo un capítulo grande, grande de verdad, uno genial.
-A Velázquez ya lo veis. Parece que se hubiera zampado las meninas una a una.
Y, en fin, ¿no nos habría gustado a todos ver La guerra de las galaxias versión Buñuel? Anda que no habría quedado chulo Pepe Isbert haciendo de Yoda.
-Alonso. Alonso. Alonso. Ya la hemos cagao.

2 comentarios:

JAG dijo...

Aunque de penita, es un buen momento para dejarlo ahora que todavía la vemos con buenos ojos.
Me partiría el corazón que se arrastrase penosamente por la parrilla, vacía de contenido una temporada mas solo para contentarnos a los fans

Individuo Kane dijo...

Creo que "El ministerio del tiempo" siempre fue mejor por lo que casi fue que por lo que es.
Tenía potencial para ser muy grande: buenas ideas, buenas propuestas.
Dos problemas. Uno evidente: la falta de presupuesto. Dos: ciertos conceptos de los guionistas. Javier Olivares parece intocable, pero tiene algunos tics incurables que a la larga, por su insistencia y repetición, se hacían cargantes. Más variedad en el tono, menos monolítico en su concepción histórica, le habrían venido bien.