Si
has visto Reykjavik-Rotterdam no hace falta más. Son idénticas.
Hay
una variación para que la película parezca verosímil a los americanos. Ellos no
entienden que una persona pierda el trabajo y se vea en apuros económicos que
le lleven a delinquir. Para ellos, si pierdes un trabajo, buscas otro. Y ya
está. Eso es la razón que dio Mark
Wahlberg para hacer un pequeño cambio en la historia.Dirige el mismo director: Baltasar Kormákur. Y como le han dado más pasta, la cosa está más pulida, más refinada, mejor montada y subsana algunos defectos narrativos. Pero la trama y situaciones son idénticas.
Otro ejemplo de ahorro de costes a la americana: mejor hacer la película entera que doblarla. Así sacan beneficios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario