La del comienzo nos presenta a un tío capaz de sostener varios niveles de conversación a la vez, inteligente, egocéntrico, prepotente, frustrado y con el mismo tacto que una lija para las relaciones sociales. Su novia rompe con él.
La escena final nos presenta a ese mismo tío, presidente y creador de Facebook, tratando de que aquella novia de la primera escena le acepte como amigo... en Facebook. Y no le acepta.
Lo que hay entre ambas escenas, el resto de los 120 minutos de metraje, no es trivial. Al contrario, es muy interesante porque, parafraseando a Erica Albright, nos ofrece lo que marca la diferencia entre un friqui y un gilipollas. Perdón. Varios gilipollas: el creador de Facebook, el co-creador de Facebook, el de Napster, los que escriben el código... Gilipollas que cambiaron la visión del mundo.
Vaya pedazo de guión que se ha marcado Aaron Sorkin. Magistral. El montaje es sobresaliente. La dirección de David Fincher muy buena. Como la música. Menuda banda sonora. Y las interpretaciones, bastante buenas.
Dos horas que transcurren con la misma vertiginosa agilidad (y densidad de diálogos) con que se veían los capítulos de El Ala Oeste de la Casa Blanca.
4 comentarios:
Lástima el "basado en hechos reales" porque ficcionalizando un poco más al protagonista los conflictos hubieran tenido más fuerza. Tampoco es cosa de que se metan en otra demanda.
Curioso que entre mis escenas favoritas haya dos de los gemelos: en el despacho del rector y tras la competición.
Y, por cierto, en el fondo es otra de las pocas pelis "de amigos".
El montaje, para mí gusto, bastante confuso.
Miré en la web para saber si Erica Albright era un personaje real o de ficción.
Es interesante ver su blog y las diferencias con Facebook.
http://ericaalbright.com/
¡¡El que ha hecho el guíon es el mismo que para el Ala Oeste de la Casa Blanca!! Puede ser interesante...
Creo que te gustará esta peli, Pierre.
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