Todo lo que ocurre en Salt es extraordinariamente inverosímil, pero poco importa porque de lo que se trata es de ver a Angelina Jolie corriendo, saltando, dando patadas, encontrando siempre la fórmula adecuada para escapar de una gigantesca encerrona.
Todo lo que necesita es el armario de la limpieza, una silla giratoria y un extintor. Con eso, los asaltantes se convierten en asaltados.
Supongo que es el verano, que me vuelve poco exigente. O quizá es Origen, que eleva tanto el nivel que a poco que hagan los demás se lo aceptas. La peli me pareció entretenida y las persecuciones en la autopista (esa conducción a base de descargas eléctricas) tienen su toque original. Pero, sobre todo, me encantó cómo mata Evelyn Salt por última vez, una originalísima ejecución.
A todo esto. Tom Cruise iba a ser Salt inicialmente. Indudablemente, las cosas son mejor como están.
2 comentarios:
Has olvidado McGyver. Por lo que dices, también hay bastante de eso.
Lo pensé, pero como Bourne ya es un poco así...: un periódico y una tostadora y ya está el incendio calculado al milímetro.
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