La
primera Depredador (1987)
funcionó bien. Todas las que vinieron después fueron malas. No entiendo por qué
es difícil hacer un buen guión para un monstruo así. Pero algo debe de pasar
porque la presente Predator
renuncia por completo al personaje y convierte a un icono del terror en… ¡una
comedia!
Predator tiene algunos gags buenísimos pero, ¿no es
triste decir eso de una peli de terror? Porque no se ha construido una trama
coherente. Se han fabricado un conjunto de situaciones, de números de show, de
momentos forzados para provocar la risa. Justo como en una comedia. A veces una
sitcom. Y como suele pasar en esas
ocasiones, no siempre les funcionan bien las gracias.
Así
que he contemplado estupefacto la peli, tratando de modificar la mente para
recordar que no estaba viendo Predator y confiando en el final.
El
final es lo peor de todo y pone en evidencia que no había ninguna trama ni
cohesión en todo ese tinglado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario