Es
otra de esas pelis de Woody Allen que no es ni buena ni mala sino todo
lo contrario. Como Café Society,
como Irrational Man, como Magia a la luz de la luna.
La
cosa es que en muchos momentos me recuerda a Blue Jasmine, la mejor película de Allen de los últimos
años y, tal vez por eso, me parece que pierde bastante.
En
cualquier caso entra en ese estilo ligero, agradable, intrascendente, medio
drama, medio humor. No es brillante en su argumento porque lo que cuenta ya nos
lo ha contado decenas de veces de modos mejores, pero siempre encuentra
variaciones interesantes.
Lo
que destaca en Wonder Wheel es
su impresionante ambientación de época. Se ve que sigue sintiendo una nostalgia
brutal por el pasado. Y hay que señalar también el trabajo de Kate Winslet
(vale: te perdonamos esa tontada de La montaña entre nosotros), realmente impresionante, un poco en la línea
de Cate Blanchet en Blue
Jasmine.
En
fin. Una peli muy bonita, muy melancólica. Guión un poco simple. Demasiado
sencilla. Aunque, vete tú a saber, es muy probable que eso sea una virtud.
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