Hari
es un policía honrado, estricto, incorruptible. También es muy
violento con los detenidos. Tras degradarle y suspenderle
temporalmente se reincorpora al trabajo.
Muy
buena película india. Comercial pero con un guion muy trabajado.
La
trama está anclada con dos elementos. El primero es la investigación
en sí. Hari es expeditivo y obliga a sus hombres a trabajar sin
descanso. Obtiene resultados. Hay un desarrollo lógico, sin saltos
de razonamiento ni casualidades. La pista se sigue con muchos
hombres, horas de trabajo y datos reales.
El
segundo elemento es la potencia del drama.
Hay
un
momento en que Hari
tiene un ataque de pánico. Al
principio no entiendes por qué le sucede eso a a un policía
experimentado. Luego la historia se desarrolla de modos intensos,
brutales. Una sucesión de causas y efectos que engendran cada vez
más violencia.
Ambos
elementos avanzan de modo conjunto. Tiene un montaje (hay buenas
ideas) y una banda sonora que se acercan mucho al estilo de las
películas de mafiosos de Hollywood: drogas, prostitución, chantaje…
En
la secuencia de la morgue y en la pelea final la acción se sale de
lo creíble y la película pasa de lo serio a lo abiertamente
convencional. Pienso que no hacía falta pero tampoco me disgusta y,
seguramente, muchos lo esperaban.
El
flashback del autobús explica el origen de todo con un triple
punto de vista.
Gran
final.
Una
historia sólida, bien ejecutada y con mucha adrenalina. No se cortan apenas ni siquiera en la violencia con niños. Lo digo por si no estás para
situaciones sensibles.
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