
También me cuestiono por qué la mayoría de las críticas dicen que es una peli pequeña, una mera anécdota. Vete tú a decirle a Orson Welles que un tío obsesionado con un trineo es poca cosa para hacer una película. Como el crítico de ayer que señalaba io en el comentario con respecto a La invención de Hugo. Me joroban esos críticos que van con ideas predefinidas acerca de lo que debería haber sido o lo que les habría gustado que fuese. Las preguntas son: ¿qué quería hacer el director? ¿Ha usado los medios adecuados? ¿Lo ha conseguido?
A mí me parece un retrato psicológico muy preciso de una personalidad extremadamente compleja y retorcida.
Y, ya puestos, una mención a Emma Watson. Así como Radcliffe en La mujer de negro no nos hacía olvidar a Harry Potter, Emma Watson sí consigue que olvidemos a Hermione Granger. Es verdad que podemos decir: ¿No es esa la que hacía de Hermione? Pero yo me la creo como Lucy, la chica del vestuario.
La historia de una gran estrella que quería ser una gran actriz y la de un gran actor que quería ser una gran estrella.
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