
Las antípodas del Arte.
Es una manía mía, qué le vamos a hacer.
Por eso agradezco cuando veo una serie animada un poco mejor hecha que las demás.
Phineas y Ferb no lo está. Se llena de ritmo, de persecuciones alocadas, huidas, secuestros, nuevas fugas. Y es un problema sobre otro problema. No hay tiempo para asimilar sus referencias cinéfilas, sus filosofías de cambiar cromos de Sartre por Kierkegaard, sus alusiones a Georgia O'Keeffe. Cosas que, por otra parte, los niños no pillan.
Alguna frase divertida hay:
-Soy una mente científica. Eso dice mi horóscopo.
Ser adulto, dice Candace, sólo puntúa con un 3.
Como la peli.
No hay comentarios:
Publicar un comentario