
Ese soldado que vomita e, inmediatamente, se pone en posición de firme; esa formación en tortuga para una misión descabellada de rescate; ese viaje más allá de la frontera de Adriano, donde acaba el mundo.
Y es, también, la historia de una amistad entre Marcus Aquila y su esclavo Esca. Gente que sabe lo que significa dar su palabra.
Me pareció entretenida y bastante verosímil sobre lo que debió ocurrirle a la novena legión. Por eso no entiendo que la hayan tratado tan mal en las críticas. Creo que a la gente se le está olvidando qué es el lenguaje clásico.
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