-Nadie
es inútil en este mundo pues aligera la carga que lleva otro.
Charles
Dickens
vuelve de su gira por Estados Unidos. Famoso, aclamado, reconocido como gran
novelista. Pero le acosan las deudas: nueva casa, muchos hijos, dinero para
obras de caridad. Y está seco, sin ideas, en bloqueo creativo.
He
visto muchos malos/regulares biopics
últimamente. Principalmente porque quieren abarcar toda una vida y, al mismo,
sin ser honrados del todo. Contar una vida, introduciendo la propia opinión del
director.
Esta
película me parece superior. No es rigurosa pero va al centro, la esencia. No
datos biográficos sino unos pocos conceptos sobre el ser moral del biografiado.
Es la historia sobre el proceso de escritura y la inspiración de Un cuento de Navidad. Parte es real,
parte ficción. Pero logra penetrar en quién era realmente Dickens.
Tal
vez alguien crea que es sencilla por los toques de humor, porque el drama no se
vuelve dramón. Pero a mí me parece que esa sencillez se logra por una depuración
del guión y una verdadera profundidad en la captación del personaje.
Centrándose en un solo momento de su vida, logra abarcar su personalidad
completa.
Escribir
esto es mucho más difícil que Bohemian Rhapsody, First Man, Mary Shelley. Con trazos certeros
sabe dibujar las relaciones con sus criados, su padre, su hermana, sus hijos… Y
su esposa. Me encanta cómo ella lo maneja con una sola mirada y los momentos en
que muestran el lado Scrooge de Dickens.
Dan Stevens es una gran elección
para interpretar al escritor.
Interesante
el debate en las escenas sobre cómo escribir la muerte (o no) del pequeño Tim.
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