Tiene
un primer capítulo muy poderoso y sugerente. El resto me gustó bastante menos
porque, como muchas pelis y series apocalípticas, mimetiza demasiado de otras.
No me refiero a los temas, cosa que es inevitable. Aquí hay un curioso cóctel
entre The Leftovers y El corredor del laberinto. Me
refiero a que no tiene personalidad visual propia.
Imagino
que su problema fundamental es que se dirige, sobre todo, a público adolescente
y juvenil. Y ese es un público con el que no hay que correr riesgos.
Desarrollan la trama sobre seguro, sin buscar grandes originalidades más allá
de los oportunos giros de guión que tampoco son grandes sorpresas.
Para
tratarse de una historia serializada de 8 capítulos hay, en mi opinión,
demasiada estructura fija: flashbacks
para contarnos el pasado de un personaje en cada capítulo, encuentros y
situaciones que atan la trama a ese único capítulo…
No
es mala serie. Se la juegan con la muerte de alguno de los personajes
importantes y algunas escenas tienen bastante fuerza. Es un buen
entretenimiento si es eso lo que se busca. Pero no pidas mucho más.
En
una serie donde la venenosa lluvia es protagonista, los desarrolladores
deberían mojarse más.
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