16
de enero de 2011. El Cairo. Noredin es un poli corrupto. Como todos. Sin
embargo, cuando le ordenan abandonar el asesinato de una famosa cantante en el
hotel Hilton, decide investigar más.
Esto
no es una de polis al uso. Las cosas no se hacen como estamos acostumbrados a
ver. Ni siquiera es una investigación. Las cosas se mueven por sobornos, la
chiripa de a quién conoces, el momento adecuado para detener a alguien cuando
cambian las influencias… El fiscal abre el caso y lo cierra según quién le esté
pagando…
Es
más el retrato de una sociedad absurdamente caótica que una historia de cine
negro. Un relato sobre el clima de los días previos a las revueltas de la
Primavera Árabe.
Un
drama egipcio que, pese a sus deseos de contar algo nuevo de un modo nuevo, no
hace sino reciclar lugares comunes. Poco fondo y demasiadas pretensiones.
Flojita, sin ritmo.
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