10/4/17

El otro lado de la esperanza

En otra de sus solemnes pifias, Movistar nos ha dejado 24 horas sin acceso a los usuarios de Blogger y WordPress. Pero no pasa nada: a fin de mes Movistar nos seguirá cobrando igual. Ya sabes: el usuario tiene que cumplir el contrato, ellos no.
Aki Kaurismaki es el director actual con más personalidad. Ni Lars von Trier ni David Lynch ni Wong Kar Wei ni ningún otro. Aki Kaurismaki permanece fiel a su estilo, jamás renuncia a su estética; insiste en ella y la potencia.
Sus colores: los tonos pastel y los colores vivos contrastados.
La iluminación: esas franjas oblicuas.
Los temas: los restaurantes, los inmigrantes, los músicos, la gente perdida.
Las maneras: esa ternura indescriptible hacia cada personaje, esa sorna soterrada, esa frialdad aparente, esa mezcla explosiva entre distanciamiento y compromiso.
No aprecié en su momento su primera peli. Luego, cuando vi más cine suyo la repasé y me encantó. Exige un tiempo hacerse con su humanismo, con su dulce melancolía. Si te enfrentas a él por primera vez, probablemente no congenies. Pero, por favor, date un atracón de Kaurismaki. Cada vez disfrutarás más de sus historias.
Un refugiado sirio en busca del único familiar que le queda; un tipo que, vete tú a saber por qué, ha montado un restaurante; un rosario de empleados que estaban por ahí, cada uno de su padre y de su madre (qué graciosos).
Lo que más conmueve, noquea e incluso aterra, es ver sus personajes extravagantes y no darnos cuenta de que deberíamos ser como ellos, que no tenemos la valentía moral para adoptar esa clase de extravagancia, tan ingenua, tan candorosa, tan pura. Tan sé tú mismo. Personajes íntegros con visiones idealistas y planes descabellados.
Maravillosa.

No hay comentarios: