55.000 estonios fueron reclutados por la
URSS en 1940.
72.000 estonios fueron reclutados por
Alemania en 1941.
En 1944 se enfrentaron unos contra otros.
Todos ellos estonios, sin tener claro por qué lo hacían, matando a sus
compatriotas y destruyendo su propio país.
No aporta gran cosa al cine bélico, más allá
de relatar otro capítulo desconocido de otro lugar poco mencionado. Pero el
cine estonio empieza a hacer cosas interesantes. Al menos está bien rodada, con
una planificación enérgica y momentos dramáticos correctamente desarrollados.
Hay una escena muy lograda, esa emboscada en
la carretera, donde descubren el enorme absurdo, la estupidez de lo que están
haciendo. Al mismo tiempo, esa escena sirve para cambiar la perspectiva.
Pasamos del punto de vista alemán al punto de vista soviético con sencilla
fluidez.
Quizá demasiado fragmentada. No le permite
lograr una unidad narrativa sólida. Pero son interesantes las historias que
vamos conociendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario