No estoy de acuerdo con la mayoría de las
críticas, que consideran que es una película pequeña de Pixar para niños. A mí
me parece una peli bastante grande.
El primer motivo es su calidad gráfica.
Cuando todas las compañías estaban casi a la altura de Pixar, los chicos del
flexo han dado un mazazo y han dictado sentencia. El viaje de Arlo es un nuevo salto en animación, un
hiperrealismo que parece fotográfico: pelo, hierbas, cascadas, tormentas, una
hoja, el reflejo del agua… Si no fuese porque han decidido caricaturizar a los personajes
parecería totalmente real.
El segundo motivo es que su mensaje, para
muchos obvio, está narrado sin palabras. O, dicho de otra manera, hay un
mensaje obvio con palabras y mensajes soberbiamente narrados con el uso
exclusivo de la imagen.
Y esa elección (los animales hablan, los
humanos gruñen) puede parecer una tontería y uno se acostumbra. Pero detrás de
esa decisión (originalísima) se oculta lo más importante de la película: el
punto de vista, el ponerse en los zapatos del otro, el salir de sí mismo para entender
al otro. Y eso es lo que ve la madre apatosauro cuando confunde al hijo con el
padre. Arlo ha crecido.
Una road
movie llena de talento.
2 comentarios:
No sabes como me alegra que la crítica sea buena. Aun no la he visto, pero me parecía que iba a ser otro bajón de Pixar. Esta semana la veré sin falta.
No es una de las grandes, pero desde luego no me parece un bajón. Es como cuando se habla de "Niki, la pequeña bruja" o de "Ponyo" de Miyazaki. Las consideran pelis pequeñas porque son asequibles para niños, pero siguen teniendo una calidad enorme.
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