Todo el mundo sabe que los gabachos son
chauvinistas. Pero son más chauvinistas para unas cosas que para otras. Muchos
piensan que son muy chauvinistas en cine, en política, en la cuisine… Pero el
no va más de su chauvinismo es la música.
The Beatles, Elvis Presley o The Rolling Stones no son nadie al
lado de Charles Aznavour, Serge Gainsbourg o M. Y en música electrónica no existen
más que cuatro pelagatos fuera de sus fronteras. Por eso está Eden, para probarnos que el
inventaron la música electrónica, el techno y los DJ’s allá por el año ¡1992!
Dicho esto dejaré de ser malo y admitiré que
Daft Punk son geniales.
Fragmentaria, arrítmica, sin evolución, sin emoción,
trata de ser un panorama desde 1992 a la actualidad, a través de la vida de un
tipo que quiere ser DJ y que jamás llegará a serlo. Los 125 minutos le vienen
muy, muy, muy largos. En realidad 20 minutos ya le habrían venido largos.
Porque construir una historia así, a base de anécdotas, exige que las anécdotas
tengan interés. Y no lo tienen. El único detalle simpático fue el de Louise, esa
chica disfrazada de Wonder Woman que estudia Teología. Lo demás está mil veces
visto.
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