18/3/15

The Casual Vacancy

Ni rastro de Harry Potter.
3 capítulos. En los dos primeros se vislumbra una sociedad aparentemente alegre y feliz con una soterrada fuerza de odio interior.
El tercer capítulo es devastador, cruel, feroz. Una crítica social pero también personal. La destrucción de las apariencias, el convencimiento de que es imposible un final feliz con las actitudes que diariamente desarrollamos.
J. K. Rowling toma ese disfraz colorista de los inicios, que sólo deja asomar retazos de pulsiones, y lo arranca para exhibir la verdad. Salvaje, cruda.
No hay violencia explícita. Pero no es necesario para exhibir toda la miseria. Un pueblo rural convertido en una metáfora global. El fracaso de los humanos y las instituciones.
No está hecha para gustar. Está hecha para doler. Y lo consigue.
En el primer capítulo moría el único hombre bueno. Lo que vino a partir de ahí fue, simplemente, la lógica implacable.

No hay comentarios: