Jaume Collet-Serra
volvió a colocarse como número 1 en la taquilla americana con esta peli en la
que, tras Sin identidad,
repetía con Liam Neeson e incorporaba a Julianne Moore.
La cuestión es que un avión da para lo que
da. Y ya hemos visto unas cuantas de secuestros en aviones. La originalidad
está en ese secuestrador que matará a una persona cada 20 minutos.
Y ya está. Todo queda en manos de la
habilidad del director para mantener la tensión o no. Y en ese sentido Collet-Serra
lo hace bastante bien. Un poquito de acción, otro poquito de humor y
acontecimientos inesperados.
Hay cosas que no se explican muy bien y
otras cosas que tiene que sacarse de la manga en el momento oportuno. Pero ahí
queda. Una prueba de que, sin mucho dinero, se puede hacer cine comercial,
convencional, plagado de tópicos, pero entretenido.
El director hizo muy bien en largarse a un
sitio donde entienden el negocio del cine. Aquí, mientras tanto, seguiremos con
lo mismo, con gente que cree que puede hacer que nos guste lo que no nos gusta.
Y queda el enigma de saber si esto es cine
español.
2 comentarios:
Hombre, tiene que haber un término medio. Esto tampoco tiene pinta de algo que tenga que gustarnos. Esto tiene pinta de algo que se fabrica en una churrería con aceite requemado y dándole a la manivela.
Sí.
De acuerdo en todo lo que dices.
Pero si quieres mejorar la taquilla del cine español, tienes que hacer cosas como ésta. Porque, como tú dices, tiene que haber de todo.
Lo que no tiene sentido es que hagas siempre cine social y confíes en que eso te haga rico.
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