Pero, mira tú, la apertura es arrolladora con una canción genial. Y le sigue un toque triste y otro absolutamente trágico. No es la sacudida de Bambi pero no está mal.
Y Elsa y Ana, las princesas, se quedan la una con un maldición y la otra sin entender qué pasa. Soledad y miedo.
Hay momentos espectaculares. Muy espectaculares. La construcción del palacio de hielo te deja helado. Pero también están esas cancioncitas recicladas que sobran casi en su totalidad. Hay dos mozos galanes rondando a Ana, cosa que está bien porque no sabes qué va a pasar (y en el resto de princesas de Disney lo sabes desde el minuto uno).
Total que, pese a tener un final excesivamente complaciente, el guión tiene sus giros imprevisibles durante buena parte del metraje.
Además, los trolls son muy simpáticos. En cuanto al muñeco de nieve a mí me resultó cargante, pero seguro que a los peques les encanta.
-Cuidado con mi trasero.
2 comentarios:
Me pareció lo más cursi que he visto en años.
Soy capaz de visualizar los diseños de los próximos disfraces de princesa disney, hasta los zapatos.
¡Uy!
¡Has dejado de ser niña!
Zapatos de hielo Blahnik.
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