Como muchas series de espías la trama está más allá de lo concebible. Las buenas consiguen que nos lo creamos. Hunted lo consigue. Y mira que pasan cosas. Pero Melissa George da bien el pego como chica normalita, acorde con el ritmo de la historia, lento, pausado. Una simple turista, una chica que pasaba por allí. Hasta que las cosas se desatan y la moza se pone a repartir.
Ella es Sam, una espía que trabaja para una agencia privada. No del gobierno. Arrancamos en Tánger, con una operación de rescate que sale muy bien. O eso cree ella. Pronto se va a dar cuenta de que la han traicionado, que quieren matarla. Tal vez incluso su novio.
Me encanta ese reloj de arena. ¿Cómo sabes cuándo estás lista? Cuando aguantas la respiración en la bañera hasta que todos los granos de arena descienden en la clepsidra.
Cada año, cuando parece que has visto todo lo interesante en pilotos de series, cuando está todo el pescado vendido, aparece una sorpresa. Creo que ésta lo es.
2 comentarios:
¿Qué te ha parecido el siguiente capítulo? (el segundo)
Aún no lo he visto.
Estoy un poco pillado con otras cosas. Tardaré un par de días en verlo, supongo.
Ya te diré.
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