29/7/11

Green Lantern (Linterna Verde)

Esta policía intergaláctica de Linterna Verde tiene un gravísimo problema de paridad. Determinadas ministras españolas iban a montar un revuelo de los buenos si los humanos estuviésemos en el Sistema. Tal vez por eso no estamos. Necesitamos madurar un poquito.
Quizá la incuestionable mayoría masculina de Linternas Verdes se debe a que los lectores de cómics son, también en su mayoría, masculinos. Deberían sacar una ley que obligara a más mujeres a leer cómics o que un buen número de varones dejara de hacerlo.
Por otra parte, ¿no es sexista que un cuerpo formado mayoritariamente por varones reciba el nombre de Linterna Verde? ¿No debería ser Linterno Verde?
En fin, todos estos enjundiosos pensamientos (y otros que omito para no incomodarte) me venían a la cabeza mientras veía la película, cosa que puede dar una idea de la densidad del guión.
Los comentarios previos que leí me hacían pensar en otro desastre tipo Catwoman. Pero ojo: no es ni mejor ni peor que Thor, Los 4 Fantásticos, alguna de Spider-man... No es mejor ni peor. Es igual. Y esa igualdad es el problema. Previsible hasta el hartazgo: poderes, la chica, el malo, un gran don conlleva una gran responsabilidad, el enfrentamiento final...
Y la gravedad. Que es una faena, oye.

28/7/11

Los visitantes

Los visitantes fue una de esas raras comedias francesas que triunfan en cualquier parte. Y su triunfo internacional quizá fue más inesperado porque no se trataba precisamente de una gran producción.
Sin embargo, arrasó allá por donde pasó. Todo el mundo se rió con estos dos personajillos medievales que irrumpían en el año 1992, con su humor bruto y elemental. Evidentemente, pensé que una película así envejecería muy mal, que para su momento tenía gracia pero muy poco alcance.
Volví a verla. Ciertamente no envejeció bien y los primeros veinte minutos, la época medieval, se hacen pesadísimos. Pero, curiosamente, a partir de ahí, tiene un sentido del ritmo envidiable. Alocada, frenética, sin conceder respiro, absurda pero llena de dinamismo. Ni me pareció tan graciosa como la primera vez ni tan lograda en sus personajes. Pero tiene eso de lo que carecen las comedias locas de hoy en día: agilidad narrativa para no aburrir.
Además Jean Reno y Valérie Lemercier comenzaron a ser conocidos más allá de sus fronteras.

26/7/11

El hombre de al lado

No es una película para grandes públicos. Pero hay mucho cine detrás. Cosas muy inteligentes, cosas sugerentes, cosas muy pensadas.
La pantalla partida en dos del inicio, el guiñol, la decoración de la casa que dice tanto de su dueño, esos largos planos que sostienen conversaciones enteras, esos planos cortos que nos dejan ver los ojos de una y la boca de otro... Ese final largo y fuerte rodado en un solo plano.
Leonardo es un arquitecto célebre que vive en una casa diseñada por Le Corbusier. Víctor vive en el edificio de al lado y quiere una ventana para tener un poco de sol. Y ya está el lío montado, el retrato psicológico de dos tipos muy peculiares a los que no es fácil definir. Hay que ver la película para entender el mapa neuronal de estos ejemplares de la raza humana. Muy logrado el trabajo de Rafael Spregelburd y de Daniel Aráoz.
Hay algún personaje un tanto exagerado y alguna situación no muy bien explicada, pero son problemas menores en una historia muy bien armada.
Y si alguien quiere saber cómo se prepara el jabalí, durante los títulos de crédito ofrecen una receta.
-Yo no sé la wikipedia. A la gente le hace un daño psíquico...

23/7/11

Templario

Gladiator hizo mucho daño al cine.
Nos llenó la pantalla de centuriones, comandantes de legión, templarios... Pon a la gente cota, espada y capa. Monta un par de batallas. El guión da igual. No importa si es de romanos, de la Edad Media, Conan, el Bárbaro o del Oeste. El ambiente histórico carece de relevancia alguna. Las historias de los personajes pueden ser siempre las mismas.
Aunque, si vamos a la esencia de Templario, lo cierto es que, muchas veces, se trata de una película gore. Una larga carnicería (el asedio de Rochester) con algunos parones para que la gente haga Historia de guardería. Después, amputaciones de miembros. No tengo nada en contra de que, explícitamente, me muestren, por ejemplo, la amputación de una mano. Pero cuando llevan seis y varios pies empieza a resultar aburrido.
El problema no está en el número, de todos modos, sino en el modo de presentarlo. Repetitivo, sin nada de original. Las batallas las hemos visto mil veces (y mejores) y, por mucho que las filmen cámara en mano, por mucho que la sangre salpique la cámara, la confusión no oculta la escasez de ideas.
Bastante decepcionante.

22/7/11

Paul

Los chistes verdes y marrones son un índice clarísimo de falta de ideas en el guión. Cuantos más, peor.
Esta fórmula tan sencilla es algo que muchos guionistas de cine no acaban de aprender. Simon Pegg y Nick Frost, aparentemente, habían estado en clase cuando se explicó el procedimiento. Zombies Party tenía su punto de inteligencia e incluso Arma fatal era más que defendible en muchos aspectos.
Paul empieza muy bien. Luego, cuando se les acaban las ideas, se precipitan hacia el tercer desfase. Tiene cosas buenas, no digo que no. Hay restos del ingenio que mostraron en sus dos primeras películas. Esos dos ingleses, nerds hasta las cachas, que viajan a Estados Unidos para estar en la Comic-Con, el Área 51 y Roswell, tenían mucho potencial. Demonios, también a mí me gustaría hacer ese plan.
El encuentro con Paul, ese alien que ha aprendido en la Tierra a beber, fumar, y decir tacos, daba para mucho, muchísimo más. Especialmente si tienes a tu disposición la voz de Steven Spielberg, la presencia de Sigourney Weaver, la de Jeffrey Tambor, la de Jason Bateman y la de una Kristen Wiig tuneada para parecerse a Carrie Fisher en sus tiempos mozos.
Y chistes tan exageradamente forzadísimos como el de Lorenzo Zoil son patéticos.
No me gusta el desperdicio de buenas ideas.

21/7/11

Chaos

CIA=CHAOS
O, al menos, la ODS, un grupo dentro de la CIA que va por libre, espías de la vieja escuela que preparan unos follones pipudos y luego los arreglan.
El primer capítulo me pareció fresco, original y divertido. Y pensé que de ahí podrían sacar algo distinto. Así que vi otro más. Y ahí ya no era ni tan original ni tan divertido.
Por desgracia viene a ser algo así como El Equipo A pero con unos espías que van por todo el mundo arreglando la vida de americanos. Sólo les falta decir aquello de que me alegra que los planes salgan bien.
Salté al último capítulo. Porque es lo que suelo hacer con las series que me aburren. Y allí estaba Margo Martindale, tan brillante como siempre. Miré en imdb más apariciones interesantes y me topé con que Carlos Leal andaba en otro capítulo haciendo de espía francés. Así que también lo vi.
Y ya está. No sé qué habrá entre medias, pero dudo mucho que sea algo interesante. Procedimentales muy tópicos, supongo.

20/7/11

Convención en Cedar Rapids

Exactamente ésta es la clase de películas que a mí no me dicen nada y que a muchos críticos les agradan hasta el delirio. Intento comprenderlo pero no llego muy allá: a muchos les gusta lo de siempre, pero contado en plan cutre. Si es cutre, es bueno. Si es cutre, es mejor.
Pon el sello indie y le sumo cuatro puntos a la calificación final.
Porque, en el fondo, Convención en Cedar Rapids no pasa de ser una película al estilo de Resacón en Las Vegas, realizada con un presupuesto ínfimo y personajes pardillos, paletos que descubren su primer hotel en una ciudad pequeña.
Son vendedores de seguros de pequeñas poblaciones del Medio Oeste que se reúnen una vez al año para hacer el gamba y tomarse unas vacaciones de sus quehaceres, sus matrimonios y sus complicaciones mentales.
Lo que pasa en Cedar Rapids se queda en Cedar Rapids.
Y, al final, por supuesto, una moraleja bienintencionada y contradictoria con todo lo anterior, tan simple, tan tonta, tan elemental, que haría ruborizarse a Disney por su infantilismo.

19/7/11

Breaking Bad. Temporada 4. Episodio piloto

Breaking Bad es la mejor serie de televisión que uno puede echarse a los ojos. Indiscutiblemente.
Bueno, alguien podría discutirlo, pero apostaría todo el laboratorio de Walter White contra un gramo de metanfetamina sin temor a perder.
Breaking Bad es bestia, sangrienta, divertida, absurda, tóxica, planificada extraordinariamente, con personajes alucinantes. Y, encima, mejora temporada tras temporada. Además está tan abierta y es tan imprevisible que nunca sabes por dónde va a salir o qué pasará en el minuto siguiente. Véase la decisión del amigo Gus en este primer capítulo.
Cuando todas las series huyen en el desierto del verano, Breaking Bad vuelve para amenizar nuestras vidas. Un chute de cristal de extremada pureza que te revoluciona y te deja con la boca abierta. Después la abstinencia es dolorosa, pero supongo que es el precio que hay que pagar por la calidad de un 99% de pureza.
Ahora Jesse ya sabe cómo deshacerse de un cadáver.
Todos deberíamos usar máscaras cuando Breaking Bad comienza.

18/7/11

Nuestra canción de amor

Ayer vi esta película y me gustó mucho.
Si la veo mañana quizá la hubiese odiado.
Podría haberla odiado ayer y apreciarla mañana.
Tiene muchos momentos deliberadamente sentimentales. Pero también secuencias muy originales, extravagantes, cómicas, tristes, brillantes. Esa estancia en el Jardín del Edén (después de haber comido unos pasteles ambiguos), esa persecución tontuela, esos dibujos animados de pájaros.
Muy bien Zellweger. Sobresaliente, una vez más, Whitaker. Y la vida sigue al ritmo de la música de Bob Dylan, de la road movie sudista, de gentes singulares que van y vienen, de charlas con los ángeles, de un simpa en un restaurante de carretera.
Ella paralítica, él con esquizofrenia. Pero adelante. Con miedo. Pero adelante. Porque nadie está tan solo como piensa.
En el fondo todo se reduce a una sola cosa.
Creer o desaparecer. Esa es la cuestión.

17/7/11

Daños y perjuicios. Temporada 4. Episodio piloto.

Cuando comenté el final de la tercera temporada hablé de la imposibilidad de una cuarta. Sin embargo, aquí está. Parecía cancelada y sin posibilidad de regreso. Pero se resiste a morir, como la mala hierba.
Así que aquí tenemos de regreso a la abogada más perra del planeta. Han pasado tres años desde la última vez y ahora Patty Hewes se ocupa de su nieta, después de haber arruinado la vida de su hijo y su nuera.
Ellen Parsons dirige su mirada hacia una agencia privada de seguridad que quizá esté teniendo demasiada iniciativa en la guerra de Afganistán (lo que en España llamamos una misión de paz).
No me ha parecido un capítulo de apertura especialmente impactante pese a esos flashforward tan característicos de la serie. La culpa de esa falta de intensidad está en que, de momento, Patty y Ellen, Glenn Close y Rose Byrne, están muy desconectadas, lejos la una de la otra. Y no hay chispas, claro.
Está un fichaje estrella, John Goodman, que cuando se cruce con Patty dará mucho juego, sin duda.

16/7/11

Betty Ann Waters

Esta señora era un auténtico perro de presa.
Es fácil pensar en En el nombre del padre o en Erin Brockovich. Y, desde la perspectiva literaria en A sangre fría. Eso no le favorece a la película porque sale perdiendo en la comparación.
No está mal. Pero debería haber sido mucho más. La historia es buena y ese ambiente que retrata, un pueblo perdido en Massachusetts, sus gentes peculiares, tenían mayor potencial de desarrollo. Véanse, por ejemplo, las breves intervenciones de Juliette Lewis, Clea DuVall y Melissa Leo: la miseria y sordidez encarnada de diferentes formas.
La amiga Hilary Swank se sale una vez más. No sé por qué no está en mejores producciones. Y Sam Rockwell también funciona bien. Al final, resulta que estaba muy justificada su paranoia, otro tema, la corrupción policial de una agente babosa, que debería haber sido tratado más a fondo.

15/7/11

Harry Potter y las reliquias de la muerte (2ª parte)

Les ha costado 8 intentos pero, al fin, han descubierto de qué iba esto.
Menos humor y más drama, caray, que aquí está muriendo gente.
Tiene su sentido trágico (ese comienzo de funeral, esos silencios sobrecogedores), sus momentos líricos (estupenda la secuencia del pensadero), cierto tono épico (el asedio a Hogwarts), trascendentales (la estación de Kings Cross convertida en una especie de limbo), melancólico (el final 19 años después). Y momentos cómicos los justos, las tonterías de Ron, que es para lo que el chaval está.
Por supuesto, la carga de personajes con que se ha ido llenando la película es un obstáculo para desarrollarlos, cosa que el libro hacía mucho mejor. Pero logran ir a lo esencial: la lucha del Bien contra el Mal.
El último tren del andén 9 y 3/4 ha partido.
Se acabó.
Pero bien está lo que bien acaba.

13/7/11

Confucio

Otra película hacia la que tenía notables reticencias. Decían que ni buena ni mala, ni fu ni fa, una historieta bonita y ya. Figúrate además con sus dos horas largas.
A finales del siglo V y en el siglo VI, China era un majestuoso caos. Aunque, ¿cuándo no lo ha sido? Todo ese periodo confuso lo cuenta la película de un modo igualmente confuso. Al menos para un occidental. Grandes elipsis, escenas con carácter episódico y tropecientos personajes sin personalidad de los que bastante tienes si te aprendes el nombre.
Confucio. Ministro de la Ley, Primer Ministro, filósofo peripatético... exiliado. Y por ahí va, yendo y viniendo con sus seguidores y pasando las de Caín. Porque otra cosa no, pero sitio para moverse por China sí que tenían.
Como siempre en estas producciones no escatiman en extras y en reconstrucciones arquitectónicas. Eso es lo mejor de la peli. El mensaje... no sé. Tiene un tufillo mesiánico y una propaganda subliminal de corte político-social que no me acabó de gustar. Ciudadanos: sed trabajadores buenos y honrados. Nosotros, en el poder, haremos lo que podamos.

11/7/11

Amigos

Amigos.
Hasta que la tele nos separe.
No sé si es un homenaje o una parodia de la telebasura. Pero tiene su gracia. Un despliegue del cutrerío español en busca de sus 15 minutos de gloria. Desde Sara Carbonero y Carlos Moyá a la parodia del Farrita del gitaneo pasando por periodistas amarillos, peruanos inmigrantes y toda esa gente que dice que no le gusta la telebasura pero que sí la ha visto.
No es tan buena como No controles pero se nota la mano de Borja Cobeaga detrás. A Borja le gusta lo de la Nochevieja y la Puerta del Sol más que a un tonto un lápiz. Pero le saca partido, la verdad. Y a los peruanos también. ¿Papas? Patatas. Es que no os integráis.
Lo  mejor: Ernesto Alterio desmadrado en Gran Hermano y el atraco al banco al que los tres acuden para chupar cámara.
Lo peor: que España es así.
E, incomprensiblemente, con un coeficiente intelectual funcional bajo mínimos, seguimos saliendo adelante.

10/7/11

Luther. Temporada 2

Sólo cuatro capítulos.
Cuatro capítulos de una tensión descomunal.
Aún hay guionistas que saben concebir crímenes originales, brutales, impactantes, irracionales. Y directores que saben presentarlos.
Hay momentos de una fuerza extraordinaria. Los policías contemplando en la cámara, por gentileza del criminal enmascarado, un asesinato aleatorio. O esa secuencia, casi sacada de una película del Oeste pero en las calles de Londres, con el asesino envuelto en un chaleco de bombas, a un lado, y Luther, al otro, con un bidón de gasolina.
Un detective negro camina encorvado, las manos en los bolsillos, en el frío londinense. Dos casos de psicópatas y un marrón de los buenos porque hay quien le extorsiona. Luther hace malabarismos para salir de los fregados en que se mete.
Lástima Alicia. Aparece poco, a veces sólo citada. Aunque su fantasma planea por ahí, ha sido una pérdida. Tal vez para otra temporada podamos disfrutar más de nuestra psicópata favorita.
Y, al final, la misma pregunta:
-¿Y ahora qué?

9/7/11

Blackthorn

Me ha costado una semana decidirme a ver la película. ¿Un Western dirigido por Mateo Gil en el que trabaja Eduardo Noriega?
Además, Dos hombres y un destino está lejos de encontrarse entre mis películas favoritas del Oeste. Y ésta viene a ser una especie de what if 20 años después.
Por poner un ejemplo, Innisfree la veo independientemente de que la dirija Guerin o cualquier otro. Merece el beneficio de la duda porque se trata de rememorar a El hombre tranquilo. Pero Dos hombres y un destino, además de parecerme muy sobrevalorada, ha envejecido mal. Quiero decir que, cargarse a Paul Newman y Robert Redford en una misma película puede parecer muy deconstructivo y todo eso. Pero lo cierto es que, en las mismas fechas, se estaba haciendo Grupo Salvaje y un montón de cosas más que invertían, de verdad, los parámetros del Western.
El resultado no me ha espantado pese a que se desarrolle en su integridad en Bolivia y en 1927. Hay cosas forzadas, unos flashback no muy bien planteados y un Stephen Rea con un final superfluo y caprichoso. Pero tiene sus cosas buenas como la secuencia del desierto de sal.
Bien. Mateo Gil se lo ha currado y, la coletilla de siempre, para ser un Western español, cumple bastante bien. Gracias al reparto internacional (muy bien Sam Shepard), que saben de qué va eso de una película del Oeste.

7/7/11

Vacaciones en Hawai

Y después de una peli de Pixar, hay que hablar del corto que la precede.
Tampoco se puede decir que se hayan herniado esta vez. Así como Cars y Cars 2 me parecen las pelis más flojitas de la productora, el corto de Vacaciones en Hawai me parece también el menos esmerado.
Podría ser, sin más, un extra para el DVD de Toy Story 3. Aunque hay quien dice que se trata de un comienzo para Toy Story 4. Veremos.
En cualquier caso la idea de fondo es bien sencilla: seguir dando caña a Kent, el novio de Barbie. Es impresionante la mala baba que desarrollan contra él. El metrosexual más lerdo del planeta. Tampoco es que la Barbie quede bien, claro, pero lo de Kent es ensañamiento visceral.
Imagino que alguien en Pixar tiene una hija encaprichada con Kent y ésta es la respuesta. Llegados a este punto creo que la casa juguetera podría presentar una demanda. Daños, perjuicios, alevosía...

6/7/11

Cars 2

Los que pensábamos que los de Pixar eran magos, hechiceros, entidades supremamente inteligentes procedentes de otro planeta, respiramos aliviados al comprobar, con Cars, que no, que cometían errores y eran humanos.
Y, como el hombre es la única criatura que tropieza dos veces con la misma piedra, aquí está Cars 2.
¿Por qué? Porque Cars es una máquina vendiendo productos de merchandising. A los niños les encanta Rayo McQueen, Tom Mate (desde ahora Sir Tom Mate), Sally y todos esos cochecitos y cochecitas. Y se venden como churros.
Pero eso no quita para que Rayo McQueen sea también Rollo McQueen.
Dicho lo anterior, sin negar que Cars o Cars 2 sean un bajón en Pixar, siguen siendo un subidón para cualquier otro. Técnicamente fabulosos y con ocurrencias originales. ¿Cómo dibujo una japonesa con kimono en modelo coche? Voilà. ¿Y cómo dibujo una mamma italiana en modelo coche? Voilà. ¿Y a la reina de Inglaterra? Voilà. Los circuitos son una delicia y el prólogo a lo James Bond está muy bien.
Pero las ocurrencias no son la película.
Rollo McQueen. Sólo para peques.
Y para eso ya está Disney. No Pixar.

5/7/11

Brave

Acabo de conocer a esta chica y ya me he enamorado.
Se llama Merida y tiene un tipazo alucinante.
El problema es que tendremos la primera cita en el verano de 2012 y no dejo de preguntarme cómo podré esperar tanto tiempo hasta que nos veamos cara a cara. Pues como siempre en estos casos: estando pendiente de fotos, de un nuevo teaser, de un nuevo tráiler, de clips...
Merida es Brave. Pero parece que en países de lengua española van a mancillar el título con un Valiente o un Indomable.
Brave va a ser algo grande. Seguro.
Creo que Brave es el intento definitivo de Pixar de demostrar que esto de la animación no es necesariamente para niños.
Me preocupa que ningún cine haya puesto todavía a la venta entradas anticipadas.
Aquí está el primer teaser.

4/7/11

In treatment. Temporada 2

De todas las historias que aparecen, la única que me interesó fue la de April. A veces la de Walter. Y ese bronca fenomenal, maravillosa, entre Paul y Gina, los dos psiquiatras frente a frente.
April. El tema del cáncer, por supuesto, puede enganchar por sí sólo, especialmente si se tira de sentimentalismo. Pero no es sólo eso. Es el jaleo de emociones entremezcladas en una chica que quiere controlarlo todo: leal, exigente, responsable. Con un hermano autista. No quiere quimio para no preocupar a sus padres. O tal vez para no tener que hacerse responsable de su hermano al que, por otra parte, quiere con locura. O tal vez porque no sabe pedir ayuda. O tal vez porque ha roto los esquemas de su vida. O tal vez... Buf. Impresionante Allison Pill con todo ese despliegue.
Intenta ser algo más cinematográfica que la primera parte: algunos exteriores, más ambientes, una subtrama judicial, algo más centrado en la vida del psiquiatra (Gabriel Byrne también tiene sus momentos para llorar, irritarse, gritar), un poquito menos en la de sus pacientes. Pero lo teatral sigue pesando mucho y el hecho de que sólo una de las cinco historias sea buena...
Veremos qué pasa con la tercera.

3/7/11

Win Win (Ganamos todos)

Paul Giamatti y Amy Ryan. Formando matrimonio.
¿Hace falta más reclamo? ¿Por qué no había colas kilométricas ante la taquilla? Dos de los más grandes intérpretes que tenemos son causa justificada para gastarse el precio de la entrada.
Me cuesta evaluar estas películas. Es una historia sencilla. Pero hace falta tanto trabajo y esfuerzo para contar una cosa sencilla, equilibrada, cabal. Están equilibrados los géneros (comedia, drama, superación personal y deportiva) y están equilibrados los personajes (principales y secundarios) con un desarrollo milimétrico y preciso.
Es una de esas historias que no te conmociona pero que contemplas sin despegar los ojos. Y, cuando acaba, te gustaría que siguiera contándote cosas comunes y cotidianas.
Al final, el título parece contradictorio. Todos pierden. Hasta que lo piensas un poquito y sí, es verdad, todos han ganado un poco en humanidad, en cariño, en aprecio por los demás.
Y lo piensas un poco más, con calma y, entonces, madre mía, qué bien escrito está.

2/7/11

Caballeros, princesas y otras bestias

Hay palabras muy precisas que se deberían usar con más cuidado.
Engendro, mamarrachada, casposa.
No las he usado mucho en el blog porque, con demasiada frecuencia se abusa de ellas para definir algo que, simplemente, es malo.
Engendro, mamarrachada, casposa, son términos que le vienen a esta película como anillo al dedo. Hacía mucho que no me iba de una sala de cine. En concreto desde La vida es un milagro de Emir Kusturica. Y pensé que nunca volvería a ocurrir porque uno va haciendo callo.
Pero esta película ha sido excesiva. Media hora fue excesiva. James Franco, Natalie Portman (no había aparecido cuando me fui), Zooey Deschanel... Metidos en una película de serie Z, presuntamente cómica y sin ninguna gracia. Cutre. Muy, muy cutre. Supongo que el presupuesto se fue entero en pagar a los actores porque todo lo demás parece sacado de Ed Wood sin la sinceridad de Ed Wood.
No hay nada peor que ser cutre y alardear de ello. Ser pretencioso mientras vas con la bragueta bajada.

1/7/11

Juego de tronos

Todo el mundo ha comentado algo de esta serie. Así que comento para no ser menos. Pero advierto que, como con muchas otras series galácticas de la HBO, a mí me dice más bien poco.
Adaptaciones. Hay una idea muy extendida que considera que todo es adaptable entre medios: cine, literatura, televisión, cómic, noticia periodística, teatro... Si funciona en un medio tiene que funcionar en otro.
Y, oye, pues no.
Juego de tronos es una historia épica, una historia de espada y brujería, una historia de mitos y leyendas. Eso se expresa, necesariamente (no exclusivamente pero sí necesariamente) en las batallas. Necesariamente porque hay que hablar de traición y cobardía, de muerte y sangre y mezquindad (eso que tan bien se le da a la HBO) pero también de valor, honor y coraje (y eso no se le da tan bien). De épica, vamos. De lo que viene hablando la épica desde que se escribió La Ilíada. Y Juego de tronos no muestra batallas porque es televisión y no tiene medios.
No está bien. No está bien que el espectador diga: te lo perdonamos porque de antemano ya hemos decidido que era una serie buena. Te lo perdonamos porque eres la HBO. Te perdonamos que nos hagas una peli de Humphrey Bogart sin Humphrey Bogart.
Y, oye, pues no.
Al menos, yo me alzo y digo: no.
Aunque todo el mundo diga que Juego de tronos es la pera, lo cierto es que no debería haberse hecho. Porque es inadaptable a la televisión.
Qué más quisiera yo que me hicieran una serie de 200 capítulos sobre El Señor de los Anillos. Pero si me vas a esconder las batallas, la reconstrucción de las ciudades élficas y las escenas de masas porque, ay, se te va de presupuesto, entonces mejor no lo hagas y confiesa: no todo es adaptable.
Juego de tronos es, admitámoslo, bastante chapucera. Todos aquellos que decidieron que era genial meses antes de que saliera a antena, todos los que decidieron que era buena porque era HBO, están, por supuesto, con el síndrome de Estocolmo. Pero es chapucera. En muchas cosas. Esas batallas son elipsis brutales que, lamento decirlo, acentúan la confusión que los capítulos centrales mostraban: no hay un norte, hay demasiados personajes, la mayoría de ellos no están perfilados, la geografía es inverosímil (las distancias a veces parecen enormes, otras un paseo, los cuervos son casi como usar gmail...), los efectos especiales dejan que desear... Cualquiera que no tenga síndrome de Estocolmo se tronchará con los dragoncitos. Simpáticos pero tronchantes.
¿Que tiene cosas buenas? Pues sí. Es verdad. Tiene momentos y momentazos. Pero es innegable que también hay mucha chapuza de por medio. Ni es una obra maestra, ni es genial. Está lejos de la perfección, es mediocre, da una de cal y otra de arena.
Ha sido un error adaptarla y punto. Quiero decir que, si se mira con objetividad, hay muchos agujeros. Y me juego mi colección de cromos de Kim Possible a que el invierno, el tan cacareado invierno, y los muertos vivientes, defraudarán.
Una cosa me alegra: que hayan escogido, para destrozar, a Juego de tronos y no a El Señor de los Anillos. Si esto se lo hubiesen hecho a Tolkien, muchos estaríamos lanzando cabezas de directivos de la HBO en catapultas.