27/5/11

El gran Lebowski

Estos días he citado algunas películas a cuyos directores se les fue la pinza. Y eso que no he dicho nada de Lars von Trier y sus declaraciones en Cannes.
Supongo que cuando un director cree que ha llegado a cierto nivel de grandeza (véase Almodóvar y Los abrazos rotos, otra ida de olla) decide hacer algo extravagante para ver si cuela. Algo que a él le gusta, una película para sí mismo, para mirar por las noches cuando ninguna película de ningún otro director le gusta.
No todo lo que hacen los hermanos Coen me agrada. Pero les reconozco algo: incluso cuando se les va la pinza, saben controlarse.
Por supuesto El gran Lebowski es el gran ejemplo. Una película marciana donde las haya que, vete tú a saber por qué, funciona con precisión. El Nota y sus colegas de bolera juegan en el precipicio del absurdo sin caerse por el borde. Como las cenizas de Donny, se quedan en tierra.
También es cierto que, si tienes a Jeff Bridges, John Goodman, Steve Buscemi, Julianne Moore, John Turturro y Philip Seymour Hoffman, juegas bastante sobre seguro.
-Supongo que es así como la condenada comedia humana se va perpetuando.

No hay comentarios: