31/1/11

¿Cómo sabes si...?

En su momento, Spanglish me dejó bastante satisfecho, así que me interesaba seguirle la pista un poco a James L. Brooks. Es otro señor con una edad ya provecta y quizá tiene algo que aportar.
La película pretende hablar de dos cosas. Por un lado de escoger con el corazón o la cabeza. Lisa tiene a Matty (deportista, rico, inmaduro, descerebrado, gracioso) y a George (honrado, trabajador, acusado de fraude, en paro).
Por otro lado la idea, creo yo, es que, escojas lo que escojas, de ti depende que funcione.
Sin embargo, todo esto, no está bien contado. Son dos horas de diálogos con uno, con otro, con el de más allá, vuelta a casa de uno, a la del otro, al de más allá. Repetitiva sin aportar nada nuevo y sin que las conversaciones tengan mucho interés.
Lo mejor son los secundarios: Jack Nicholson (relativamente moderado), Kathryn Hahn (una embarazada muy divertida) e incluso John Tormey (el portero).
Perfectamente olvidable.

28/1/11

RED

Y he aquí la filosofía de Los mercenarios bien realizada: juntar a un grupo de actores consagrados para hacer una película paródica de espías.
Bruce Willis, Morgan Freeman, John Malkovich, Helen Mirren y Brian Cox. Espías jubilados. Viven en su urbanización, su geriátrico, su casita de campo, su sótano bajo un coche... Con su aburrimiento, su nostalgia, su paranoia. Y a alguien se le ocurre ir a por ellos, alguien pretende matarles por lo que ocurrió en Guatemala allá por los años 80.
Pero los abueletes no sólo saben defenderse sino que pueden dar guerra. Mary Louise-Parker (muy graciosa) se suma al carro, Karl Urban está en el otro lado y también aparece ¡Ernest Borgnine! Acción, humor, diálogos graciosos, situaciones ingeniosas...
Como Noche y día sólo que con más y mejores actores. Me alucina, siempre, Helen Mirren. En una tontería como ésta, ella, que fue The Queen, sabe que una mirada, un gesto, son lo que construye una interpretación. Y John Malkovich, haciendo el tonto y pasándoselo pipa, también como siempre, acompañado de un cerdito de peluche rosa.

26/1/11

El cine es así

Ayer hubo muchas noticias trascendentales para el cine: anunciaron los candidatos a los Oscar, Álex de la Iglesia dimitió y conseguí que un tío de 19 años viera Ciudadano Kane. Entera.
Me quedo con la de la Álex de la Iglesia porque supongo que, como a todo el mundo, suena rarísimo.
No sé muy bien los motivos y razones. Él menciona algunos argumentos en declaraciones que va haciendo por todas partes. Parece que se ha dado cuenta de que la cosa de las descargas, a un módico precio, no está tan mal.
Habla mucho de que aprendió a dialogar y tal. Excelente. Es una pena que la gente no aprenda a dialogar hasta los cuarenta y muchos. Normalmente es algo que se aprende en la adolescencia: debatir, cooperar, abrir la mente... Pero en estos tiempos la gente cristaliza el cerebro y no se apean de la burra. Bien. Un poco tarde, pero mejor tarde que nunca.
No vendría mal que abrieran la mente del mismo modo los políticos de este país. Pero me estoy yendo del tema. Lo que quería comentar era que Álex de la Iglesia ha conseguido promocionar la gala de los Goya como nunca. Y eso es una maniobra tan hábil como la otra.
¿Y después?
No sé. A mí todo esto me escama. No creo que las cosas sean tan sencillas como pretenden hacerlas parecer ahora. Ojalá sea verdad que de la Iglesia ha descubierto los beneficios de internet. Bienvenido, por fin, al siglo XXI. Tener a alguien de su talla en ese terreno es importante. Pero me temo que hay gato encerrado.
Lo sé. Soy un desconfiado.
Mi paranoia.

24/1/11

Luther. Temporada 1

Gracias a Santiago me enteré de la existencia de Luther, otra serie de la BBC que saca petróleo de un género que parece agotado y repetitivo.
Luther es Idris Elba, inspector de homicidios en Londres. Dejó que un asesino de niños cayera de lo alto de un edificio. El asesino está en coma y el propio Luther no se siente muy bien por lo que hizo.
¿Parece tópico? Pues sí. Pero, a partir de ahí, los guiones (6 capítulos) logran sorprender tanto como los personajes. Y las subtramas se entrelazan para construir una historia general y para dar forma a dos capítulos finales de infarto.
Alice. Alice es una señorita licenciada en Física, una superdotada. También una psicótica asesina que no deja pruebas. Es la pesadilla de Luther y su consejera, su enemiga y su aliada, su fuente de problemas y la solución, su perdición y su salvación. Porque, en el fondo, se trata de averiguar si en este mundo hay amor. O no.
-Un café no nos convierte en amigos.
O sí.

23/1/11

Monsters

La nave de la NASA que, ahora hace seis años, encontró pequeñas formas de vida en el espacio, se estrelló en México. Esas formas de vida se acomodaron muy bien al terreno. Ahora han crecido. Mucho. Pero mucho, mucho. Hasta 150 m.
Un fotógrafo de New World y la hija del dueño de la revista intentan volver a Estados Unidos desde la zona infectada.
Ni terror ni ciencia-ficción. Es, más bien, una road movie romántica rodada como un falso documental. Un montón de géneros metidos en uno. Conoceremos la fase simbiótica de los alienígenas (¿alienígenas o fauna inmigrante plenamente adaptada?) en los árboles, su crecimiento en los ríos, sus ritos de apareamiento en tierra... Y también a esos dos humanos que acaban de conocerse y que, oye, con las dificultades, el viaje, el trato, acaban por enamorarse.
Gareth Williams escribe, dirige, fotografía, hace los efectos especiales y saca adelante una película sencilla y bonita. A mí, al menos, me ha gustado. Aunque comprendo que no sea para todos los paladares porque la mayor parte del tiempo parece que va a pasar algo y no pasa. O sí. Depende de lo que uno suponga que tiene que pasar.

22/1/11

Más allá de la vida

Matt Damon es un señor que habla con los muertos, Cécile de France es una señora que tuvo una experiencia cercana a la muerte en el tsunami de Indonesia y el crío que anda por ahí es un niño que echa de menos a su hermano gemelo muerto. Los Ángeles, París y Londres. Pero el azar, el destino, la suerte, les une.
¿Y a mí qué?
Pues que a mí no me dice nada. Lo siento. No capto drama. Tensión. Quiere hablar de la muerte. Del ateo cerrado, de la atea con mente abierta, de la que quiere saber pero después preferiría no haber sabido, de la que cree, del que no necesita creer porque ya sabe...
Y sigue sin decirme nada.
Si te gusta el tema de las ECM (Experiencias Cercanas a la Muerte) te recomiendo un libro, Tránsito, de Connie Willis. Con más gancho y un final tan redondo como sorprendente y pura coña inteligente. Además, las historias de los personajes son buenas. Y no como las de estos tres de Más allá de la vida que, la verdad, me parecieron muy sositas.
Dicho esto, todos sabemos que Michael Bay o Roland Emmerich habrían hecho aburridísimas películas de dos horas para mostrarnos el tsunami. Eastwood lo liquida en 10 minutos. Es, con mucho, lo mejor de la película, tanto por el modo de rodarlo como por la ECM de Marie.
Clint: no te nos pierdas.

20/1/11

Amer

No tenía ni idea de que aún quedasen freudianos en activo.
Amer (amargo, en francés) se pudo ver, de modo oficial, en Sitges y en Málaga. Es decir, asociada a festivales de cine fantaterror. De hecho, yo la he visto en un ciclo de cine fantaterror que organizaba una asociación, invitado por María José, antigua compañera de la Universidad. Y no doy más datos porque la proyección no era del todo legal.
Bien. Supongo que los directores, Hélène Cattet y Bruno Forzani, han encontrado en este tipo de festivales el camino adecuado para distribuirla. Incluso han utilizado un cartel promocional en esa línea. Ni el cartel ni el fantaterror tienen nada que ver con la película.
Amer es surrealista y se parece, si es que a algo se parece, a Un perro andaluz. Hay escenas que son homenajes o guiños o referencias directas a la película de Buñuel.
Hay tres partes: infancia, adolescencia y juventud de Ana. Y dos temas evidentes: eros y thanatos.
Sólo la segunda parte, la adolescencia, me gustó porque, puestos a ser freudianos, es donde se emplean símbolos más sugerentes y originales, donde la película logra ser más surrealista, onírica, extraña. Los de la infancia y la juventud me parececiron muy triviales por demasiado obvios y, además, pretenden contar algo con sentido pero no del todo. Es decir: son menos surrealistas.
Supongo que no has entendido mucho de lo que he contado pero es que hablamos de una película sin pretensiones de ser entendida.

19/1/11

The Green Hornet

Cuando vi Olvídate de mí obedecí al título y no volví a pensar en ella. No había vuelto a acordarme de la película hasta ahora. La culpa es de Michel Gondry por estrenar una nueva película. No habría desobedecido y me habría ahorrado The Green Hornet.
Seth Rogen se escribe el guión para sí mismo: dos horas de ruido, de incontinencia verbal, de charlatanería incesante. Dos horas intentando desesperadamente ser gracioso sin conseguirlo en ningún momento.
Hay dos cosas buenas en esta película.
La primera es Christoph Waltz, que vuelve a encarnar a un malo muy original.
La segunda es la cafetera de Kato. No me importaría probar un capuccino de esa máquina.
Dicen que va de superhéroes pero yo no conseguí verlos.

18/1/11

Las crónicas de Sarah Connor. Temporada 2

Que levante la mano quien no sepa lo que es un T-1000.
¿Nadie?
Obvio. Todos sabemos que un T-1000 es una clase de Terminator que entra como un elefante en una cacharrería. Sin reparar en efectos colaterales. Ni en gastos.
Por eso no me gustó que una T-1000 resultara ser una ejecutiva calculadora de una gran corporación (¡y mamá!). Aunque después resultó que la cosa tenía su razón de ser. Y una razón muy buena. No me gustaron esos capitulillos en los que Cameron tenía problemas mentales. Ese rollete de psicología femenina en una Terminatrix me pareció fuera de sitio. Pensé que iba a ser la primera Terminatrix con anorexia. Pese a todo, Cameron sigue siendo lo mejor. ¿No es encantadora cuando entra en las comisarías de policía (de México o Estados Unidos) destrozando lo que pilla a su paso, haciendo lo que mejor sabe hacer? ¿No es encantadora cuando encuentra al Terminator oculto tras una pared después de 80 años o cuando pelea con otra Terminatrix en un ascensor? No me gustó la tontería de Reese de mantener oculta a su novieta del futuro. No me gustó por supuesto, el niñato de John Connor, un adolescente consentido que se supone que es un líder porque pone carita de duro de vez en cuando (un gran error de casting, creo yo). No me gusta porque se supone que todos moriríamos por John Connor. Y no me gusta Sarah Connor porque no entusiasma. No está mal pero debería entusiasmar. No es, definitivamente, Linda Hamilton. Ella sí que los tenía bien puestos, sí que asustaba, sí que sabía ser dura. Si Linda Hamilton hubiese estado ahí, John no habría sido tan caprichoso.
Me gusta la paradoja temporal que organizan en el último momento y que nunca se resolverá porque la serie no seguirá adelante.
Lástima porque, con todas las cosas que no me gustaron, habría querido seguir inmerso en esta mitología robótica.

16/1/11

Otra vez tú

Pienso que Otra vez tú es como Los mercenarios pero en versión femenina.
No en cuanto al argumento, obviamente. Sí en cuanto a formas de hacer.
Reúnen a un montón de buenas actrices y les ponen a hacer el ridículo. ¿El tema de la comedia romántica? El de siempre: una boda. Destrucción de la boda y arreglo final para ser todos felices.
Da pena, de verdad, ver a Kristen Bell, Jamie Lee Curtis, Sigourney Weaver (demonios, chica, eres la teniente Ripley), Odette Yustman, Betty White y Kristin Chenoweth haciendo el tonto con todos los convencionalismos del género: desde llevar el mismo vestido a tirarse comida a la cabeza.
Y, entre todas esas actrices, resulta que el mejor personaje es el de Victor Garber. Quizá porque, como yo, hay muchas veces que renuncia a entender el universo femenino.

15/1/11

De dioses y hombres

Es una gran película, pero no una película para grandes públicos. Está más cerca de Dreyer que de Hollywood. Ese monasterio en el Atlas es, casi, un espacio abstracto, el espacio del alma donde se juegan las cosas verdaderamente importantes.
Una gran escena: el momento en que los monjes saben que no tienen oportunidad alguna, que van a morir. Aceptan la muerte y, alegres y tristes, escuchan El lago de los cisnes mientras se beben un buen vino. Dioses y hombres.
Otra gran escena: el helicóptero. A mí me evoca Apocalypse Now y el momento de La cabalgata de las Walkirias. Pero aquí, lo que suena mientras una ametralladora planea sobre el convento, es un canto gregoriano.
Sobriedad en la puesta en escena, contención emotiva, grandes silencios contemplativos. Y, con todo, conocemos a cada monje, con sus dudas, temores, debilidades, vacilaciones, miserias.
Como pájaros sobre la rama de un árbol que no saben si echarán a volar.
Hasta que descubren que ellos son la rama que sostiene a todos los demás.
Si queda en Hollywood gente que sepa de cine, cine como Arte, ganará el Oscar. Fijo. Y lo siento por También la lluvia. Por buena que me parezca la española, por muchos juegos metacinematográficos que tenga, todavía hay clases. Y De dioses y hombres está en la aristocracia.

14/1/11

Miedos 3D

El título original era The Hole, cosa que estaba muy bien.
En la versión española, el traductor y el diseñador tuvieron la ocurrencia de escribirlo así: mi3Dos. Y, por si alguien no lo pillaba, existía esta otra posibilidad: mi3Dos 3D. En la edición al DVD nada de todo esto tenía sentido así que se quedo en Miedos.
Es una peli de miedo para niños. Y a mí ese estilo me gusta porque no es nada fácil de hacer. Uno corre el peligro de pasarse o de quedarse corto. Encontrar el punto justo no está al alcance de todos. Sí de Joe Dante que, desde Gremlins, marcó unas pautas para el género.
No entiendo a todos esos críticos que la han puesto de vuelta y media porque no es Saw o The Hostel. Es verdad que no hay vísceras, ni sangre, ni corazones arrancados en vivo. Porque no han acabado de entender que es terror para niños.
A mí, personalmente, no se me ocurre cómo hacer algo así, de modo que aprecio que alguien lo intente.
Muy sugerente la secuencia del mundo onírico de Dane, con esos escenarios que recuerdan a El gabinete del Doctor Caligari.

13/1/11

V. 2x01

Tenía ganas de ver el comienzo de esta segunda temporada de V por un motivo: saber si la seguiré o no.
Va a ser que no.
De momento. Quizá luego alguien me diga que está genial y, como enseguida cojo cariño a las criaturas ajenas al planeta Tierra, lo acabaré viendo.
Habíamos dejado a la lagarta Anna con su primera emoción humana (un cabreo del quince), a la Tierra cubierta de nubes rojas y al espacio intergaláctico poblado de naves visitantes dirigiéndose hacia nosotros.
Apetecible.
Pero después de una lluvia un poco rara las cosas han vuelto exactamente a lo de siempre. Los de la Quinta Columna a lo suyo, el periodista también, Erica Evans lo mismo y su hijo igual de empanao.
En junio llega Falling Skies. Quizá otra decepción pero, de momento, una esperanza de que los extraterrestres nos invadan como debe de ser.
Somos gente de paz.
Siempre.

12/1/11

El Mayor y la menor

Estas Navidades me encontré con Tomás y me recomendó una película de Billy Wilder que yo no había visto: El Mayor y la menor. No es lo mejorcito de Wilder pero tiene momentos geniales.
Ginger Rogers se sale.
Interpreta a Susan, una señora de 31 años que, arruinada, cansada de no encontrar un trabajo decente en la ciudad, decide volver al pueblo. Pero como no tiene dinero suficiente para el tren, decide hacerse pasar por una menor de 12 años pues le hacen descuento.
A Ginger Rogers, a sus 31 años, no te la crees en ningún momento con 12 años, pero ahí está la gracia de los líos que se van organizando: los revisores del tren que ya sospechaban y la ven fumar, el Mayor del ejército que acoge a la pobre niña durante la noche, la novia del Mayor que la encuentra a la mañana siguiente, el revuelo que la jovencita (y muy desarrollada) Susu organiza entre los cadetes y los no tan cadetes...
Y la cosa va complicándose. Se hará pasar por una menor, se hará pasar por su madre y, al final, incluso tendrá que hacerse pasar por ella misma. Y encontrará un hueco para marcarse un breve claqué de esos por los que todos la idolatrábamos.

11/1/11

Cartas al padre Jacob

Leila es una mujer ruda y arisca. Condenada a cadena perpetua es indultada tras 12 años de prisión. Le ofrecen trabajar para el anciano pastor de una parroquia, ciego. Ella debe leerle las cartas que le escriben y escribir las repuestas que le dicte.
Lo que más me sorprende de esta película es que sea finlandesa. Quiero decir, que me sorprende que una película tan religiosa se haga en Finlandia.
Minimalista en todo: dos intérpretes (hay alguno más, pero no son necesarios), unos pocos escenarios, 74 minutos de duración.
Obviamente es una película sobre la redención. Y ese es el problema: es obvia. Una anécdota previsible que debería tener más fuerza por ser sólo una idea.

10/1/11

No controles

En los primeros minutos empecé a preocuparme por varias cosas: ¿cuánto dura esto? ¿por qué no lo he mirado antes de entrar? ¿no habría sido mejor quedarme en casa jugando al parchís?
Pero la cosa fue cogiendo forma y, cuando empiezan a preparar el cotillón, con (casi) todos los personajes en juego, se vuelve realmente divertida.
No se puede decir que sea una película buena pero tiene momentos muy graciosos. Algunas escenas son previsibles (la piscina congelada) pero otras consiguen sorprender y resultan desternillantes.
Cobeaga tiene oído para los diálogos cotidianos, las frases hechas y convierte su carga de trivialidad en humor. También sabe crear algunas situaciones originales: el momento de las 12 campanadas, Facebook es un timo y no funciona, el ladrillo que cayó del cielo, si pienso no me salen las cosas, la azafata que echa una mano...
Dicen que mejor o peor que Pagafantas. Pienso que no deberían compararse; simplemente, son distintas. Son películas para pasar el rato, reír un poco y ya está. Pagafantas es más ácida, No controles es más de final feliz.
Juancarlitros: menudo personaje.

9/1/11

Persons Unknow. Temporada 1

Tenía la marca de un nuevo Perdidos, así que me aproximé a ella con cuidado, vigilando el perímetro. Tiene la base, sí, de Perdidos. Y la de The Prisoner y Cube y otras muchas.
7 personas despiertan en un pueblo. Un pueblo de esos con una calle. No pueden salir de allí. No saben por qué les han secuestrado. Un grupo de cocineros chinos les hace la comida. Un hombre atiende el hotel. Una serie de pruebas, algunas bastante límite, les cae encima.
Persons Unknow va dando respuestas. En el capítulo 6 se aclara el misterio general. A muchos no les gustó eso. A mí sí. No andan mareando la perdiz y son capaces de sacar nuevos animales de la chistera.
Hay algunos capítulos flojitos (y eso que sólo son 13). Los personajes no tienen tanta fuerza como los de Perdidos. No hay flashbacks con historias asombrosas. Se sigue, por tanto, sin ansia. Y, por supuesto, hay cosas tan imposibles como esas cámaras esparcidas por el mundo vigilando absolutamente todo.
Pero lo mejor de Persons Unknow es el final de temporada. El mejor final que he visto para una serie así, con ese montaje en paralelo, con esos dos alucinantes escenarios (el hotel, el Almas Perdidas). ¿Quieres sorpresa? Ahí la tienes. Pero, además, puede que haya sorpresas para los malos. Puede que no hayan escogido bien el campo de batalla.
Eso si hay una segunda temporada. Que parece que no.

8/1/11

También la lluvia

Lo reconozco: va merecidamente a los Oscar.
Vaya cacho de pedazo de trozo de película que se ha marcado Bollaín. Yo, muy escéptico con el cine español (pese a otras sopresas que la directora me había deparado), iba dispuesto a entregar todo el mérito al guión de su marido Paul Laverty. Por aquello de que es el guionista habitual de Ken Loach.
Pero mira tú: Icíar Bollaín se supera a sí misma con cada película que hace.
Hay una película ficticia sobre Bartolomé de las Casas. Y hay un documental ficticio sobre la película ficticia que filma, entre otras cosas, los ensayos ficticios en la línea de Vania en la calle 42 o Looking for Richard. Y está la película en sí que es, a su vez, un falso documental sobre la Guerra del Agua en Cochabamba.
Y Bollaín juega todos estos niveles con una habilidad deslumbrante. Porque, por ejemplo, la niña que interpreta a una india contemplando el castigo de su padre ("triste, pero interesante") se siente obligada, por coherencia, a actuar en la vida real, expresando la inspirada indignación.
Hay escenas logradísimas. El discurso de Montesinos; las madres que se niegan a interpretar el ahogamiento de sus bebés porque ni siquiera se lo pueden imaginar (y una de ellas canta, calmándoles); o la del comienzo, que a mí ya me atrapó para no soltarme, planteando muy bien lo que va a ser toda la película: una lucha contra la injusticia.
-Sobrevivimos, como siempre. Es lo que mejor se nos da.
¡Ah! Y Luis Tosar, que empieza haciendo el mismo papel de siempre, evoluciona. ¿No es flipante?

7/1/11

Los próximos tres días

Me he quedado un poco descolocado con esta película porque no sé muy bien qué pretende contar.
Suspense. Drama. Acción.
Acción en la última media hora. Y en plan realista (relativamente). No se desmelena con cosas aparentemente imposibles. Russell Crowe es un profesor de literatura, no un marine, ni un ex combatiente cabreado de operaciones especiales. Así que hace las cosas al estilo de un hombre normal, por así decir.
La primera hora y media es en parte drama y en parte suspense: ¿es su mujer una asesina?, ¿qué planea hacer él? ¿cómo pretende sacarla?
Pero ni el drama ni el suspense ni la acción se filman de esta manera. Es una mezcla muy extraña que no puede satisfacer por entero a nadie. Creo yo. A mí me ganó el suspense pero me parece que sobra tanto el drama como la acción.
Esos toques pseudocultérrimos sobre El Quijote, esas interpretaciones literarias tan pedestres, quedan un poco pretenciosas, como para cargar de contenido y profundidad a algo que realmente no lo tiene. La historia es cómo sacar a la señora de prisión. Punto. Está esa parte al estilo de Walter White en Breaking Bad en la que Crowe tiene que introducirse en el mundo criminal y que es lo que más me gustó. Pero tampoco tiene entidad suficiente.
En definitiva, que no sé qué quería hacer Paul Haggis y dudo mucho que él mismo lo supiera por más que haya escrito el guión.

6/1/11

Camino a la libertad

En la misma línea de Hasta donde los pies me lleven. En 1940 un grupo de prisioneros huye de un gulag en Siberia. Atravesarán, andando, Rusia, Mongolia, China y el Tíbet hasta llegar a la India.
Pero, como señalan las últimas imágenes, el camino a la libertad acabó en 1989 con la caída del muro de Berlín.
Peter Weir no es muy dramático. Quizá no lo pretende. Es una denuncia del comunismo, pero no como motivo principal. Camino a la libertad es una historia acerca de la fuerza de voluntad humana, una epopeya sobre la capacidad del hombre para llevar a cabo tareas aparentemente imposibles. Como en muchas otras de sus películas, la naturaleza es un personaje más: nieve, hielos, rocas, desiertos...
No esperes una de acción. Es una película calmada, reposada, un viaje contemplativo con vida muerte, miserias y actos heroicos.
Si además tienes rostros conocidos como Jim Sturgess, Ed Harris, Colin Farrell o Saoirse Ronan, la cosa se hace muy llevadera. Pero creo que le falta algo más de fuerza, personajes más intensos.

5/1/11

DVD versus descargas

No voy a cuestionar las indudables ventajas del DVD sobre una descarga: calidad de imagen, idiomas, subtítulos...
Pero hay excepciones. Hace ya tiempo me regalaron el DVD de Picnic en Hanging Rock, la desasosegante película que dio a conocer a Peter Weir. Y la última media hora no se podía ver. Era original, con su funda de plástico y todo. No puedes devolver algo desprecintado, así que fue dinero perdido. Tuve que ver el final en una versión descargada que perdía mucho de la extraordinaria fotografía pero que, obviamente, no daba ningún problema.
Ayer estuve viendo la edición en DVD de El bueno, el malo y el raro. Pues bien, quién sabe por qué, se han cargado el final y la historia queda distinta. Han hecho desaparecer 10 minutos después del duelo y otros 3 o 4 durante los títulos de crédito. Si quieres saber por qué el raro resistía los múltiples balazos del tiroteo, qué ocurrió con el ejército japonés o qué decidió hacer el bueno, tienes que irte a una versión que no sea la que ofrece el DVD oficial en España.
Estuve buscando en los extras o finales alternativos. Nada. De hecho, el DVD oficial no aporta nada nuevo: sólo elimina. Así de dura e injusta es la vida.
Cosas como éstas (no hay derecho a la devolución, versiones alteradas) no ayudan a hacer amigos entre los que defienden la supuesta ilegalidad de las descargas.

4/1/11

Historias de Navidad

La película navideña que más resalta la nostalgia es Historias de Navidad. Nostalgia desatada, a borbotones.
Es la Navidad vista por un niño. No hay una conciencia clara ni de religiosidad ni de paz en la tierra ni de vamos a ser todos buenos. Es la percepción de los juguetes, la nieve, la extrañeza. Es el recuerdo imposible, surrealista, exacto de la Navidad perfecta.
El chico es Ralphie y esta Navidad va a descubrir muchas cosas. Será la primera Navidad en que decida pelearse dejando salir su ira, será la Navidad en que diga su primer taco, en que odie a Papá Noel de modo inesperado. Pero también será la Navidad en que descubrirá un nuevo sentido a las cosas, los engaños de los adultos, los de la publicidad, los de los centros comerciales. Y conseguirá la escopeta que había deseado.
Cómica, absurda, no nos cuenta la realidad. Nos cuenta cómo es la imaginación de un niño, cómo reinterpreta la realidad.
No es una película fácil de conseguir ni la ponen en la tele tanto como ponen otras. Pero cuando se acercan los Reyes (y aunque en la película se trate de Papá Noel) siempre me acuerdo de ella.