31/1/10

En tierra hostil

Hay pocas mujeres que dirijan películas y, de las pocas que hay, aún menos dirigen películas de acción.
Kathryn Bigelow demuestra con En tierra hostil que está entre los grandes.
La historia de un adicto al riesgo, un yonqui de la descarga de adrenalina.
Me gustó ver por ahí en pequeños papeles a Evangeline Lilly, David Morse, Ralph Fiennes, Guy Pierce... Pero lo verdaderamente impactante de esta película es esa capacidad para planificar, desde los grandes espacios (mostrarnos los posicionamientos estratégicos de los soldados) al primerísimo plano (la mosca en el ojo del francotirador, el sudor del hombre que desactiva los explosivos). Bigelow sabe en todo momento dónde debe de estar.
Bueno, y la tensión, claro. Cada misión, una locura.
La mejor peli que he visto sobre Irak y una de las mejores películas bélicas que recuerdo.
Espero que Bigelow le arrebate el Oscar a su ex marido Cameron. Se lo merece con gran diferencia. No entiendo que haya tardado dos años en llegar hasta aquí.

28/1/10

Puedo escuchar el mar

Que cientos de dichas caigan sobre Aurum como las flores del cerezo. Por fin, alguien ha puesto manos a la obra y comienza a editar en DVD las películas de los estudios Ghibli. En cuanto supe que estaba disponible Puedo escuchar el mar me lancé a por ella de cabeza. Sabía que era una obra menor pero Ghibli es Ghibli. Es Miyazaki, es la que recibe inclinaciones de cabeza de Pixar. Puedo escuchar el mar dura poco más de una hora y es, simplemente, un romance de instituto. Pero eso sí: es Ghibli. Quiero decir que menuda diferencia con las cursiladas Disney o los desmadres del resto de Hollywood, con los argumentos prefabricados y las situaciones previsibles. Puedo escuchar el mar tiene una animación bastante pobre y algo asombroso: cuenta una historia de amor de gente normal. Y con eso está todo dicho. Es tan difícil hacer eso... Y, ahora, a ver si editan Porco Rosso.

27/1/10

Nine

Obsesionado con el cine.
Obsexionado con las mujeres.
Lo primero le provoca una crisis creativa.
Lo segundo, una crisis de conciencia.
El gran problema de esta película musical es que la acción no avanza, los personajes no tienen desarrollo, el guión es circular. Escuchamos, una y otra vez, qué opinan de Guido Contini (Daniel Day-Lewis) cada una de las mujeres de su vida: su mamma (Sophia Loren), su mujer (Marion Cotillard), su musa (Nicole Kidman), su amante permanente (Penélope Cruz), su posible amante de una noche (Kate Hudson), su diseñadora de vestuario (Judi Dench).
Y las opiniones dan para los primeros 10 minutos porque tampoco es un personaje muy complejo.
Obsesionado con el cine.
Obsexionado con las mujeres.
Y, por otra parte, desde luego, es dudoso que sea un musical.
Yo no le doy ni un aprobadillo. ¡Qué desperdicio de reparto!

26/1/10

Sons of Anarchy

Moteros mafiosos.
Creo que la música para la versión española deberían encargársela a Joaquín Sabina. Le pegaría mucho.
Allá por los años hippies (los 60 me parece que eran), un grupo de colegas se unió en un club. Afición a las motos, la libertad, volar bajo el radar, vivir felices y contentos. Una utopía, un sueño. Pero los tiempos que corren no están para utopías y el club se convirtió en un grupo de criminales dedicados al contrabando de armas. Jax, hijo del fundador, anda por ahí, perdido, creyendo que Sons of Anarchy es una gran familia feliz, que su madre es una santa y su vida un paraíso.
La serie empieza en el momento en que Jax empieza a cuestionarse todo esto: su ex mujer drogadicta tiene un bebé, su madre intenta cargarse a la ex, el legado de su padre parece encerrar sórdidos secretos, los enfrentamientos con bandas rivales revelan cosas sucias...
En fin: la vida dura, pringosa, delictiva, cruenta, miserable de unos moteros mafiosos.
El Padrino en Easy Rider.
Nos vemos en Charming.
S.O.A.

25/1/10

Sobrepasando el límite

Un nuevo superhéroe ha llegado a la ciudad: es el Rectificador y se dedica a destrozar los coches a los que se les salta la alarma.
Y ahí se acaba la gracia.
La idea se pude dirigir de muchas maneras pero al director y los guionistas se les acaban las ideas en la propia presentación. Desde la propuesta inicial hasta la conclusión, el guión se entrampa en vueltas y revueltas, se hace repetitivo, cansino, tedioso. Apenas hay 15 minutos interesantes. El resto es marear la perdiz.
Me gustaba esa idea de la necesidad del silencio en una sociedad que recibe, incesantemente, excitaciones acústicas. En algún momento intentan filosofar sobre ello, pero sin llegar al fondo. Se quedan en la epidermis. De modo que ni ellos mismos saben por qué preferir un momento de silencio al ruido perpetuo.
Me quedé con la sensación de que la propia película es, sólamente, ruido.

24/1/10

Ricky

Tengo un amigo francés. Se llama Pierre y aún no entiende por qué algunos españoles odiamos a Francia.
Pues, tío, por películas como ésta.
La idea de un bebé al que le nacen alas no es nueva pero es sugerente. La cuestión es qué diablos hacer después con el angelote mofletudo, con ese puti regordete, con esa inocencia en carne viva.
Y Ozon no tiene ni pajolera idea de qué hacer con él. Pasan 45 minutos antes de que aparezca el bebé y los otros 45 transcurren estirándolos de mala manera. Para acabar en nada.
Realismo muy puro y muy duro. Y muy sucio. Ahí es imposible encajar lo fantástico. Ya, bueno. He leído algunas críticas por ahí que dicen que no es fantástica sino surrealista en plan Buñuel. No te lo creas.
Hollywood es el único sitio en que han sabido qué hacer con un humano con alas. Es mala idea pero es la menos mala: lo llaman, obviamente, Ángel, es un mutante y lo mandan a la escuela de los X-Men.
De verdad: mejor tirar por el camino carretero de la aventurilla que ir de profundo siendo un mediocre.
Odio Ricky. No es que sea buena o mala. Es, sin más, una estupidez.

23/1/10

Up in the air

Debo reconocer que tiene algunos diálogos, largas conversaciones, verdaderamente brillantes. Por ejemplo esa escena en que hablan Vera Farmiga y Anna Kendrick:
-No me gustaría que se me viera como una antifeminista, quiero decir que agradezco lo que hizo tu generación...
Cosas así me parecen realmente inteligentes.
Pero hay otras cosas, como la de la boda... Bueno, en primer lugar, ¿por qué demonios tiene que haber una boda en toda película romántica? Lo malo, con todo, no es eso. Lo malo es que se supone que es una película verosímil. Y no me puedo creer a ese novio que deja a la novia plantada y se queda en la habitación de al lado para que venga el cuñado y le convenza de que vuelva al altar. Y llega George Clooney y suelta su discursito con su mejor careto de cincuentón atractivo.
Así que, junto con grandes aciertos, hay cosas tan artificiales, tan forzadas, tan empotradas, que no me parece digna de estar compitiendo por el Oscar. Como Juno. Vale. Simpática. ¿Y qué?
Demasiado descompensada.

21/1/10

Glee

Glee es una reacción visceral contra los musicales de Disney, contra High School Musical y Hannah Montana. Como reacción, los extremos se tocan.
Allí donde Disney es cursi y familiar, Glee es políticamente correcto y progre. Pero ambas son igualmente sentimentales y están fabricadas a base de convencionalismos.
Glee presenta a la negra, a la asiática, el gay, el minusválido, los hispanos... Como si eso fuese muy rompedor y abierto y nos ofreciese un horizonte de ilimitadas perspectivas. Pero después resulta que los protagonistas son el blanquito y la blanquita guaperas de siempre. La primera cosa que no me gusta de Glee es lo mucho que se esfuerza la serie en decirnos que son unos pringados cuando, obviamente, no lo son.
Lo segundo que menos me gusta es lo mucho que insisten en decirnos que la mejor cantante es la blanquita guaperas de siempre, cuando está claro, todos lo vemos, que la auténtica máquina es la chica negra, con un vozarrón impresionante, energía a raudales y como si no le costara.
Las historias de embarazos, paternidades, matrimonios en crisis, mis padres son gays, yo soy judía y por eso me desprecian, yo me hacía la tartamuda, todo eso, es pura bazofia.
Al final lo único interesante, tanto en Glee como en Hannah Montana, son los dos números musicales y sus coreografías.
¡Ah! Y, al final, van y ganan el concurso. ¿Alguien lo dudaba?

19/1/10

La cinta blanca

Haneke va por ahí diciendo que no le gusta la violencia como espectáculo.
Tal vez. Pero sigo flipando con el suicidio de Caché, aquella forma de cortarse el cuello dejando las paredes salpicadas de sangre. En vivo y en directo. O con ese pájaro de La cinta blanca atravesado por unas tijeras de arriba abajo.
Él quiere que le comparen con Dreyer, Bergman, Tarkovski. Yo le veo más con Scorsese (la violencia funda la sociedad) y Tarantino (la violencia como espectáculo). Dreyer, Bergman y Tarkovski se preguntan por el ser humano, hacen interrogantes metafísicos, existenciales. Haneke no busca la verdad: la teme.
Haneke me parece un director muy sugerente. Me encantó la críptica Caché. Y La cinta blanca se le parece mucho. Pero hay un elemento que la destruye por completo: la voz en off. Esa voz que nos va guiando, conduciéndonos, diciéndonos lo que tenemos que pensar. Quiénes son los buenos (el profesor y su novia) y los malos (todos los demás).
La cinta blanca no sólo me ha dejado indiferente sino que me ha parecido bastante flojita.
Lo siento.

18/1/10

Amerrika

Lo que no me gusta de esta película es que, pese a su apariencia realista, pese a su cámara en mano, pese al estilo de esto lo he vivido, pese a que todo parece verdad, en el fondo está tan prefabricado que no me lo puedo creer.
Quiero decir que cada escena tiene la suficiente habilidad para parecer, por un tiempo, auténtica. Luego te das cuenta de que es otro cliché. Mamá y el chaval son palestinos recién llegados a Estados Unidos. Controlan tres idiomas, ella tiene doble licenciatura pero no encuentra trabajo más que en una hamburguesería. Él no se adapta al instituto pero conoce lo que es un porro. Ella conoce a un judío. Él a un chico negro.
Así que estoy en el dilema: alabarla porque te está sirviendo las mismas anecdotillas de siempre sin que te des cuenta o machacarla por eso mismo.
Me lo voy a pensar un poco más.
Estaba, además, Hiam Abbas, en el papel de hermana, y eso siempre está bien.

17/1/10

La decisión de Anne

Debo admitir que, al principio, las trazas de la película me parecían más que interesantes. Una chica lamentándose porque ha sido fecundada in vitro como bebé medicamento para su hermana con leucemia. Se siente una obra de ingeniería, un almacén de repuestos.
Pero luego llega la realidad: Nick Cassavetes. Y a Nick Cassavetes lo que le gusta es llorar y venga a llorar y llorar sin parar.
Durante un tiempo va alternando el debate ético con las lagrimillas. Luego se decanta sin rubor por el llanto. Y mientras la mayoría de la gente se sonaba entusiásticamente los mocos, yo estaba ahí, deseando que volvieran a los temas fuertes: la fecundación in vitro, los bebés medicamento, el ensañamiento terapéutico, la aceptación de la muerte.
En fin. Hay un poco de todo pero la películas es, sin duda, para los que quieren pasar un rato entretenido llorando.
Estaba, además, Joan Cusack, en el papel de juez, y eso siempre está bien.

16/1/10

Sherlock Holmes

Para un aficionado a Sherlock Holmes, era un riesgo de los gordos dejar la adaptación en manos de Guy Ritchie. Sus éxitos van parejos a sus pifias. Y no parecía el material adecuado para él.
Pero el tío sale airoso. Respeta la esencia de Sherlock Holmes, hace variaciones en lo accidental y conserva ese estilo suyo, especialmente las escenas de anticipación y vuelta atrás. Sin abusar de ellas.
Me parece muy bien el modo de contemplar la relación entre Holmes y Watson: una vida en discusión permanente. En cierto modo, más lógico que la frialdad mostrada por Conan Doyle: dos solterones en su piso de soltero donde uno humilla intelectualmente al otro. Ritchie nos ofrece a dos tipos con mucha coña, amigos inseparables, enfrentados permanentemente. Se pegan, se insultan, se ayudan, se ríen de sí mismos.
Y se menciona o aparecen Irene Adler, Mycroft Holmes, Moriarty, Lestrade, hay guiños a El secreto de la pirámide y a cantidad de relatos de Doyle... Ahí detrás alguien ha hecho los deberes.
Eché en falta, como en todas las películas de Sherlock Holmes que se han realizado hasta ahora, la presencia de los irregulares de Baker Street.
Dos horas que se pasan en un suspiro: acción, aventura, misterio y humor. Montaje ágil, diálogos rapidísimos. Me lo pasé muy bien. Aunque conviene no exigir demasiado. Vamos, que no es El caballero oscuro.

13/1/10

"Spider-Man 4" es "Spider-Man 1"

Es verdad que ya se hizo con Batman. Tras la versión de Tim Burton (1989) se hizo, 16 años después, Batman Begins (2oo5).
Los productores de Spider-Man tienen mucha prisa o una idea genial. Cuando ya se esperaba el estreno de Spider-Man 4 con Tobey Maguire y Kirsten Dunst repitiendo en los papeles, han decidido acabar con ello y empezar de nuevo. Spidey volverá a ser un adolescente y a descubrir sus superpoderes.
En los cómics suelen ser habituales estas revisitaciones, los what if, las variaciones sobre un mismo tema. Con otros dibujantes, otros guionistas. El retorno al Año 1. Los que he leído, generalmente me han interesado: cambios estéticos, otras perspectivas.
En el cine no lo veo tan claro. Al menos, no lo veo cuando sólo han transcurrido 8 años desde la primera versión.
Imagino lo que los productores tienen en la cabeza: el efecto contagioso de las series de televisión. Supongo que tienen material para realizar una serie cinematográfica y que las idas y vueltas de Sam Raimi hacían ya imposible. Así que a empezar de cero.
Mi apuesta: o logran algo verdaderamente genial y novedoso o se estrellan con todo el equipo.
Veremos si el Trepamuros tiene tela (de araña) suficiente que cortar.

12/1/10

Obama y "Perdidos"

El discurso sobre el Estado de la Unión tenía lugar siempre el último martes de enero.
A Obama no le venía bien, así que decidió cambiarlo al 2 de febrero.
Pero el 2 de febrero es el comienzo del fin de Lost.
A los losties la idea no les ha gustado nada. Piensan que el Presidente está perdido.
Millones de seguidores inundaron internet protestando. La consigna era que sólo seguirían el discurso del Presidente si desvelaba en su transcurso algún spoiler de la serie.
Obama se lo ha pensado mejor y ha decidido que el discurso no será el 2 de febrero. No sabe cuándo, pero no será el 2 de febrero.
Bien. Me alegra que aún tenga algunas ideas claras, una escala de valores.
Hay qué saber qué es lo importante y qué lo secundario. Quiero decir que ¿a alguien le importa realmente lo que tiene que decir sobre el Estado de la Unión? Seguro que es entretenido y hasta divertido. Pero no más que Perdidos.
Ay, qué tensión.

11/1/10

"Celda 211" y el catering

Dudo mucho que en este blog aparezcan noticiones como el que se comenta ahora de Viggo Mortensen y Ariadna Gil. No tengo contactos en las grandes alturas. No conozco a la señora que limpia la casa de Tom Cruise, ni al abogado de Kristen Stewart, ni al peluquero de Bruce Willis, ni a la dietista de Kathy Bates.
Pero algún conocido sí tengo en estos mundillos cinematográficos y, ahora que está otra vez de actualidad Celda 211, por eso de los Goya, estuve hablando con uno de los actores de reparto.
Me contaba que, los días previos al rodaje, andaban buscando por Zamora inmigrantes para hacer de extras. Para que hiciesen bulto en las grescas carcelarias. Preferiblemente sudamericanos y, después, árabes.
Cuando consiguieron el número de gente deseada, cosa que no fue nada difícil, se fueron al set de rodaje. Daniel Monzón, también en esto del catering, es muy americano: los actores principales comen en un sitio, el resto del personal (los que hacen bulto) en otro.
La cosa es que los inmigrantes se encontraban en una amplia sala esperando el catering. Llegaron las viandas: bocadillos en abundancia. Se lanzaron a por ellos con más ganas que a por el alcaide. La gente los guardaba en las mangas, se rellenaban los jerseys, utilizaban las cazadoras como sacos... Y, claro, llegaron a las manos. A las manos y al relucir de navajas. La cosa logró atajarse antes de que corriera la sangre.
Pero, en fin, la mejor escena carcelaria, la más auténtica, y ninguna cámara rodando. Habrían sido unas tomas de recurso espectaculares. Ni siquiera saldrán en el contenido adicional del DVD. Lástima.

10/1/10

¿Qué fue de los Morgan?

Esta es la película apropiada para ver mientras te echas una siesta.
Estás en duermevela, abres un ojo y ves que Hugh Grant está aprendiendo a disparar un rifle haciéndose daño en el hombro.
Vuelves a dormir.
Despiertas de nuevo. Sarah Jessica Parker está intentando ordeñar una vaca.
Vuelves a dormir.
La parejita se ha reconciliado en un baile country y parece que se acerca el final.
Ni una sorpresa ni un sobresalto ni una originalidad que se salga de los clichés. Impresionante, de verdad, este modo de vender siempre la misma película cambiando sólamente el título.

9/1/10

Un tipo serio

Esta película tiene mucho de woodyalleniano.
No lo digo por la cuestión judía y demás. Es, sobre todo, porque los Coen se creen tan geniales que ya no consideran la necesidad de esmerarse en los guiones. A mí esa sensación me ha dado.
Tienen momentos brillantes y geniales, puro cine. Pero llega un momento en que se dicen: venga, hasta aquí hemos llegado. Y, oye, tal cual está, así lo dejan.
Lo mejor de Un tipo serio son esos dos fragmentos que no tienen nada que ver con la película.
El primero es, no sé, un cortometraje o como quieras llamarlo. Un cuento ruso de judíos (narrado en ruso), con algo de Chéjov, con ambientación en la época zarista, colores sepias, formato casi cuadrangular y, en mi opinión, divertido, inteligente, sutil, muy bien interpretado. ¿Que qué cuenta? Vete tú a saber. Puede que algo del destino o puede que prácticamente cualquier otra cosa.
Luego está el cuento del dentista. Una ruptura de la narración que viene muy bien para quitarse de encima la agobiada vida de Larry Gopnik.
Y, cuando llega el final... Vete tú a saber qué cuentan. Puede que algo del destino o puede que prácticamente cualquier otra cosa.
Me gustan los Coen. Pero últimamente creo que se están pasando de listillos.

8/1/10

Solomon Kane

Supongo que lo más cercano que tienen los puritanos a una mitología es Solomon Kane, un guerrero feroz e implacable de la decimoséptima centuria que lucha contra el mal: magia, brujería, sortilegios de una edad oscura, zombies, demonios gigantes, tipos en plan orco. Con un presupuesto, tirando a reducido para lo que se pretende, intenta alcanzar la épica, el tono de El Señor de los Anillos, de Braveheat. Pobre. Qué lejos se queda. Esos diálogos de apariencia barroca resultan más bien patéticos por mucho que se empleen palabras como Maese. Pero, en fin, la película no me provocó deseos de suicidarme. Me gustaron un par de cosas. Por un lado el personaje en sí. Solomon Kane tiene sus problemas de conciencia porque, aunque lucha contra el mal y la injusticia, sabe que le gusta la violencia más que comer con los dedos. Le encanta cortar cabezas y disfruta cercenando miembros. Luego está lo de la quema de brujas: es la primera peli en que veo que se defiende tal actividad como un beneficio social. Queda aquejada por el efecto Blade Runner y Se7en: toda la película es oscura, lluviosa, nívea, salvo la última escena en que brilla el sol. En este caso su oscuridad no tiene mucho sentido y está sobrevalorada. En cualquier caso, tan beneficioso como la quema de brujas sería que no hubiese segunda parte.

7/1/10

Número 9

Mucho más interesante el título original: 9. Después del comienzo de 2010 intenté acercarme al cine en un par de ocasiones para ver alguno de los estrenos. Las colas, de unos 20 minutos, formadas en orden de batalla para ver Avatar en 3D, me quitaron las ganas. Opté por irme a un cine del extrarradio. He aquí una película de animación que, como en otros muchos casos, no es para niños (demasiado siniestra) ni para adultos (guión muy sencillo). Es un ejercicio de estilo bastante impresionante, con escenas de acción muy imaginativas y con la presencia de unos monstruos mecánicos muy originales. Arrasada la Tierra, muerta la humanidad, sobre la superficie sólo se mueven 9 muñecos de trapo y una máquina decidida a cargárselos. Además de los monstruos mecánicos y las escenas de acción me sorprendieron las secuencias en flash back, blanco y negro, rememorando un pasado nazi. ¿Así de gris empieza 2010?

1/1/10

Record histórico de la taquilla española

Exactamente así es como titula Nielsen EDI la noticia. Sin acento en récord.
675 millones de euros.
Ya estamos en 2010 y quién nos iba a decir que, en estas fechas, aún existiría el cine español. Y no sólo está ahí sino que bate marcas. A pesar de la crisis o, según otros, precisamente gracias a ella.
No voy a debatir sobre Ágora, Celda 211, Planet 51 y las otras películas que han engordado la taquilla española. Revisando lo estrenado me quedo con Infectados (es española porque la dirigen dos españoles aunque la producción sea americana en su totalidad) y con Tres días con la familia.
Nielsen EDI hace una evaluación con tres factores:
-Atractivo comercial de los estrenos de 2009.
-Implantación del 3D en las salas de cine.
-Gran resultado del cine español.
No sé. Quizá evaluaron cuando llevaban un par de botellas de champán encima. Se habrán herniado.