28/4/10

Bola de fuego

Mi comedia favorita es, sin duda, La fiera de mi niña.
No sé qué hacer con Bola de fuego. Es comedia, pero no exactamente. Es, sobre todo romántica, pero con momentos cómicos muy interesantes. Es una versión moderna de Blancanieves y los siete enanitos. Los 7 enanitos son 8 sabios (7 más uno que es a la vez el príncipe) que viven encerrados desde hace nueve años para componer una enciclopedia. Pero cuando llega el momento de escribir sobre el slang necesitan la ayuda de alguien de la calle. Y en sus vidas entra una cabaretera (Barbara Stanwick), una auténtica bola de fuego, que pondrá sus vidas patas arriba. Especialmente la de un confundido Gary Cooper.
La chica, además, es perseguida por la policía para que declare contra un mafioso y por el mafioso para que no hable con la policía. Lo que podría haber sido una screwball comedy en toda regla, igual que La fiera de mi niña, se convierte en la historia de la elección de una mujer: quedarse con el mafiosete rico y aventurero o con el profesor sencillo y tierno.
Yo la recomendaría aunque sólo fuese por ver (y escuchar) el Boogie con cerillas.

27/4/10

Daños y perjuicios. 1ª temporada.

El título inglés, Damages, suena mejor.
Hay un hecho determinante que me inclina a favor de esta serie de abogados: apenas se ve un juzgado. Hay despachos alucinantes, leguleyos y otras zarandajas. Pero los tribunales son cosa de segundos. Fianza, martillazo y a otra cosa. Toda esa devoción hollywoodiense, esa fe en que la justicia se encarna en un tribunal, aquí se desvanece.
Lo segundo más importante es que los malos son muy malos y los buenos también. Y todos con matices, con sus puntos de buenas intenciones, debilidades, maldades, brutalidades y miserias.
Está Glenn Close, claro. Se supone que es la buena pero es tan bruja como la de Blair, tan perra como Lassie y maestra manipuladora de trileros. Sus cartas son personas y maneja muchas más de tres. Vaya bicho. Búscate otro país si te echa la vista encima.
Está Rose Byrne, jovencita ambiciosa que, recién salida de la Facultad, es contratada por un prestigioso despacho y cree que es porque se lo merece. Cuando quiere darse cuenta se ha metido en un marrón de campeonato.
Mucho suspense, asesinatos, chantajes, suicidios, giros casi imposibles y esos flash forward que te mantienen en vilo desde la primera escena. La guapa abogadilla estará en el trullo dentro de seis meses, ensangrentada y vestida con una gabardina. ¿Qué ha pasado?
Y tú:
-¿Te arrepientes de lo que hicimos?

26/4/10

El súper canguro

Ya he confesado en alguna otra ocasión mi debilidad por Jackie Chan. Me gustan todas esas peleas al estilo de Charles Chaplin aprovechando los objetos del escenario: una puerta giratoria, una silla, una camisa... Me gusta que, gran parte de sus películas, no recurran a los efectos especiales, sólo a sus habilidades gimnásticas. Me gusta que no utilice dobles y nos deleite con su asombrosa forma física.
Pero ya tiene 56 años, aunque no lo parezca, y sus acrobacias se ven limitadas. El mejor modo de camuflar este hecho es hacer una peli para los peques de la casa: simple como el mecanismo de un chupete.
La trama es la misma de, pongamos por caso, la muy similar Un canguro superduro, con Vin Diesel haciendo el gamba. Pero Jackie Chan es más ingenioso y, aunque la película sólo sea apta para menores, su presencia tiene más sentido: un tío con cara de pan, aspecto de oficinista simpático y capaz de moverse como una cobra.
Ahí está: el señor Chan y unos críos se ven implicados en una trama de espionaje y salvan el mundo.

25/4/10

Innisfree

Pocas películas/documentales expresan tanta nostalgia como ésta. Morriña tal vez fuese más exacto. O quizá melancolía para los lugareños de Innisfree y evocación para los espectadores.
Esa película pequeña que se titulaba El hombre tranquilo y que John Ford apreciaba de un modo especial acabó por pasar a la historia del cine. De ahí que José Luis Guerín decidiera, casi 40 años después, darse una vuelta por el bar de Pat Cohan y ver qué había sido de sus gentes, de su memoria.
Obviamente, yo no lo habría filmado de esa manera. Supongo que nada de lo que hace Guerín acaba de entrar en mis esquemas. No le he encontrado las vueltas a este hombre. Pese a todo, Innisfree es, con mucha diferencia, creo yo, lo mejor que ha hecho. Aunque, en gran parte, el motivo se debe, como decía, a su fuerza evocadora: John Ford, John Wayne, Maureen O'Hara... Nos ofrece la posibilidad de verles como seres muy humanos. Como ese tipo que sacó a bailar a Maureen O'Hara el último día de rodaje y considera que fue el acontecimiento de su vida o el que prestó el perro para que condujera las ovejas.
Innisfree sirve, entre otras cosas, para confirmar que los irlandeses beben cerveza negra como si fuese agua.

21/4/10

S1m0ne

S1m0ne siempre me pareció una película infravalorada. Hay en ella muchas cosas interesantes, muchas ideas. Reflexiones genéricas acerca de la importancia (o no) de los actores, del director, del star system, de las celebrities... Frases sugerentes como Eres más real que todos los que te veneran o El problema no es que no seas humana, el problema es que yo sí lo soy. Seleccionando minutos aislados se pueden sacar de ella unas cuantas ideas.
Además me encanta la planificación. Hay elegantes planos largos, utilizando elementos horizontales como ejes bien centrados, muy simétricos: las calles del estudio, el embarcadero... O ese otro de la pecera con chuches. O la casa de Catherine Keener. O el hotel. O el plató secreto donde se supone que Al Pacino esconde a Simone.
El defectillo de la peli es la narrativa tan previsible: Al Pacino superado por su criatura, cómo deshacerse de ella, intriga policiaca, final feliz...
Aunque lo que más me gustaría sería ver una película filmada por el supuesto Viktor Taransky o, aún mejor, la película dirigida por Simone: esa mujer vestida de novia, hozando en la pocilga, es tan asquerosa, tan digna de Lars von Trier...

20/4/10

Desde París con amor

A su modo es una película honrada. Da lo que promete: tiros, destrozo de locales, puñetazos... John Travolta parece salido directamente de Asalto al tren Pelham 123 con una rapada al cero. Lo colocan en un aeropuerto francés y empieza a armar jaleo.
El primer tramo de la película es una mera excusa para que Travolta vaya matando chinos y negros en todo un alarde de incorrección política. La trama tiene poco o nada que ver con lo que viene después. Porque después toca dar leña a los musulmanes en otro ejercicio políticamente incorrecto.
Si la primera parte carece completamente de interés, la segunda tiene dos cosas buenas. La primera es el giro de guión que acontece durante la cena. Quizá quien haya visto Venganza puede verlo venir, pero aún así resulta sorprendente. La segunda cosa buena es la persecución en la autopista.
Otro producto de Luc Besson, que produce y/o dirige y/o escribe y/o intepreta películas como churros. Sólo unas pocas (tal vez sólo Leon, el profesional) son buenas.

19/4/10

The thick of it

Armando Iannucci, ese terrorista psicópata que perpetró el atentado de In the loop, tiene una serie titulada The thick of it.
Es una mezcla entre El Ala Oeste de la Casa Blanca y The Office. Pero con toda la mala baba y en plan salvaje. Estamos en el Ministerio de Asuntos Sociales británico, Ianucci introduce allí la cámara y destroza con saña todo lo que se pone a su alcance: ministros, consejeros, funcionarios, periodistas...
Algunos actores son los mismos que los de In the loop, así que ya conoces de lo que es capaz Peter Capaldi. Se sigue llamando Malcolm Tucker y sigue siendo la mano derecha del Primer Ministro: un individuo enloquecido, desequilibrado, violento, obsceno. Alguien que está cómodamente instalado en el 10 de Downing Street y que debería estar en un psiquiatrico.
Los ministerios están repletos de gente ligeramente menos loca que él.
Lo malo de esta serie es que, probablemente, esté muy cerca de la realidad.

18/4/10

Lolita

Mi momento favorito: plano medio de Lolita y, a continuación, un plano medio del monstruo de Frankenstein. La bella y la bestia. Un pestañeo y el cambio se ha producido. Sue Lyon, Boris Karloff.
Peter Sellers es otro tipo difícil de controlar. Stanley Kubrick hizo para él ¿Teléfono Rojo? Volamos hacia Moscú, un artefacto en el que el actor podía dar rienda suelta a todo su histrionismo.
Pero en Lolita su sobreactuación destruye la historia. Es un personaje clave, el motor de los giros dramáticos. Dudo mucho que el guión de Nabokov (quizá me equivoque) plantease de forma tan inverosímil las amenazas de Sellers sobre James Mason. Eso de amenazar con meter cuatro psiquiatras en casa para investigar su vida familiar... La verdad, que surtan efecto esos chantajes tan chapuceros, tan pedestres, tan ingenuos, me expulsaban de la película.
Lolita se ha convertido en el paradigma de la adolescente seductora. Pero, en realidad, la película no cuenta eso. Lolita es una chica absolutamente normal condenada por su belleza. Me parece un buen final para alguien que elude ser admirada sin remedio. Carpintero, sordo, Alaska...

17/4/10

Alicia en el País de las Maravillas

Todo el mundo sabe que Alicia en el País de las Maravillas y Alicia a través del espejo son novelas inadaptables. Sus juegos de palabras, ingenios matemáticos, adivinanzas y absurdos literarios como el galimtazo, no se pueden trasladar a ningún otro medio. Es imposible, así de sencillo. Y punto pelota.
Por suerte, en este planeta, tenemos a un tipo acostumbrado a hacer lo imposible. Se llama Tim Burton y, como sabe a qué se enfrenta, decide no adaptar a Alicia: adopta a Alicia. Cría a la muchacha hasta los 19 años y vuelve a soltarla en el País de las Maravillas. Dos personajes, tras el ojo de una cerradura comentan:
-Es una falsa Alicia.
-Démosle una oportunidad.
Y ahí está la cuestión. Porque Burton no está filmando Alicia en el País de las Maravillas. Burton filma Alicia Manostijeras o Alicia Wood o Alicia y el sombrerero loco en la calle Fleet. Es su estilo, son sus maneras.
Alicia en el País de las Maravillas de Tim Burton es la película más infantil de toda su filmografía. Más que Pesadilla antes de Navidad o La novia cadáver. Una peli para todos los públicos. Como si quisiese recordarse a sí mismo que no debe perder su muchedad.
¿Darle la oportunidad o no dársela? Yo creo que basta dejarse arrastrar por el conejo blanco, borpalina, la deliranza y otros galimatazos. Y bien viaje.
Por cierto: seguro que Anne Hathaway acabó con agujetas después de estar tanto tiempo con los brazos levantados.

14/4/10

Tierra de dragones

Por si no sabes quiénes eran los Inklings te lo cuento. Fueron un grupo de escritores y profesores ingleses, en su mayoría de ideas cristianas, que se reunían en un pub a tomar cerveza para hablar de filosofía y literatura.
Este hecho (pub+cerveza+filosofía) bastaría para demostrar el sentido común que tenían.
Los fundadores y más asiduos asistentes eran : J. R. R. Tolkien, C. S. Lewis y Charles Williams.
Ahora he leído que se va a realizar una película, Tierra de dragones, basada en una novela, con un argumento muy interesante. Tras la muerte de un profesor de Oxford, un discípulo decide investigar qué secreto esconde el atlas Imaginarium Geographica. Junto con dos compañeros de viaje, y perseguidos por unos extraños seres, llegan a los confines del mundo y se convierten en los más grandes cartógrafos del universo fantástico.
Y, curiosamente, esos tres viajeros son J. R. R. Tolkien, C. S. Lewis y Charles Williams.
No tenía ni idea de que existiese esta obra. Como comprenderás, mientras espero a que se estrene la película, me ha faltado tiempo para conseguirme la novela.
Me sigue llamando la atención la cantidad de buenas ideas que yo no he tenido.

11/4/10

Sólo ellos

Joe se queda viudo, con un hijo del primer matrimonio y otro del segundo. Como no hay una mujer en casa deciden vivir como hombres: ropa sucia, comida caducada, lavarse el pelo dos veces al año... El objetivo es lograr el Paraíso de los Cerdos. Y cuando la cosa se desmadra están a punto de conseguirlo.
Todo ese desastre no es más que el reflejo externo del caos emocional que los tres hombres (adulto, adolescente, niño) cargan encima. Hay que tocar fondo para reponerse.
No aporta gran cosa salvo el hecho de ver que Clive Owen, habitual tipo duro en pelis de acción, también es capaz de hacer melodramas. Y lo hace bastante bien. Gracioso el comentario sobre ese mueble que no sólo sirve para guardar los cubiertos sino que, además, los lava.
Había mucha mujer mayor de 50 años en el cine. Se llevaban las manos a la cabeza cotemplando el progresivo desastre en que se convertía el hogar.
Como si no conocieran cómo son los hombres.

10/4/10

El regreso de la bruja malísima

Érase una vez una plebeya encantadora llamada Bibiana Aído que llegó a ser ministra merced a sus propios méritos y extenso curriculum. De pequeña nunca había jugado con muñecas para demostrar que podía ser miembra del club de estibadoras portuarias o técnica en hormigoneras. Así acabó convirtiéndose en una bruja mala, malísima, malota. Tan mala se volvió, la muy bruja, que decidió eliminar los cuentos de hadas de las aulas de los niños.
-¡Fuera princesitas! -balbuceó Bibiana babeando.
O algo parecido.
Porque las princesitas, las hadas, Cenicienta, Blancanieves, Campanilla, y demás caterva, no eran de su agrado. Bibiana, viscosa, con su cartera mágica de ministra, convirtió a Mulan, Bella, Gretel y Tiana, en retrógradas sexistas.
Flipo pegatina.
Ahora entiendo aquello de que la otra bruja mala, malísima, malota, la bruja Sinde, censurara Saw VI. Estaba advirtiendo a Disney de lo que está por venir.
Toy Story 3, Rapunzel y King of the Elves se estrenarán en salas X.
Mentiras y gordas 2 de uso obligatorio en guarderías.
Y comieron perdices.

9/4/10

The prisoner

Los referentes son numerosos: Matrix, El show de Truman, El bosque, Perdidos... No he visto la serie original (de 1967, casi arqueología), así que no sé quién se inspira en quién.
Aunque sólo son 6 capítulos para contarnos la historia de 6 yo quitaría algunos episodios. Hay subtramas que sobran (alguien que quiere huir no se casa o se familiariza con una familia adoptiva) y creo que ganaría en agilidad. Tampoco se puede decir que todo queda bien explicado y atado: los agujeros, los túneles, las personas que nacen en La Aldea (¿qué es eso de nacer de una de las capas del inconsciente?)...
El contenido es interesante. Una especulación, de lo mejor que he visto, acerca de la libertad. Cómo nos aferramos a ella. Cómo privamos de ella a otros.
Lo que más me gusta son ciertos aspectos visuales. Sin esteticismos exagerados tiene escenas muy originales: la novia corriendo entre las rocas, la puerta de cristal en mitad del desierto, el plano cenital de la procesión fúnebre, el pitillo que se fuma Ian McKellen con el tendero, Jim Caviezel corriendo tras su doble (o ante su doble) en el pueblo o en los tramos de escaleras superpuestas...
Y, oye, terrible final.
Son espantosas, las buenas intenciones.

8/4/10

Snake eyes

Impresionante el plano secuencia inicial de 10 minutos aunque tenga alguna trampa. Muy lograda la estampida humana tras el tiroteo en el combate de boxeo. Genial ese montaje de flash back para observar las cosas desde varios puntos de vista.
Brian de Palma demostró, de nuevo, que es el tío de la clase que mejor copia. Pero el cine es algo más que mover bien la cámara. Echar un vistazo al examen del colega que tienes al lado te sirve para aprobar el examen. Pero eso no te hace más sabio ni más inteligente.
Uno de los problemas de Snake eyes es, obviamente, Nicolas Cage. Menudo desfase hiperactivo. Incluso en la escena en que le dan una paliza y le dejan destrozado es histriónico. La forma de moverse, cojeando, trastabillando, vacilando, es imposible creérsela. No puede ser que alguien con tres costillas rotas vaya por ahí, estrellándose alegremente contra las paredes.
Pero el problema grave es ese final. Después de que de Palma se haya esmerado en una planificación perfecta, deja el clímax final en una confusión, haciendo coincidir varios elementos casuales. Imposible aclararse de qué es lo que ha pasado realmente. La poli, la bola, Cage entrando en el refugio de Carla Gugino, Gary Sinise detrás...
¿No podían haberlo arreglado con unos tiros?
Y, bueno, no entiendo el final de los títulos de crédito. Supongo que es una metáfora que tiene que ver con la historieta del faro y los piratas, pero me deja indiferente.

7/4/10

El club de la lucha

Me he sentado frente a la película por dos motivos. El primero es que, hace poco, critiqué las últimas obras de David Fincher ya que, en mi opinión, El club de la lucha fue lo último bueno que hizo. El segundo motivo es que Óscar nunca la había visto y, tras caer en sus redes, me pidió una opinión.
Creo que es una película que plantea temas interesantes. O, por decir mejor, un tema interesante. Es una crítica a la sociedad contemporánea que tiene un fundamento sólido. Una sociedad esquizofrénica, violenta, absurda. Una sociedad que se mueve entre el deseo de la civilización y del retorno a lo primitivo. Una sociedad volcada en lo material consciente de que lo material no tiene ningún sentido.
No me gustan tanto ciertas cosas de su estilo. La primera media hora juguetea mucho con las microcámaras o las grandes maquetas, filtrándose en lugares imposibles, como en La habitación del pánico. Luego se cansa de ello y opta por otro estilo sucio y descarnado. Finalmente, para dar ritmo a la situación final tiene que utilizar un tercer estilo de montaje.
Pese a todo, los papeles de Brad Pitt (sobre todo, una vez más, Brad Pitt), Edward Norton y Helena Bonham Carter son magníficos. Me encanta la pelea de Norton contra sí mismo en el despacho de su jefe.
Bienvenidos a la sociedad que no evoluciona y siempre parte de cero.

4/4/10

Lourdes

El gran elogio que se puede hacer a esta película es que resulta asombrosa.
No es nada de lo que me esperaba.
¿Qué es esto de la enfermedad? ¿Una injusticia? ¿Qué es esto del milagro? ¿Por qué a mí no? ¿Qué es esto de la vida? ¿Así juega Dios?
Creyentes, agnósticos, indiferentes, escépticos, incrédulos. No importa. Todos, todos ellos (todos nosotros) son humanos, muy humanos, demasiado humanos. Celosos, envidiosos, frustrados, amargados, cotillas, traidores, aprovechados, solos, muy solos, terriblemente solos... Todos en busca de la felicidad y, algunos, unos pocos, agradecidos por la gracia.
Lourdes es, por encima de cualquier otra cosa, una galería irresistible de personajes patéticos, entrañables, confundidos. Un espejo que nos devuelve lo que somos.
No he visto nada más de Jessica Hausner. No sé si se han estrenado más cosas en España. Pero voy a buscar ahora mismo otras cosas suyas. ¡Qué forma tan alucinante de retratar el alma humana sin apenas usar palabras!
Tiene sus fallos, algunos zoom de principiante, algún defecto. Pero no importa en absoluto.
Impactante, sorprendente, devastador, sugerente, ese plano final.
Me encanta.
Felicitá.

2/4/10

Born of Hope

Álvaro me pasó The Hunt for Gollum y Esther me remitió Born of Hope, otra muestra de cine inspirado, vagamente, en textos de Tolkien.
Born of Hope, desde un punto de vista técnico, es superior en calidad y en medios. También en duración. Algo más de una hora. Y, precisamente por eso, se le debería exigir más.
La historieta de amor complicado es un poco tópica, el recurso de las peleas a cámara lenta es demasiado frecuente, los elfos necesitan que les den ánimos para disparar... Pero, sobre todo, había algo en The Hunt for Gollum que no tiene Born of Hope: se aventuraban a correr riesgos.
Born of Hope tiene un troll bastante conseguido pero no se atreven a mostrarnos Rivendel. Eso quiere decir que tienen medios pero no imaginación. Justo al revés que The Hunt for Gollum.
En cualquier caso creo que merece la pena. Es asombroso lo mucho que han trabajado en construir una aldea, maquillaje, vestuario...
Una vez más me admira lo que la gente consigue cuando se apasiona por algo.

1/4/10

Furia de titanes

La filosofía de la película es sencilla: cuanto más grande, mejor. Escorpiones como vagones de tren, un kraken como una ciudad... No hay más.
Furia de titanes es un peplum aventurero como aquellos que se hacían en los años 60 tipo Jasón y los Argonautas. En realidad es un remake al que le han añadido muchos efectos especiales.
Las peleas ni siquiera están rodadas con nitidez y, en realidad, no se puede decir que sea espectacular. No hay imaginación ahí detrás. El Olimpo es ridículo, la ciudad de Argos no impresiona, los escenarios naturales no sorprenden.
Furia de titanes es como Percy Jackson y el ladrón del rayo. Incluso el argumento es muy similar. Pero lo que se puede admitir en una película para adolescentes, no se puede tolerar en una para supuestos adultos. Incongruencias de bulto y un final de esos que justifican demandar a los guionistas por insultar al espectador.
El único matiz interesante, los hombres en rebelión contra los dioses, se soluciona con un giro radical en el que papá Zeus y Perseo hijo se hacen amiguetes echando la culpa de todo a Hades.
Otra patada en los dientes a la mitología clásica.