16/1/10

Sherlock Holmes

Para un aficionado a Sherlock Holmes, era un riesgo de los gordos dejar la adaptación en manos de Guy Ritchie. Sus éxitos van parejos a sus pifias. Y no parecía el material adecuado para él.
Pero el tío sale airoso. Respeta la esencia de Sherlock Holmes, hace variaciones en lo accidental y conserva ese estilo suyo, especialmente las escenas de anticipación y vuelta atrás. Sin abusar de ellas.
Me parece muy bien el modo de contemplar la relación entre Holmes y Watson: una vida en discusión permanente. En cierto modo, más lógico que la frialdad mostrada por Conan Doyle: dos solterones en su piso de soltero donde uno humilla intelectualmente al otro. Ritchie nos ofrece a dos tipos con mucha coña, amigos inseparables, enfrentados permanentemente. Se pegan, se insultan, se ayudan, se ríen de sí mismos.
Y se menciona o aparecen Irene Adler, Mycroft Holmes, Moriarty, Lestrade, hay guiños a El secreto de la pirámide y a cantidad de relatos de Doyle... Ahí detrás alguien ha hecho los deberes.
Eché en falta, como en todas las películas de Sherlock Holmes que se han realizado hasta ahora, la presencia de los irregulares de Baker Street.
Dos horas que se pasan en un suspiro: acción, aventura, misterio y humor. Montaje ágil, diálogos rapidísimos. Me lo pasé muy bien. Aunque conviene no exigir demasiado. Vamos, que no es El caballero oscuro.

7 comentarios:

muma dijo...

Pensaba que era por ser chica, pero resulta que es generalizada la percepción de que cuando aparece Watson, Sherlock se vuelve invisible en pantalla.
Estaba yo dándole vueltas a esto, porque realmente me gustan los dos actores, y creo que ambos lo hacen muy bien. Pero es un hecho que Jude Law es demasiado atractivo para el pobre Robert Downey Jr., y me pregunto si no se habrán confundido en el reparto.
Por lo demás, me pareció muy divertida, y me entretuvo mucho la ambientación, en especial el puente de Londres en construcción. Pero en cualquier caso, es verdad, no es "El caballero oscuro".

Anónimo dijo...

PElliculón si señor. Un saludo desde el mayor

Individuo Kane dijo...

Muma: un tema complicado el de Law/Downey. Es verdad que ahí ocurre algo. Creo acertado que Downey sea Holmes: tiene unos matices irónicos que son los adecuados. Y que Law sea Holmes: más mundano, más hombre de la calle.
Pero hay algo: parece que cuando Holmes está en presencia de Watson se siente como un poco intimidado, como acobardado. Al mismo tiempo que le provoca es como si estuviese aturdido porque Watson se va a casar y él se va a quedar sólo. En ese sentido Watson parece mucho más seguro de sí mismo.
No creo que todo esto haya sido intencionado, pero es verdad que llama la atención, sea por el motivo que sea.

Anónimo/Xavi: me alegra que te gustara y que, aunque sea pocas veces, coincidamos en algo. Aunque soy de los que piensan que cuantas más opiniones distintas, mejor.

e dijo...

A mí me ha parecido muy entretenida la parte inicial por una mezcla de debilidad por el humor inglés y que venía de ver Celda 211. Luego la sucesión de truquitos y mamporros y gutritchiadas me cansó durante un buen rato.
Robert D Jr me parece más carismático que Jude Law (cada vez se parece más a Hugh Jackman, y eso es muy bueno) y la peli no me ha conseguido aclarar muy bien para que necesitaba Sherlock a Watson, pero di por hecho que sería a modo de otra manía.

Individuo Kane dijo...

Yo creo que Holmes necesita a Watson, tanto en los libros como en la película, por un motivo muy sencillo: es un vanidoso sin límites y precisa que alguien escriba las novelas con sus casos. Watson es el cronista, el tipo que hace famoso a Holmes. Y de eso Holmes no puede prescindir.

Xavi dijo...

Si has leído los libros, la verdad te deja un poco descolocado. En el fondo es una película de aventuras, divertida y entretenida. Watson reparte estopa por doquier y eso es digno de ver, cuando en los libros es práctuicamente una marioneta en manos de Holmes. La verdad me sorprendió mucho la película.

Individuo Kane dijo...

Sí descoloca. Para mí de un modo positivo.
Los fans acérrimos quieren todo al pie de la letra. A mí me gusta que haya respetado lo importante e innove en lo demás.
De todos modos, ese Watson paradillo de la novela no acababa de cuadrar con un médico militar que se ha estado batiendo el cobre en Crimea.