30/6/09

Un tal Francis Ford

El apellido está a la espera de que alguien lo reclame.
-En esta familia sólo hay sitio para un genio.
Lo dice en Tetro el paterfamilias. El padre. El padrino.
Francis Ford ha muerto. Viva Coppola. Esperemos que no se Sofia.
La peli es mala. Bastante. Tiene una maravillosa fotografía en blanco y negro y unas secuencias en color (los montajes teatrales) que demuestran a alguien con ideas geniales detrás. Como los chispazos de lucidez de un enfermo de alzheimer. Pero sólo eso.
Supongo que lo de situar la acción en Argentina se debe a que es el único lugar del mundo en que todavía hay gente que cree a pies juntillas en Freud. Y como el eje de la película es la idea de matar al padre, así consigue ser menos descabellada. Porque no es que bordee el esperpento como algún crítico ha dicho. Es que a veces cae en el gigantesco ridículo de su operística egolatría.
Pobre Carmen Maura, pobre Leticia Brédice, pobre Vincent Gallo. ¿Qué le han hecho a Francis Ford para que él se vengue dirigiéndoles de esta manera?
Y eso de comparar a Maribel Verdú con Ava Gardner... ¿O es que simplemente quería demostrar que es muy cinéfilo?

27/6/09

Transformers 2

¡Cof... cof...!
Sabía a lo que iba así que me senté en las últimas filas. Pero, oye, ni así: acabé con escombros hasta en el polo.
A la peli se le puede criticar que siendo una peli de acción resulte extremadamente aburrida, que tenga muchísimos fallos de raccord, que los errores de montaje te descoloquen, que no exista guión, que mezcle Matrix, Gremlins y Terminator sin ningún sentido... En fin, se puede criticar que sea mala.
Pero Michael Bay es un salvador de la Humanidad.
En una época de crisis como la que atravesamos, esto era justo lo que necesitábamos: una devastación en toda regla.
De entrada, los servicios de limpieza del mundo entero tendrán que contratar a muchísima más gente y doblarles el sueldo. Los barrenderos serán una profesión muy prestigiosa. Además, constructores, inmobiliarias y estudios de arquitectos se están frotando las manos porque hay que empezar prácticamente de cero. Lo único que lamentan es que la destrucción no se extendiera un poco más, pero supongo que Transformers 3 acabará de arreglarlo. Por otra parte, Bay ha descubierto un tejido que rechaza la suciedad. Los pantalones blancos de Megan Fox soportan lo que les echen. Sólo al final, cuando ya todo ha pasado, están algo manchados.
¡Ah! Lo mejor es ese robot que nos confirma lo que todos sabíamos de la prota:
-Está buena pero no es muy lista.

25/6/09

Alice Burton

Tim Burton nunca ha tenido reparos para reunir un cásting de friquis.
Obviamente, si uno se lanza a dirigir Alicia en el País de las Maravillas, se la juega. Ahí no hay red, ni cables de seguridad, ni seguros a todo riesgo. Tratar de adaptar algo tan inadaptable es lanzarse al vacío, a ciegas, confiando en que abajo haya una piscina llena, un caldero con agua, un trapo húmedo cuando menos.
La prota es una tal Mia Wasikowska. Al lado están algunos habituales de Burton como su amigo Johnny Depp, su señora Helena Bonham Carter o Alan Rickman. Hay que sumar otros friquis de auténtico lujazo como Christopher Lee, Crispin Glover o Frances de la Tour. Y, además, añadir a gente que parecía normal hasta el día de hoy pero que, por el mero hecho de prestarse a intervenir en esta película, hay que mirarles con otros ojos: Anne Hathaway, Michael Sheen, Stephen Fry, Timothy Spall...
Reparto friqui y fotos, al menos las primeras que se han publicado, bastante friquis.
Creo que se ha pasado en barroquismo. Pero veremos qué hace Tim Burton con todas esas cosas en movimiento.

24/6/09

Megan Fox

Está claro que la belleza es un arma poderosa. Que a muchos les ciega. Que muchos la utilizan en su beneficio.
No suelo centrarme en las personas para hablar de cine. Me interesan las películas en sí o los personajes. El star system me parece bastante irracional. Pero lo de esta chica, Megan Fox, me parece abochornante.
Será muy bella pero cada vez que abre la boca sólo demuestra estupidez.
-Sería genial que se legalizara la marihuna.
-El trabajo de intérprete se parece a la prostitución.
-Me gustaría tener un romance con Angelina Jolie.
-Scarlett Johansson es tonta.
-Robert Pattinson es un inmaduro.
-No se puede hablar de nada con Zac Efron.
Ahí está: haciendo amigos.
Y todo esto lo dice una tipa que tiene en su currículum vital e intelectual 3 películas de cine: secundaria muy secundaria en Quiero ser superfamosa, Transformers y Transformers 2. En mi opinión a eso ni siquiera se le puede llamar actuar pero tampoco es mi intención debatirlo.
Lo que me preocupa es que todo esto suena a simple promoción de la película. La mejor publicidad. Pon curvas, ojos azules y que abra la bocaza.
Bueno. Aún es joven. La vida le enseñará lecciones.
Simplemente espero que no tarde en recibirlas.
(Y no he hecho ningún chiste fácil con el apellido).

23/6/09

Cher ami

Cher ami es una película sobre palomas mensajeras durante la I Guerra Mundial, pero en realidad es el último canguro para mantener a los peques pegados a una pantalla. El argumento es un sucedáneo de Valiant que, para empezar, no fue ninguna maravilla.
Mezclar animación tradicional y animación digital es aún más arriesgado que usar sólo animación digital sin tener medios adecuados. La cosa funciona unas veces sí y otras no.
Para que te hagas una idea es algo así como poner al burro de Sancho Panza de la serie animada Don Quijote de la Mancha sobre un fondo de cielos nubosos difuminados con alta tecnología digital. Los personajes podrían estar sacados de Blancanieves o Bambi y pegados sobre Ratatouille o Wall·e. Corta y pega, como un estudiante sacando material de wikipedia para un trabajo rapiditio.
Pues a pesar de todo, como el tráiler era tan malo, tan pésimo, la peli hasta me gustó un poquito. Pese a la habitual arritmia de la animación española me parecieron muy logrados el comienzo y el final.

22/6/09

El cine como sorpresa

Para mí, el cine es sorpresa. No creo en el cine intelectual sesudo, ni en la serie B reciclada, ni en la comedia romántica plagiada, ni en las explosiones siempre rojas y amarillas. Creo en todo ello si me sorprende.
Los hermanos Lumière no tenían muchas luces comerciales. Pero de algún modo, intuitivamente, supieron lo que tenían entre manos.
Su invento servía, sobre todo, para sorprender. Los espectadores de los primeros años se sorprendían al ver a la gente saliendo de una fábrica, con ese tren se les echaba encima o con un pistolero disparando en dirección al público.
El cine sorprendió con espectáculos como el de Lo que el viento se llevó, con las comedias de los años 40 o los cambios de los 70.
Con la intelectualización del cine y su consideración de arte llegaron los dramas sesudos, el testimonio existencial. Se acabaron las sorpresas. Y como con cuatro duros todo el mundo puede contar su bio-historieta hay cada vez más cine turco, iraní, rumano... Y, en fin, rara vez me interesan sus historias humanas porque, aunque intenten conmoverme, no me sorprenden.
Hay un grupo que intenta sorprender a la vieja usanza. Están Michael Bay con sus Transformers y Roland Emmerich con sus sucesivos apocalipsis mundiales. Como ahora cualquiera hace efectos especiales intentan impactar pero no sorprenden. Les falta imaginación.
Estoy un poquito harto. En los últimos meses, sólo me han sorprendido Ponyo en el acantilado y Los mundos de Coraline. Dos pelis de dibujos animados. Y supongo que la siguiente que me sorprenderá será otra de dibujos animados: Up! en agosto.
No sé si se está perdiendo la imaginación por parte de los creadores o si es que ya no hay nada que nos sorprenda a los espectadores.
Hay una imagen típica de Hollywood que lo expresa bien. El tipo que llega a casa el día de su cumpleaños, abre la puerta, y todo conocido que ha tenido en su vida está allí dentro. A coro, exclaman:
-¡Sorpresa!
Pero como uno ya se lo espera, no hay sorpresa que valga. ¿Por qué van a sorprender los globitos y los papeles de regalo de colores? Ya los hemos visto cien veces.
En fin, que me gusta que una boda acabe en una carnicería, que una niña gorda quiera participar en un concurso de misses, que los hombres se conviertan en virus a través de una red neural o que un psicólogo, intentando curar a un niño, descubra que está muerto. Entonces, sí:
-¡Sorpresa!

21/6/09

Corazón de tinta

Se han esmerado con el diseño de producción. No era fácil situar la acción en la actualidad (con carreteras, coches, teléfonos) y, al mismo tiempo, conseguir esa aire atemporal, medieval, mágico. El reparto invita. Brendan Fraser, Sienna Gillory, Paul Bettany, Helen Mirren, Andy Serkis (con su mejor cara de Gollum) y hasta Jennifer Connelly en un par de planos por ahí. Para ser una peli dirigida claramente a público infantil no está nada mal. Un adulto puede verla y hasta disfrutarla a ratos.
La verdad es que el planteamiento es mucho mejor que la resolución. Empieza muy mágica, muy bonita. Acaba con demasiado jaleo y una solución un poco para salir del paso. Pero eso es lo que ya le pasaba al libro y lo que le pasa casi siempre a Cornelia Funke. Pero se ve que tiene admiradores, la señora. Veintitantas personas en la sala: una niña, un par de adolescentes, los demás adultos. Curioso.
Quizá todavía podamos salvarnos.

20/6/09

Ejecutiva en apuros

La historia es la de qué bello es vivir en el pueblo.
Gente sencilla, gente buena, gente de la de toda la vida, gente un poquito rara, gente abierta pese a las primeras apariencias.
Esta vez la buena gente son los paletos de Minnesota.
Minnesota en invierno, con un frío de bigotes. Zellweger va para allá a ver si remodela la fábrica o la cierra, si despide a la gente (la buena gente) o se le ocurre algo.
Por supuesto, anda por ahí un joven viudo, muy bien dispuesto. También él es buena gente.
Me encuentro en la película con mi amiga Siobhan Fallon y ya la acepto mejor.
Película para ver mientras uno duerme la siesta. Con un ojo abierto basta para seguirla.

19/6/09

Fiesta del cine

La iniciativa me parece buena. Una entrada a su precio habitual y luego 2 euros por las siguientes películas.
Supongo que el lunes y el martes irá al cine más gente y los exhibidores recaudarán algo más que en otras ocasiones.
Lo que no me acaba de gustar es la filosofía de fondo: no se dan cuenta de que el precio de las entradas es excesivo y no están dispuestos a cambiarlo.
Por ejemplo: podían haber hecho la misma oferta pero durante el fin de semana. Eso sí habría sido una demostración de que alguien es consciente del precio abusivo de las entradas. Porque es evidente que, en la mayoría de los casos, el producto no vale lo que se paga por él.
Sería positivo si las entradas bajaran el precio más de 2 euros (se puede, la gente acudiría a ver cosas más variadas, los beneficios serían similares), si determinadas salas se remodelaran para ser más confortables, si la atención al cliente fuera más amable, si aceleraran un poco la transformación en salas 3D...
El precio es un problema, pero hay unos cuantos más.
En definitiva: la idea no es mala pero lo de Fiesta del cine es un título bastante pomposo y exagerado (como si no fueran a ganar dinero, después de todo).

17/6/09

Sabrina

Se presentó una buena ocasión esta semana para ver Sabrina en su doble versión, la original de Billy Wilder (1954) y la moderna de Sydney Pollack (1995). La moderna la echaron por la tele, la antigua la alquilé yo.
No es necesario entrar a valorarlas ni a compararlas.
Eso espero.
(Si alguien se muestra favorable a la película de 1995 le aguardo a las 11 de la noche, detrás del cementerio con los padrinos. Le dejo escoger arma).
Basta con ver nombres: Humphrey Bogart, Audrey Hepburn, William Holden; Harrison Ford, Julia Ormond, Greg Kinnear.
Pero hay algo que marca nítidamente la diferencia: Audrey Hepburn.
Su presencia es magnética, continuamente mimada por la cámara. Si Audrey está en el plano, entonces el resto del mundo no tiene nada que hacer. Podrían estar actuando, metiéndose el dedo en la nariz o jugando a los tazos. No nos daríamos cuenta porque Audrey capta la atención.
No es cuestión de belleza. Es una cualidad que pocas actrices/actores tienen. Y hasta cierto punto, supongo que no es necesario interpretar bien.
Audrey Hepburn sólo hay una.

14/6/09

Cleaner

La última película de Renny Harlin que me gustó fue La isla de las cabezas cortadas y, para eso, hay que remontarse al año 1995.
El común de los mortales también desprecia a La isla de las cabezas cortadas por lo que retroceden aún más, hasta el año 1990, para encontrarse con La jungla de cristal 2. Y, aún así, muchos la consideran la peor de la saga. En esto ya no puedo estar de acuerdo y me parece injusto. La jungla de cristal 2 no tiene la virtud de la sorpresa pero es muy divertida. La tercera entrega sí que era un desquiciamiento.
Total, que Cleaner, sin poder considerarse un avance en la evolución de Harlin, tiene notables virtudes. Harlin se olvida de persecuciones, velocidad y aluviones de efectos especiales para centrarse en una esmerada planificación. Si se puede criticar a la película por algo es por su guión, convencional y elemental. Corrupción policial, trampa al no corrupto, bla, bla, bla... Se ve venir de lejos. Lo que hay de bueno en ella se debe a esa dirección de Harlin que saca cosas interesantes de donde no las había.
También en la dirección de actores. La chavalita, Keke Palmer, tiene futuro.

13/6/09

Kika superbruja y el libro de hechizos

Una vez más, en las películas infantiles, el problema del malo no es que sea malo: es que es tonto.
Imagino que se trata de no asustar a los niños, pero sería conveniente encontrar un equilibrio aceptable para no llegar al ridículo.
Aunque la película sea sólo para peques (abstenerse adultos) hubo algunos detallitos que me gustaron. Los adultos hipnotizados tenían bastante de zombis, una adaptación del terror adulto al infantil que aquí sí tiene su eficacia.
La bruja Elviruja es Pilar Bardem. Difícil entender qué hace esta señora en este tipo de historia. Pero quizá se lo pasó bien. Yo no conseguí adaptarme a ella de puro inverosímil.

11/6/09

Realidad y ficción

Ya sé que somos mucha gente en el planeta Tierra y que, por tanto, tiene que haber de todo. Como aficionado al cine puedo entender fácilmente que se admire una película o, incluso, la labor de un actor. Pero que alguien no logre separar la imagen de la pantalla y la vida real, siempre me asombra. Supongo que el culto a la fama, los paparazzi y el querer saber sobre la vida privada de esas personas son la línea suave, y hasta cierto punto lícita, de un cierto interés.
La obsesión es algo que se me escapa.
No dejan de llamarme la atención sucesos como el de Sara Casasnovas. No sé. ¿Hay quien cree que las películas son verdad, que los interpretes no interpretan? ¿Creen que al abandonar el escenario o el plató no recobran su verdadera personalidad? ¿Qué diantres le mueve a un tipo a dar el salto que rompe las fronteras entre realidad y ficción?
Y, sobre todo, ¿qué esperan encontrar?
La pobre Sara Casasnovas me ha hecho recordar el atentado a Ronald Reagan para llamar la atención de Jodie Foster y a aquel otro pirado que apuñaló a Monica Seles (en directo) para que Steffi Graff volviese a ser la número uno.
En fin. La cárcel nunca es virtual.
Bienvenido al mundo real.

8/6/09

Los mundos de Coraline

He aquí otra película de animación que cuenta más cosas que la mayoría de películas en imagen real y que, visualmente, resulta impactante.
Lo de coser botones a los ojos para robar el alma es una buena idea, pero la película no se agota ahí. Hay imágenes potentes y un compendio de los temas clásicos de las películas de terror: la puerta que lleva a otro mundo (y que también tiene algo de madriguera de Alicia en el País de las Maravillas), espejos tras los que se encierra a gente, fantasmas... Ese universo perfecto en el que todo es mejor: la Otra Mamá, el Otro Papá, la comida, los vecinos... Y, como todo universo perfecto, acaba por resultar terrorífico. Puedes ser feliz. Sólo tienes que entregar el alma.
También es llamativo el interés de Henry Selick por el mundo del espectáculo: el circo y el teatro, lugares donde acontece la magia.
Más cosas: vuelves al lugar del que huyes siempre que te encuentras en un mundo pequeño. Interesante. Hay que ampliar horizontes. Sobre todo cuando ese horizonte se vuelve en blanco y negro y, finalmente, en una nada blanca. Todas esas combinaciones de color, grises y blancos, de fluidez y líneas pixeladas logran lo que el director pretende: sumergirnos desde el primer momento en una atmósfera onírica e hipnotizante, un sueño inquietante del que no es fácil salir.
Fascinante.

7/6/09

Los pájaros

Como muy bien me señalaba e el otro día, la música en las pelis de terror es decisiva. Ese chirrido que suena mientras brilla el puñal, un golpetazo grave cuando la mano se cierra alrededor de la pierna, ese deslizamiento lento mientras el personaje avanza por el pasillo a oscuras (¿por qué no encienden la luz?)...
Esto es así, hasta que alguien brillante coge el género de terror y decide lo contrario: no usar banda sonora. Música cero. Creo que Hitchcock se la jugó mucho al tomar esta decisión para Los pájaros. Piidos, graznidos y batir de alas sustituyen a la música en los momentos en que atacan los pájaros. Y el resto del tiempo, nada. Eso crea una atmósfera tan extraña que acaba por incomodar.
Sólo hay un momento en que se oye cantar a los niños de la escuela, mientras Tippi Hedren se fuma un pitillo y los cuervos se aglomeran a sus espaldas. Pero es música interna. Hasta los títulos de crédito son una jerigonza de batir de alas y graznidos.
Cuando algunos dicen que Hitchcock se adelantó a su tiempo, yo pienso que, en algunas cosas, todavía no le hemos alcanzado.

6/6/09

Terminator salvation

No es la obra maestra que fue Terminator 2 (no lo esperaba) pero tampoco se limita a ser una acumulación de peleas como en Terminator 3. Quiero decir que, estando McG en la dirección, el resultado pudo ser nefasto. Lo que hizo con las dos películas de Los Ángeles de Charlie, por ejemplo.
Terminator Salvation consigue ser Terminator gracias, sobre todo, a esos decorados. Te los crees de inmediato, te meten en el futuro postapocalíptico y sientes curiosidad por una vida en un lugar así. El problema de Terminator Salvation es que no sólo es Terminator. Es, también, Mad Max (esa persecución de motos terminator al camión, los acontecimientos en el desierto) y es Transformers (el gigantón hace el mismo ruido y todo). Y eso me expulsa un poco de la película. Creo que el universo Terminator es lo bastante rico si se tiene imaginación. No debería acudir a préstamos de otras sagas.
Hay muchos guiños a las pelis anteriores y hasta un homenaje especial al T-800. Pero por lo que parece, la serie de Las crónicas de Sarah Connor podría ser prescindible.
Muy entretenida en la mayor parte del tiempo, predecible al final.

4/6/09

Perdición

El otro día hablé de Lisbeth Salander en Millenium 1. Una mujer peligrosa. Para cambiarse de acera en cuanto le echas un ojo.
Pero para señoras peligrosas, mujeres fatales, malas malísimas, femmes fatales que en francés queda muy bien, pocas como Phyllis Dietrichson, capaz de camuflarse en la alta sociedad, en una familia. Walter Neff, ducho agente de seguros, sabe la que se le viene encima y ni así logra escapar de la seducción de esa boa constrictor.
Una de las muchas razones por las que Perdición es una obra maestra del suspense, reside en esa interpretación de Barbara Stanwyck, tan inocente ella, tan aburridita, tan maltratada... Tan perversa, tan retorcida, tan asesina.
Pero, además, Perdición es algo así como un manual para hacer películas de suspense. Salvo que seas un genio a la hora de dirigir, sigues sus esquemas. Billy Wilder pasó a otros géneros como diciendo: éste ya casi lo he agotado, que sigan otros.
Hay también algunos diálogos ante los que tienes que quitarte la boina, sobre todo en los dos primeros encuentros en Fred McMurray y Barbara Stanwyck.
Y está Edward G. Robinson, en tantas películas secundario. Pero, sin él, el cine negro no sería el mismo.

3/6/09

Presencias extrañas

Se ha estandarizado bastante eso de los 90 o 100 minutos para una película.
Los guiones, por alguna razón, se construyen para contar una historia en ese tiempo.
Casi siempre encuentro el mismo problema con las películas de terror. ¿Por qué los espíritus, tan listos ellos, no consiguen transmitir su mensaje hasta que llega la hora y media? ¿Por qué el amnésico sólo recuerda lo que debe recordar cuando ha llegado ese lapso de tiempo? ¿Por qué los psicópatas no huyen cuando se acerca el minuto 90 si saben que es el momento de que las víctimas empiecen a ganar?
Una cosa es que me cuenten una historia coherente. Pero muchas películas de terror podrían acabar en el minuto 10 o en el 418.
Dos hermanas me pareció una película plenamente oriental: poética e incomprensible. Este remake americano no es poético pero sí comprensible. Y muy, muy, muy tramposo. Al final, llegan los flash back habituales para explicarnos lo que era bastante obvio pero de un modo extraordinariamente retorcido.
El reparto parecía muy consciente de que estaban haciendo algo trivial.

2/6/09

Millenium 1: Los hombres que no amaban a las mujeres

Si eres espectador/lector descubres que Lisbeth Salander es lo mejor de la película/libro.
El director/escritor no se han enterado.
Todo el mundo se ha percatado de qué es lo importante excepto los responsables. Los cartelistas han hecho bien destacando en el póster el principal atractivo de la película. He echado un vistazo a otras carátulas internacionales y en casi todas han decidido destacar a Lisbeth Salander. Me parece lógico.
El protagonista es un tal Mikael. Le pasan cosas, algunas bastante espantosas. Pero da igual. Si no está Salander nos importa un pimiento. La secuencia de la tortura en el sótano, por ejemplo. Todo lo morbosa que uno quiera. Pero, ¿acaso no habría sido más interesante ofrecernos el modo en que Salander planifica y ejecuta el robo de dinero a la multinacional?
De todos modos, la consistencia de la trama entera se asienta sobre esa secuencia fotográfica casual que es corroborada a su vez por otra fotografía casual. Si se acepta en las reglas de la ficcción, la película puede tener su interés. Si no se acepta, el derrumbe queda asegurado.
Una más de suspense.
Lisbeth Salander. Menudo bicho.