30/3/08

Opérate, le decían

Hablábamos hace poco de Jessica Alba y hoy compartía cartel con Hayden Christensen, otro de los grandes guapitos de Hollywood. Confirmo lo que dije y lo hago extensible al varón. Tienen menos matices que los teleñecos.
Pese a ellos, la película funciona bastante bien porque te mantiene en un estado continuo de total angustia. La primera media hora te plantea el drama y luego te mete en ese quirófano en el que te gustaría subirte por las paredes. Justamente lo que no puedes hacer.
Christensen pasa por una percepción intraoperativa que derivará a una percepción extracorpórea y, para colmo, descubre que está en esa mesa de operaciones para que le maten. Lo mejor de todo es que el director utiliza la percepción extracorpórea como un recurso narrativo para elaborar los flashback. No hay fantasmas que aprenden el sentido del tacto, ni mensajitos en papeles.
No es grande, no es memorable. Pero es un guión original a medio camino entre el drama, el suspense, el thriller, lo fantástico... En medio de la lánguida sequedad de este triste desierto cinematográfico que surcamos, esperanzados y sedientos, Despierto es más que un vaso de agua. Aquarius, por lo menos.

29/3/08

Asesinos

Esta película del año 1995 resulta interesante para comprobar cómo un director mediocre puede destruir con total impunidad un guión excelente.
Sylvester Stallone es el mejor asesino a sueldo y está pensando en retirarse. No es el Stallone de siempre. Es sobrio, templado, frío, no luce bíceps en cada plano y en vez de estar agitándose de continuo entre campos de minas, sabe permanecer sentado durante horas en un banco como si le hubiesen administrado valium. Es, ante todo, un estratega de la caza.
Antonio Banderas es el asesino que quiere ocupar el puesto de Stallone. Para ello, lo mejor es eliminar al competidor. Es hiperactivo, con un punto de locura frenética, astuto. Tiene tics marcados que caracterizan a uno de los mejores asesinos que recuerdo haber visto en una pantalla de cine.
Entre medias está Julianne Moore, hacker informática y objetivo inicial de ambos asesinos por haber metido su naricilla pecosa en donde no debía.
Tienes a estos tres actores. Stallone y Banderas en una de sus mejores interpretaciones. Julianne Moore en un papel poco frecuente en ella. Tienes una trama con giros, trampas e ingeniosas resoluciones sucediéndose a velocidad de vértigo. Además hay ambientes originales como ese cementerio el día de todos los Santos en México.
El caso es que estás viendo la película, sabes que estás viendo algo muy bueno y que, al mismo tiempo no te acaba de convencer. ¿Qué falla? Pues que el director tiene todos los ingredientes para cocinar algo memorable y lo dilapida con rutinaria indiferencia.
Asesinos está perpetrada por Richard Donner, destruyendo un magnífico guión de los hermanos Wachowski (Matrix, V de Vendetta) y Brian Helgeland (L. A. Confidential, Mystic River). Tanto que se habla de una ley del cine, ¿no se podría castigar con la cárcel cosas como así?

28/3/08

Collateral

Tras una Semana Santa raquítica en lo que se refiere a estrenos cinematográficos, regresa la normalidad sin que eso signifique que el panorama en la cartelera sea más interesante. Pensaba ir a ver Love & Honor, la peli de Yôji Yamada no porque me guste especialmente (francamente: me parece pesadito) si no porque he visto las dos anteriores de la trilogía y me sabía mal no poner el punto final. En esta ciudad han decidido no estrenarla así que eso me ahorran.
Llevaba un tiempo dándole vueltas a qué otra película me recordaba No es país para viejos. Y por fin he caído en la cuenta de que por ahí me rondaba Collateral. Y Collateral me parece mejor película que No es país para viejos. Y hasta creo que Tom Cruise borda el mejor papel de su vida y es un asesino más interesante incluso que Bardem (que también trabajaba en Collateral, por cierto, aunque en un papel más secundario).
¿Herejía? No te creas, no es para tanto. Hoy, un mes después de los Oscar, los periódicos vuelven a publicitarla para ver si consiguen llegar a la recaudación de 7 millones de euros.
Collateral, además de con un asesino estupendo, contaba con Jamie Foxx y con Jada Pinkett Smith, señora de Will Smith y que, en mi opinión, debería prodigarse más. La larga conversación inicial en el taxi es algo así como la secuencia de Josh Brolin acercándose a la camioneta en el desierto: planteamiento del ambiente, de los escenarios, del clima en que nos vamos a mover. Hay más paralelismos en cuanto a la ejecución de asesinatos y al aroma existencialista/cínico/cansino que recorre ambas películas.
Pero la definitiva gran ventaja de Collateral es que el asesino acaba muerto.

24/3/08

"Perdidos" en "La habitación de Fermat"

Volví a ver esta película porque, aun siendo pequeña, me parece todo un ejemplo de sabiduría en el aprovechamiento de los medios. Los directores no se muestran cutres ni pedigüeños (somos nuevos, no tenemos medios, pasad por alto nuestros defectos) y tampoco presuntuosos (tenemos una gran sabiduría cinematográfica, mirad qué pedazo planos, imaginad lo que habríamos hecho con más presupuesto).
Saben lo que tienen, hasta donde pueden llegar y cuáles son sus límites. Así que me puse a mirar los pequeños detalles, para ver si los agujeros en el guión eran más grandes o más pequeños de como los percibí en el cine.
Los pequeños detalles. Es el momento del clímax, Oliva confiesa su secreto, un secreto que pone en contacto a tres de los personajes. Hay una reacción violenta, una palm que se estrella contra el suelo y queda averiada. Esa palm. Un personaje la recoge y, brevemente, en tres ocasiones, en cosa de un segundo, podemos ver la pantalla de la agenda. Allí está escrito: ERROR NUMBERS. Y, debajo, ¿sabes qué números aparecen?
Exacto: esos.
4-8-15-16-23-42
Perdidos en La habitación de Fermat.
¿Cómo no va a gustarme el cine?

23/3/08

Dark Angel

Max es la chica modificada genéticamente para convertirse en el soldado perfecto. Lógicamente se escapa del laboratorio militar y acaba trabajando en una empresa de mensajería de un cercano futuro un poquito post-apocalíptico: las consecuencias de un PEM (Pulso electromagnético).
Dark Angel se estrenó un año antes que Alias pero parece haber lustros de diferencia en cuanto a concepción de la serie. Dark Angel mantiene la tradicional estructura de capítulos cerrados, repeticiones innecesarias para aclarar las cosas por si alguien llega de nuevas, tímidos intentos de construir una trama subterránea que afiance la historia a través de los amigos perdidos...
Duró un par de temporadas porque se les ocurrió dejar abierto el último capítulo de la primera y había que acabar de alguna manera. Es un capítulo con tres finales, como si alguien estuviese dudoso de si debían seguir adelante o no con la aventura.
Hace poco leí en alguna parte (en varias partes) que un grupo de científicos había llegado a la conclusión de que Jessica Alba era la perfección antropométrica. La primera pregunta sería: ¿no tenían nada más importante que hacer? Aun suponiendo que fuese cierto, que me da igual, pienso que uno de los graves problemas de Dark Angel era Jessica Alba. Su variedad de registros interpretativos es idéntica a la de Skippy, el canguro de Waratah. Si has visto alguna vez la serie de Skippy acabarás coincidiendo conmigo.

21/3/08

Chico malo

Hellboy tiene uno de esos arranques tan gansos que en manos de cualquier otro se derrumban en el minuto cinco y dejan derrumbados a los espectdores a los 10. Con tortícolis al despertar.
Rasputín y los nazis invocan a los dioses del Caos para que les echen una mano en sus tropelías. Pero la criatura que llega, Hellboy, les sale rana y, sin dejar de ser un gamberrete, decide enfrentarse al Mal. Toma inspiración en Lovecraft.
Guillermo del Toro coge al bichejo por los cuernos (con manicura) y le sobran manos para controlar monstruos viscosos, terror, acción, humor, romanticismo...
Lo que mola de Hellboy es su incorrección política, que es feo, bruto, fuma puros (cuando no le ve su padre adoptivo), bebe cervezas, dice tacos, y lleva lo imprescindible para funcionar por la vida: un rosario y un pistolón al que llama la samaritana.
Me recuerda a esos tipos duros, a esos románticos sentimentales, a Humphrey Bogart y Bruce Willis, a esa sanísima filosofía que dice que lo que hay que hacer se hace y punto.
En el estío veremos qué tal es la segunda parte.

19/3/08

Como la vida misma

Steve Carell sigue sumando puntos como actor. Con cosas como Pequeña Miss Sunshine y Como la vida misma, certifica que no es, simplemente, un cómico que hace pasayadas. Además le acompaña Juliette Binoche y ambos consiguen eso que es tan importante en una comedia romántica: la química.
¿Te acuerdas de Frank Capra, Billy Wilder, Howard Hawks? ¿De James Stewart, Cary Grant, Doris Day, Katharine Hepburn? ¿De Vive como quieras, El apartamento, Uno, dos, tres, La fiera de mi niña? ¿Recuerdas cómo cada personaje secundario estaba tan definido como uno principal, cómo las múltiples tramas crecían y se desmadraban, cómo se unían en un final apoteósico?
Pues eso es lo que echo de menos en las comedias modernas. Como la vida misma tiene un buen guión, tiene momentos ingeniosos y el chico y la chica acaban juntos. Pero es como si estuvieran a esto de conseguir la genialidad sin lograrlo jamás.
Supongo que "esto" es un salto galáctico: lo que separa a la gente normal de los genios.

18/3/08

Horton

La gente es la gente. Y cuando la gente se pone a pensar, da con ideas bastante simpáticas. ¿Qué mejor cosa para simbolizar a una madre sobreprotectora que esa mamá canguro? Imagino que muchos niños, agobiados por la mirada fija de su progenitora en el cogote, comenzarán a regalar en el día de la madre camisetas, chapas, pines y pañuelos con el motivo de esta mamá canguro. Debajo se podría escribir A LA MEJOR MAMÁ o bien MADRE NO HAY MÁS QUE UNA, AFORTUNADAMENTE.
Horton tiene muchos golpes graciosos y un fondo de ideas en plan revoltijo en el que es fácil revolver un rato, sacar la mano con una de ellas y discurrir durante un tiempo.
Me quedo con el primer plano porque es un compendio del estilo e intenciones de la película: Horton moldea sus orejas para fabricarse un gorro de baño. Muy gracioso.
Por cierto: 19 películas de estreno para antes de la Semana Santa y Las crónicas de Spiderwick y Horton son lo más atractivo. Si los exhibidores siguen proyectando todo lo que les ofrecen, un día de estos veremos cosas grabadas con móviles. De hecho, Brian de Palma ya intentó colarnos un gol así con Redacted y, claro, recibió bofetadas hasta en el cielo del paladar. A ver si espabila.

17/3/08

Tomates y otras armas mortales

Hace poco dije que me sentía frustrado porque en Mi monstruo y yo se omitían las muertes. Gracias a Dios el mundo es grande y existen gentes para todos los gustos. También directores de cine que no tienen reparos morales al presentarnos caos, violencia, muerte y destrucción dentro de una película infantil.
Bueno, tampoco es para tanto. Ocurre que Las crónicas de Spiderwick me ha aliviado de la frustración devolviéndome ese entusiasmo por el cine infantil cuando está bien hecho. La cosa tiene su parte de drama, con Mary-Louise Parker, Sarah Bolger y Freddie Highmore (por duplicado) inmersos en continuas broncas y batallas verbales familiares. El mérito de Mark Waters es que dosifica el humor sin ridiculizar las situaciones; las contempla con ironía.
Me encantó que los duendes hirieran seriamente a los protagonistas y estos respondieran adecuadamente: espadazos, fuego y, en caso de necesidad extrema, incluso el recurso al tomate. La cocina llena de babas viscosas es un triunfo que no se lograba creo que desde Gremlins. Nada de ñoñerías, hombre, que para eso ya tenemos el chiki-chiki.
Por cierto, hoy, Juan Manuel de Prada, dice que el chiki-chiki es un acto de risueño y saludable vandalismo. A mí, por más que lo vistan de alternativo, me parece ñoño.

16/3/08

Lo que hay que hacer (IV). Morgan Freeman

Con este vídeo pretendo demostrar que Morgan Freeman también fue joven alguna vez. Supongo que nunca fue niño, pero joven sí.
No tengo ni la más remota idea de por qué, para anunciar Listerine, los pubicistas han ido a escoger una profesión tan peculiar como la de reparador de postes eléctricos. No sé cuántos millones de pesonas se sentirán identificadas con la pose de los protagonistas del anuncio o a quién va dirigido exactamente el spot.
Pero allá ellos. Morgan Freeman está ahí. Antes de ser el malvado capitán de policía Doyle, antes de ser Red en Zihuatanejo e incluso antes de ser Dios con traje blanco.

15/3/08

Dragon Wars

Es una sensación muy fuerte eso de ver a Gandalf peleando contra Darth Vader, a trolls de las montañas contra tanques del ejército americano y espadas láser contra rifles de asalto. En determinado momento estamos presenciando Terminator 2 y, en el siguiente fotograma, hemos pasado a las torres de Isengard con Saruman desgañitándose a pleno pulmón.
Tuve que rebobinar una escena porque no me lo creía. Después la detuve para descacharrarme de risa. La cosa es más o menos así: un agente del FBI va a disparar a la chica (da igual el porqué, de verdad), el chico se interpone de un salto en el momento del disparo y cae al suelo. Otro agente del FBI mata al primero. El chico caído se levanta. Le preguntan si está bien... ¡y dice que sí! ¡No le dieron! Esperé un rato a ver si explicaban que eso era una película y las balas de fogueo
Ahora bien: Michael Bay y sus Transformers son meros aprendices al lado de este desmadre de recalificación urbanística. Madre mía, la pasta que se han fundido.
Ah, y antes de que me lo preguntes: en mi casa hay gente que, además del cine que les pongo, quiere ver ciclos temáticos sobre explosiones de gasolineras. Me pidieron que la alquilase.

12/3/08

Lago Ness

Mi monstruo y yo es un entretenido cuentecillo para peques.
La política de no violencia me resulta un poco cargante a veces. Me habría encantado ver cómo el monstruo se zampa al perro. Lo esperaba yo y lo esperaba toda la sala de cine. Supongo que los chavales más que nadie. El perro era feo, con mala leche y un auténtico plasta. Todo el mundo deseaba asistir a su destrucción. Pero... hay una elipsis. En el momento decisivo cambia el plano. Nos sentimos frustrados. Ya casi se oían los aplausos y las palmas estaban en el aire. No pudo ser.
El huevo. Pues del huevo lo que salió fue turismo. Como la historia nos la cuentan en un largo flash-back, podemos ver en qué se han convertido los alrededores del lago Ness.
Todo lleno de guiris con los que es fácil identificarse. Porque los paisajes son bonitos, bonitos.

11/3/08

10.000

Según Roland Emmerich, en el año 10.000 a. C. los humanos convivían con mamuts lanudos, tigres dientes de sable, unos polluelos carnívoros de 10 metros de altura y pirámides. Por mí no hay problema. Al fin y al cabo, ahí está Hace un millón de años, con incongruencias similares, y sigue estando en las estanterías de muchos videoclubs. Sea por Raquel Welch o porque la aventurilla no estaba mal del todo. No pretendo comentar nada de todo eso.
La serie B se caracteriza porque, con pocos medios, trata de imitar los contenidos de las grandes producciones. 10.000 es la primera película de la Historia del Cine que, con todos los medios del mundo, emula los contenidos de la serie B.
Que digan lo que quieran pero Emmerich acaba de inventar un nuevo género. No sé si es el ultraB, el highB o el B-fat. Realmente sorprendente. 10.000 prometía ser la película espectáculo del año, mayor que Parque Jurásico, mayor que Apocalypto, mayor que King-Kong. Y resulta que el espectáculo se caracteriza por su ausencia, el drama por su aburrimiento y la trama por su falta de imaginación.
Bueno. Ha inventado un nuevo género. Con lo fácil que es la cosa digital, seguro que tiene muchos seguidores.

8/3/08

Tortolitos

Como ya he comentado, El último justo no me dejó con la sensación de haber visto una película de cine, así que aproveché una de las ventajas de los multisalas: meterme en otra sesión pues nadie vigilaba los pasillos.
Entré en Rise: Cazadora de sangre. Vi la media hora final o poco más de modo que no voy a juzgarla. Me parece, de todos modos, que Lucy Liu tiene la suficiente madera de actriz como para meterse en estos berenjenales. La cuestión es que allí me encontré con los dos tortolitos, él y ella.
Él y ella son dos veinteañeros que, se nota a la legua, están absolutamente colgados el uno por el otro. Los dos tienen problemas de sobrepeso (serios problemas de sobrepeso), visten como en los años 70 y se peinan de forma inclasificable. No soy experto. Quizá alguien fuese capaz de clasificarles dentro de alguna tribu urbana. Yo no puedo.
Me los encuentro en todas las películas de terror. Sweeney Todd, por supuesto, pero también Plaga final, 30 días de oscuridad, Monstruoso, Aliens versus Predator 2... El terror les resulta tan irresistible como los inseparables envases de palomitas XXL de los que siempre van provistos.
No sé nada más de ellos. Pero cuando esta mañana les he visto en el videoclub, alquilando Dragon Wars, supe que tenía que dedicarles una entrada.

7/3/08

Hay algo que no me cierra

Encontré en el videoclub la primera temporada de Hermanos y detectives y como aparecía la cara de Rodrigo Noya no pude resistirme.
Realmente, una buena serie. Una mezcla contundente de comedia, correctas intrigas policiacas y hasta ocasionales escenas de acción. El capítulo en el que ven la trilogía de El padrino es de lo mejorcito que he visto en una serie española.
Es una auténtica pena que Tele 5 no pueda quitarse de encima ciertos tics que la cadena mantiene como marca de fábrica. Es una pena porque acaban por convertir en clichés a personajes que podrían haber dado mucho más de sí. Insistir en la tía buenorra, el tío salido y algún comentario irreverente por capítulo, reduce la caracterización de los personajes a una mínima importancia. Por ejemplo, Blasco, Zambrano y Fortunato tienen la misma personalidad: vagos, salidos, irresponsables. Son intercambiables y da igual que intervenga uno u otro. A Carmen le pasa igual. Es la chica bombón y no saben contarnos de ella nada más. Están mucho mejor Dani, Lorenzo, Mansilla y María. Kamijo tiene sus puntos.
Pero a lo que iba: lo mejor de la serie es lo que pertenece a Damián Szifrón, a los guionistas argentinos, a miras más amplias. Cuando el guión se vuelve demasiado localista, cuando se nota la mano autóctona, llega a aburrir con interminables diálogos en el bar.
Pues bien. Parece que, en la segunda temporada, el papel de los guionistas españoles va a ser más importante.
-Sospechoso, ¿no?

6/3/08

Las hermanas Bolena

¿Por qué la crítica se ha ensañado tanto con esta película?
Es una producción bastante decente y apañada. No logra escaparse de una cierta teatralidad pero eso le pasa al 99% de las películas de época. Es un género difícil. Desde luego es muy superior a la reciente Elizabeth.
Scarlett Johansson no está peor que otras veces, Natalie Portman (mejor actriz) está tan bien como siempre, Ana Torrent impone en sus escasas apariciones y la tensión se mantiene. Buena parte del metraje se basa en intrigas de alcoba pero de eso se trataba, ¿no? Enrique VIII y tal. Quizá se podía esperar más de Eric Bana o quizá alguien estaba esperando que Portman/Johansson organizaran un escandalazo.
No hubo suerte: se llevaron bien durante el rodaje.
También es verdad que ya conocemos la historia: Ana Bolena hace que Enrique VIII pierda la cabeza, metafóricamente, por ella. Y el rey le devuelve el favor de un modo extraordinariamente literal.
Me alegro de que tampoco en ese sentido hubiera sorpresas.
No me aburrí nada durante las casi dos horas.

5/3/08

27 vestidos

Hubo un tiempo en que Hollywood sabía lo que significaba la palabra inspiración. Se inspiraban en otras películas y escribían guiones originales. Ahora, inspiración viene a significar algo así como plagiar a muchos.
27 vestidos viene a ser una variante de El secreto de vivir de Frank Capra modernizada con Novia a la fuga, Como perder a un chico en 10 días, La boda de mi mejor amigo y un largo etc. Eso significa que no logra aportar nada nuevo.
27 vestidos tenía dos alicientes: un guión de Aline Brosh McKenna, la que había demostrado ingenio en El diablo viste de Prada, y la presencia de Katherine Heigl. La primera señora (o señorita) defrauda por completo; la segunda hace lo que puede pero voto por darle más oportunidades. No lo hace mal.
Lo de la foto es uno de los trajes de dama de honor de la novia. Eso son amigas.

4/3/08

Todavía no me lo creo

Teo es un tipo que lo tiene bastante chungo. Es el último de los 36 justos. Los 35 restantes han sido asesinados a lo largo de los milenios por una secta. Ahora persiguen a Teo para clavarle un puñal ritual (el de la foto). Cuando los 36 mueran algo gordo va a pasar. Ahora, los de la secta persiguen a Teo. Son los malos.
Pero hete aquí que están los buenos. Los buenos protegen a Teo. Lo protegen de un modo bastante peculiar. Todo vale con tal de que no le claven el puñal: pegarle un tiro, estrangularle o matarle de cualquier forma imaginable. Así se reencarnará. Con amigos así, para qué quiere uno enemigos.
Lo peor de El último justo es el aura pretenciosa con que se reviste.
1. La estética matrixera. La peli empieza con un cursor en la pantalla de un ordenador, cifras y una conversión a caracteres del alefato. Después un edificio con cabinas de trabajo como aquéllas en las que trabajaba el señor Anderson. Esto dura unos 10 minutos. Luego se cansan.
2. La estética Bekmambetov. Ya hablé de este señor ruso y, aunque le puse de vuelta y media, no me han hecho caso y tiene admiradores: cámara lenta para mostrarnos a un señor que camina por el pasillo, contrapicados sin sentido, delirios varios con la cámara...
3. Estética intelectualoide. Un plano fijo de un par de minutos filmando una habitación sin gente en la que no pasa ni pasará nada.
4. Estética cutre. Es en lo que suelen acabar estas cosas. El protagonista, oculto tras un muro, se levanta. Una cámara de fotos se le cae. El objetivo se acerca para que lo veamos bien y... ¡un círculo amarillo aparece trazado sobre los fotogramas para que quede más claro!
Pues eso: han pasado 24 horas y todavía no me creo que estas cosas las pongan en pantallas de cine.

1/3/08

En el punto de mira

Si piensas la película, no hay por dónde cogerla. Lo que pasa es que todo ocurre tan rápido que no te deja tiempo para pensar.
Si tratas de organizar el guión, se te cae de las manos. Lo que pasa es que, en sentido estricto, no hay guión. Sólo montaje.
En el punto de mira tiene más trampas y mentiras que un debate electoral. Y, como cualquier debate electoral, es divertidísimo. No te crees nada de lo que te están contando pero, mientras dura, puedes soltar adrenalina.
No hay 8 puntos de vista. Hay 5. En el punto de vista 6 se mezclan unos cuantos. Hasta en eso es una película falsa. Y la cronología no hay quien se la trague pues unas veces se estira y otras se acorta. Pero da igual, es un homenaje a la acción por la acción, al frenesí, las persecuciones, el puro ritmo.
Entretenidísima.
O a lo mejor me pesan los casi 7 años que viví en Salamanca.