5/11/06

Enredos móviles

Aquellos que vieron la versión original japonesa de The Ring, quedaron defraudados con la versión americana porque no añadía nuevo. Eso es lo que me sucede a mí con Infiltrados. He visto la original de Hong Kong, Juego sucio, y me parecía suficiente. Por supuesto Scorsese tiene más medios, cierta ideología propia y modos occidentales. Pero lo más importante de la trama (los teléfonos móviles, las situaciones de especial intensidad, la doctora...) ya estaba en Juego Sucio. Y como ya sabía lo que iba a pasar, Infiltrados, no sólo me dejó indiferente sino que sus dos horas y media de metraje se me hicieron pesadas a ratos. Tanto una como otra tienen un final que, en mi opinión, no se sostiene. En Juego sucio, el poli malo mataba al jefe mafioso porque había descubierto lo lejos que podía llegar en la policía si se lo cargaba y se convertía en un poli bueno. En Infiltrados, el poli malo mata al jefe mafioso porque cree que es un chivato del FBI. Ambas cosas son insostenibles. Pero eso es lo que hay y, por tanto, me parece más acertado el final de Juego sucio: sin la última escena. Scorsese, por supuesto, tiene que incluirla porque eso es lo que responde a la ideología que trata de transmitir en todas sus películas: la violencia es la que construye la sociedad. En cualquier caso creo que aquí hay un par de asuntos interesantes. En primer lugar me parece que dice muy poco de Scorsese el hecho de que ahora se dedique a hacer un remake. Los directores que revolucionaron Hollywood a finales de los 60 y comienzos de los 70 están claramente en situación otoñal: Spielberg, Lucas, Scorsese, Ford Coppola, de Palma, Lynch... Es urgente una renovación: de estilos, temas y gente. Y, en segundo lugar, sigo sin entender por qué la crítica le trata bien a Scorsese. Pocos dicen que es un remake y los que lo dicen lo hacen muy de refilón. La verdad es que Juego Sucio era bastante buena (aunque con menos medios que la americana tampoco andaba escasa). Si uno se limita a hacer una copia, sólo que más bestia, no parece suficiente. Nunca he sido, precisamente, un admirador de Leonardo di Caprio. Pero en esta ocasión debo decir que de no ser por él, la película me habría enganchado menos aún. Di Caprio es, con mucho, lo mejor que tiene Infiltrados. Finalmente: siempre que veo una película en la que aparece Mark Wahlberg salgo del cine con dolor de cabeza. La verdad sobre Charlie, El planeta de los simios, Infiltrados.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

superafavor de Mark W en esta peli. y de Martin Sheen. Confundí bastante a Mat Damon y di Caprio. Y en general me gustó, aun pareciéndome bastante excesiva, menos el final, estúpido donde los haya

Individuo Kane dijo...

Bien. Quizá no me he expresado bien respecto a Mark Wahlberg. Me parece que en esta película actúa bien. Lo del dolor de cabeza es un hecho, no una metáfora ni una manía. No digo que exista una relación causa-efecto. Simplemente me ocurre. La vida es así.
No tengo nada en contra de él.